Qué es el Hoovering y cómo detectar si tu ex manipulador intenta atraparte otra vez
Te decimos en qué consiste este comportamiento tóxico tras finalizar una relación y cómo evitar que tu expareja te haga Hoovering

Casi todos hemos pasado por una ruptura amorosa. No es un proceso sencillo ni lineal, pero eventualmente se aprende a vivir con ello y se curan las heridas después de un tiempo tras mucho trabajo interno.
Cuando se ha vivido una relación violenta o tóxica, sanar es aún más complicado -mas no imposible-; sin embargo, cuando se logra, muchos ex regresan justo cuando creías que ya estabas bien.
Pero no es un encuentro o regreso casual o desinteresado. Muchas veces las exparejas -sobre todo aquellas con tendencias narcisistas- vuelven con el único objetivo de manipular nuevamente a su ex.
A este comportamiento tóxico se le conoce como Hoovering. A continuación te explicamos en qué consiste y cómo detectar si tu ex manipulador trata de atraparte otra vez.

¿En qué consiste el Hoovering?
De inicio, es importante mencionar que el Hoovering es una técnica de manipulación que toma su nombre de la marca de aspiradoras Hoover, pues lo que se busca es ‘aspirar’ a la víctima de nuevo a la relación.
Y vale aclarar que esto no es una condición clínica, sino que es un comportamiento detectado por especialistas en salud mental, organizaciones que apoyan a víctimas de violencia y coaches de pareja.
Un artículo de la Universidad del Cuyo precisa que el Hoovering ocurre cuando la persona que ya causó daño a su expareja rompe el contacto cero y regresa con promesas vacías, manipulación emocional y hasta presión.
Cómo identificar si te quieren hacer hoovering
Dicho artículo llamado “No es amor, es manipulación”, precisa que, aunque el Hoovering es más común en las relaciones amorosas, lo cierto es que también se puede dar en amistades y familias.
Lo que sí es un hecho es que no se trata de una reconciliación genuina, sino un esfuerzo de la persona por recuperar ese control y poder que siente que perdió cuando se dio la separación.
Algunas de las formas más comunes en que una expareja manipuladora trata de aplicar el Hoovering son:
- Mensajes ‘inocentes’: Un mensaje aparentemente inofensivo como ‘¿Cómo has estado?’ o ‘Feliz cumpleaños’ puede ser el primer anzuelo. La ‘manipulación’ es que no busca iniciar una conversación profunda, sino romper el contacto cero y ver si respondes. Si lo haces, ahora sabe que aún tiene una puerta abierta
- Declaraciones de cambio: Una de las tácticas más recurrentes es la promesa de haber cambiado. Tu ex dirá que fue a terapia, que reflexionó sobre sus errores o que "no puede vivir sin ti". Pero no son más que palabras vacías que se desvanecen cuando se recupera el control
- Culpa o lástima: Es casi probable que la persona manipuladora se haga la víctima, y te envie mensajes sobre una crisis personal, enfermedad repentina o una situación trágica en la que solo tú puedes ayudarle. ¿Para qué? Para hacerte sentir pena y que acudas a su rescate
- Falsa emergencia: Así como en la táctica anterior, tu ex podría crear una emergencia -como llamarte diciendo que su auto se descompuso o que perdió la cartera- para ‘forzarte’ a entrar en contacto. Pero no es una necesidad real, sino un medio para recuperar tu atención
- Recordar buenos momentos: La persona abusiva te enviará fotos, mensajes o videos de momentos felices que vivieron juntos para idealizar el pasado y hacer que se te olvide el abuso, apelando a la nostalgia y la esperanza de que la relación puede volver a ser así
- Usar a terceros: En ocasiones, tu ex manipulador utilizará a amigos, familiares o los propios hijos para enviarte mensajes y presionarte para que le contactes o perdones. Es una especie de presión social de la cual podría ser muy difícil escapar

¿El Hoovering afecta más a las mujeres o a los hombres?
Ésta no es una práctica exclusiva de un género, sino más bien es muy común en personas con rasgos narcisistas y manipuladoras. Sin embargo, hay varios factores psicológicos, sociales y culturales que hacen que las mujeres sean más propensas a ser víctimas. Entre ellos:
- Las mujeres a menudo son socializadas para ser cuidadoras y conciliadoras, lo que puede llevarlas a sentir una mayor responsabilidad, empatía y hasta culpa por el bienestar emocional de su pareja, incluso después de la ruptura
- El abuso en una relación a menudo no es constante, sino que viene en ciclos que incluyen fases de arrepentimiento, promesas y la ‘luna de miel’. El Hoovering ocurre después de la ruptura, donde la víctima puede estar idealizando los buenos momentos y bajando la guardia, haciéndola más susceptible a los intentos de manipulación
- Aunque el Hoovering es psicológico, el abuso puede haber creado dependencia emocional, donde la víctima siente que no puede vivir sin la pareja; pero no se descarta que en muchos casos también pueda haber dependencia económica, lo que hace aún más difícil cortar lazos
- En algunas culturas, se espera que las mujeres perdonen y mantengan la unión familiar a toda costa; esta presión social puede hacer que la víctima se sienta obligada a reconsiderar la relación, especialmente si la expareja usa a terceros para presionar
- Las víctimas de abuso suelen tener baja autoestima o han experimentado traumas previos, por ello el abusador busca a este tipo de personas y utiliza sus vulnerabilidades para ejercer control, lo que hace que el Hoovering sea una herramienta muy efectiva
¿Se puede esquivar el Hoovering de tu ex?
Ramani Durvasula, una de las mayores expertas en narcisismo, explica en el podcast The Jordan Harbinger Show que, aunque parece abrumador, sí es posible romper el ciclo con una persona manipuladora o narcisista.
Y enlista durante la conversación una serie de pasos que se pueden seguir cuando se ha detectado que una expareja quiere hacer o ya está aplicando Hoovering:
- Contacto cero o mínimo: Es la estrategia más importante y consiste en cortar toda comunicación (llamadas, mensajes y redes sociales) para negarle la energía y atención que busca. En los casos donde hay hijos o negocios en común, lo mejor es limitar la interacción estrictamente a los asuntos necesarios y siempre de forma escrita
- Aceptación radical: Debes aceptar que la persona no va a cambiar. Y eso significa dejar de esperar una disculpa, remordimiento o que reconozca su comportamiento. Es difícil, pero también vital para sanar
- No justifiques su comportamiento: Tienes que evitar volver a caer en la trampa de justificar sus acciones o buscar la razón detrás de su abuso. La única verdad es que su comportamiento es tóxico para tu bienestar
- ‘Focus’ en tu recuperación: El objetivo es reconstruir tu vida, tu autoestima y tu sentido de identidad, y eso incluye terapia, rodearte de un círculo de apoyo y redescubrir tus hobbies e intereses

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