¿Problemas con la vesícula biliar? Podrías llegar a urgencias si ignoras estos síntomas

Tu vesícula biliar es un pequeño depósito bajo el hígado que almacena la bilis, el líquido para digerir las grasas. Aunque es pequeña, puede volverse la protagonista de una emergencia médica si se obstruye o se inflama gravemente, una condición conocida como colecistitis.

Si experimentas un dolor abdominal agudo y persistente, es importante que entiendas la diferencia entre un simple "cólico" y una situación que requiere atención inmediata, especialmente el riesgo de que la vesícula se desgarre o se reviente.

El dolor abdominal en el cuadrante superior derecho, que se vuelve insoportable y se acompaña de fiebre, es una señal de alarma que nunca debes ignorar. Si esta inflamación progresa, debes buscar atención médica.

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¿Por qué si se te revienta la vesícula biliar debes ir a emergencias?

Una vesícula biliar que se revienta o perfora no es solo una molestia, es una amenaza para tu vida que exige cirugía inmediata. Cuando la inflamación (colecistitis) se mantiene y agrava, los tejidos pueden morir por la falta de circulación (gangrena), y la pared del órgano puede desgarrarse.

Debes acudir a emergencias porque la perforación desata una serie de riesgos graves, como explican el Servicio Nacional de Salud de Reino Unido (NHS) y los Institutos Nacionales de Salud en EU (NIH):

• Infección generalizada (Peritonitis): El desgarro esparce el contenido infeccioso y la bilis dentro de tu cavidad abdominal, provocando una infección grave que puede llevar a la sepsis.
• Gangrena: La inflamación crónica y la hinchazón pueden llevar a la muerte del tejido de la vesícula. Esto aumenta drásticamente el riesgo de rotura y la diseminación de la infección.
• Abscesos: La progresión de la enfermedad grave puede sugerir la presencia de bolsas de pus (abscesos) cerca de la vesícula.
• Obstrucción intestinal: Un cálculo grande, al perforar la pared de la vesícula, puede pasar a tu intestino delgado, creando una obstrucción dolorosa.
• Riesgo de muerte: La colecistitis no tratada (un tipo grave de inflamación) tiene una tasa de mortalidad alta, llegando hasta el 65% de los casos.

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¿Qué causa problemas con  la vesícula biliar?

La raíz de los problemas de tu vesícula se encuentra, en más del 95% de los casos, en los cálculos biliares.

Estos cálculos son la causa más común de la inflamación. Se forman cuando la bilis contiene un exceso de colesterol, o una deficiencia de sales biliares, o simplemente porque la vesícula no se vacía completamente.

Estos son los principales problemas de la vesícula biliar, de acuerdo con Cleveland Clinic y el Manual MSD:

• Cálculos biliares (Colelitiasis): Son la causa más común y se desarrollan por la acumulación de productos biliares, generalmente colesterol, en forma de bultos sólidos.
• Obstrucción del conducto cístico: Un cálculo bloquea el conducto principal por donde sale la bilis de la vesícula. La bilis se acumula, y la vesícula se hincha e inflama.
• Colecistitis acalculosa: Una inflamación aguda que ocurre sin la presencia de cálculos. Suele ser más grave y aparece tras cirugías mayores, traumatismos intensos o infecciones graves como la sepsis.
• Disquinesia biliar: Es un problema mecánico donde la vesícula no tiene la capacidad de mover la bilis hacia los conductos. Esto causa un efecto similar a una obstrucción.

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¿Cómo detectar problemas en la vesícula biliar?

La detección temprana es importante para evitar complicaciones, ya que la colecistitis (aguda o crónica) es la complicación más frecuente.

Los síntomas iniciales se conocen como cólico biliar, un dolor asociado a la presión que se acumula por el bloqueo del conducto.

Para detectar si tienes problemas en la vesícula, presta atención a estas señales y a tu diagnóstico médico:

• Dolor intenso y constante: Se siente en la parte superior derecha del abdomen, empeora al respirar profundamente, puede extenderse a tu hombro derecho o la espalda, y dura más que unas pocas horas.
• Síntomas acompañantes: Náuseas y vómitos son frecuentes, y en casos agudos puede haber fiebre, que tiende a aumentar gradualmente.
• Ictericia: El color amarillento de la piel y los ojos, orina oscura y heces claras sugieren que un cálculo está obstruyendo el conducto biliar principal, un problema serio.
• Ecografía abdominal: Es el mejor procedimiento de imagen para detectar cálculos biliares, líquido alrededor de la vesícula o engrosamiento de la pared.
• Pruebas de sangre: Los análisis pueden mostrar un alto número de glóbulos blancos, sugiriendo infección o inflamación.

Las enfermedades de la vesícula, aunque comunes, pueden volverse críticas rápidamente. Si experimentas un dolor abdominal severo y sostenido, acompañado de náuseas o fiebre, es momento de buscar ayuda médica.