Empanadas otoñales de camote: sabor cálido y tradición en cada bocado

Una opción que encaja perfectamente con otoño es la de las empanadas dulces de camote, se trata de una receta acogedora con todas las vibras de esta estación del año, con un sabor nostálgico, reconfortante y cálido.

Ese tubérculo de color anaranjado intenso, suave al paladar y con un matiz naturalmente dulce, se convierte en el centro de un pastelito estilo empanada que invita a saborear sin prisa.

Estas empanadas de camote se consideran un abrazo caliente en forma de postre gracias a su relleno especiado y su masa ligera y hojaldrada. Además, esta receta es un homenaje a la tradición y a la cocina casera: en muchos hogares latinoamericanos las empanadas de camote se preparan durante épocas festivas o para acompañar una bebida caliente en las tardes de otoño‑invierno.

Al prepararlas tú mismo, tienes el control de los ingredientes, el nivel de dulce y las especias, lo cual permite adaptarlas al gusto personal y al contexto gastronómico que buscas.

No es causalidad que el camote sea una de las joyas en la comida mexicana, pues se ha utilizado desde tiempos remotos para preparar diversos platillos, ¡las culturas mesoamericanas aprovechan todo! Esto con información del Gobierno de México.  

Aunque pueden disfrutarse en cualquier época, las empanadas de camote son ideales para la temporada de otoño, gracias a su sabor y complementos, como la canela, clavo, nuez moscada y café o chocolate caliente al lado. 

Receta de empanadas dulces de camote 

Ingredientes:

• 500 g de camotes pelados y cortados en cubos
• 100‑120 g de azúcar
• 1 cucharadita de canela en polvo, 
• ¼ cucharadita de clavo (opcional)
• Ralladura de ½ limón (opcional)

Para la masa:

• 300 g de harina de trigo
• ½ cucharadita de polvo de hornear
• Una pizca de sal
• 80‑100 g de mantequilla fría 
• 1‑2 cucharadas de azúcar
• 60‑80 ml de leche fría
• Huevo batido para barnizar
• Azúcar extra para espolvorear al final.

Preparación:

1. Precalienta el horno a 180 °C.
2. Cuece los camotes en una olla con agua hasta que estén muy tiernos, aproximadamente por 10‑15 minutos.
3. Escurre los camotes y haz un puré fino con ellos; añade el azúcar, la canela (y clavo si usas), la ralladura de limón. Mezcla bien y deja que el relleno se enfríe un poco para que sea fácil de manejar.
4. Prepara la masa: en un bowl, mezcla la harina, el polvo de hornear, la sal y el azúcar. Agrega la mantequilla fría en cubos pequeños y mezcla con los dedos hasta obtener una textura arenosa. 
5. Añade la leche fría poco a poco hasta que la masa tenga consistencia suave, dóblala, envuélvela en plástico y refrigérala 20‑30 minutos.
6. Extiende la masa sobre superficie enharinada hasta grosor de unos 3‑4 mm. Corta círculos de unos 10‑12 cm de diámetro. 
7. Coloca en cada círculo una cucharada generosa de relleno de camote (evita que quede demasiado para que no se abra) y dobla formando media luna. Sella los bordes con un tenedor.
8. Coloca las empanadas en una bandeja con papel vegetal, haz un pequeño corte arriba para que ventile, barniza con huevo batido y espolvorea azúcar si deseas. Hornea 20‑25 minutos hasta que estén doradas.
9. Deja enfriar 5‑10 minutos antes de servir las empanadas de camote, puedes acompañarlas con un cafecito. 

Tips extra para preparar las empanadas de camote:

• Añade a la mezcla de camote un poco de queso crema o tofu suave para versión vegana cremosa, o unos trozos de manzana cocida para dar estallido ácido‑dulce.
• Puedes infusionar el puré con una rama de canela o un toque de anís estrellado al hervir los camotes.
• Sirve las empanadas en una bandeja de madera con hojas secas decorativas, espolvorea azúcar glas y acompaña con una cucharada de helado de vainilla o crema batida.
• Un café especiado con cardamomo, un chocolate caliente con chispas de canela, o un té chai combinan genial.
• Puedes usar masa integral o mitad harina integral, endulzar con azúcar de coco o jarabe de arce, y hornear en lugar de freír para menor grasa.

Cómo conservar las empanadas de camote:

Estas empanadas se prestan bien para prepararse con antelación o para congelar: una guía indica que pueden hacerse en lotes, congelar antes de hornear y después hornear cuando se necesiten. 

Una vez horneadas y completamente frías, guárdalas en recipiente hermético hasta 2‑3 días, o congélalas hasta por 1‑2 meses. Para recalentar, precalienta el horno unos minutos y recalienta a 160‑170 °C hasta que se calienten internamente y la masa recupere textura ligeramente crujiente.

Con estos cuidados, tendrás unas empanadas dulces de camote perfectas para la época otoñal, listas para disfrutar en cualquier momento.