Hechiza a todos en tu casa con esta cerveza de mantequilla que sabe a Hogwarts
Aprende a preparar una cerveza de mantequilla casera, dulce, cremosa y sin alcohol, perfecta para revivir la magia de Hogwarts.

Transpórtate al mundo de Harry Potter con una receta muy especial: cerveza de mantequilla casera para el regreso a Hogwarts. ¡Es mágica y una bebida icónica de este universo!
Imagina llegar al Callejón Diagon, con el aire cargado de magia y anticipación, y un sorbo tibio y dulce te transporta automáticamente a Hogwarts: eso es lo que logra la cerveza de mantequilla.
Esta bebida, que en los libros se sirve tanto caliente como fría en posadas como Las Tres Escobas, combina sabores de toffee suave, mantequilla y un toque efervescente que resulta tanto reconfortante como encantador. ¡Incluso puedes encontrar los helados!
Aunque en los libros la cerveza de mantequilla se describe como ligeramente alcohólica, en los parques temáticos fue recreada como una bebida sin alcohol, con el dulce de butterscotch como base principal.
Esta versión moderna, no solo es apta para magos de todas las edades, sino que mantiene ese sabor nostálgico y acogedor que tanto disfrutamos. ¿Y si las acompañas con las donas de Krispy Kreme edición del niño mago?
Esta cerveza de mantequilla es refrescante y cremosa, perfecta para acompañar un maratón de películas de Harry Potter o una tarde junto a la chimenea de la sala común de Gryffindor.

Cómo hacer cerveza de mantequilla casera
Ingredientes (para 4 porciones):
- 2 litros de soda de crema bien fría
- ¼ cucharadita de extracto de mantequilla
- ¼ cucharadita de extracto de caramelo
- 1 taza de crema para batir
- ½ taza de cobertura de caramelo tipo butterscotch
- ¼ de taza de azúcar glass
Preparación:
- En una jarra grande, combina la soda de crema con los extractos de mantequilla y caramelo. Mezcla suavemente para no perder demasiada efervescencia.
- En un bowl frío, bate la crema hasta formar picos firmes. Incorpora la cobertura de caramelo y el azúcar glass para obtener una espuma dulce y esponjosa.
- Vierte la mezcla de soda en vasos o tazas transparentes, dejando espacio para la crema.
- Corona cada porción con una generosa capa de crema batida y, si deseas, añade un chorrito extra de caramelo sobre la espuma.

Variantes para personalizar tu cerveza de mantequilla
- Versión caliente: para disfrutar en días fríos o sentirte como en una épica velada en Hogwarts, calienta suavemente la mezcla de soda, extractos y caramelo en una olla, sin hervir, y sirve con la crema espumosa encima, replicando esa sensación de calidez y camaradería.
- Versión fría: si prefieres algo más refrescante, congela cubitos de soda de crema y licúalos junto con helado de vainilla y extractos para lograr una cerveza de mantequilla estilo frappé, perfecta para tardes soleadas en Hogsmeade.

¿Por qué esta cerveza de mantequilla nos parece tan mágica?
La cerveza de mantequilla recrea esa sensación acogedora y dulce que los fanáticos asocian con Hogwarts. Su sabor a caramelo y mantequilla evoca las delicias hogareñas y el calor del mundo mágico.
Además, al ser una bebida no alcohólica, se convierte en una alternativa ideal para lectores y fans de todas las edades, sin perder el encanto de su versión original. La espuma cremosa no solo aporta una textura placentera, sino que realza el estilo icónico de la bebida servida en posadas como Las Tres Escobas.
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