Pan francés de panettone, una opción diferente para probar el clásico

El pan francés es uno de los platillos más conocidos en el desayuno y el brunch. Su preparación es sencilla y se basa en una técnica muy antigua: remojar pan en una mezcla de huevo y leche para después dorarlo en un sartén.

Aunque suele elaborarse con pan blanco o brioche, existen versiones que utilizan otros tipos de pan. Una de las más llamativas es el pan francés de panettone, una alternativa que aporta un sabor dulce y una textura distinta.

Esta versión se ha vuelto popular porque permite aprovechar el panettone que sobra después de las fiestas, especialmente en Navidad y Año Nuevo. Además, su sabor especiado y su miga suave hacen que el resultado sea más aromático y festivo.

¿Qué es el pan francés?

El pan francés, también conocido como French toast, es un platillo que se prepara con rebanadas de pan remojadas en huevo y leche, que luego se cocinan hasta quedar doradas por fuera y suaves por dentro. Esta receta suele servirse como desayuno o brunch y se acompaña comúnmente con ingredientes dulces como jarabe, miel o frutas.

Aunque su nombre sugiere un origen francés, esta preparación tiene antecedentes más antiguos. Existen registros de recetas similares en la antigua Roma, donde el pan se remojaba en leche para crear un platillo dulce.

Con el tiempo, la receta evolucionó y se extendió por distintas regiones de Europa. En Francia se conoció como pain perdu, que significa “pan perdido”, en referencia al uso de pan duro que se aprovechaba en lugar de desecharse.

La popularidad del pan francés se debe a que es una receta económica, fácil de adaptar y muy versátil. Puede prepararse con distintos tipos de pan y acompañarse con ingredientes variados. 

Por esta razón, se ha mantenido vigente durante siglos y sigue siendo una opción común en muchas cocinas del mundo.

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¿Qué es el panettone?

El panettone es un pan dulce tradicional de Italia, originario de la región de Milán. Se distingue por su forma alta, su miga ligera y aireada, y por llevar ingredientes como pasas, frutas confitadas o, en algunas versiones modernas, chispas de chocolate. Su consumo está fuertemente ligado a la temporada navideña.

Gracias a su sabor ligeramente dulce y a su textura esponjosa, el panettone resulta muy adecuado para preparar pan francés. Al remojarse en la mezcla de huevo y leche, absorbe el líquido sin perder su forma, lo que da como resultado una rebanada suave por dentro y dorada por fuera. Además, los ingredientes que ya contiene el panettone aportan aroma y sabor extra, lo que reduce la necesidad de añadir más azúcar o especias.

Otro punto a favor es que el panettone suele secarse un poco después de algunos días, lo cual lo vuelve ideal para esta preparación. En lugar de tirarlo, puede transformarse en un desayuno especial. En muchos hogares, esta versión se ha convertido en una receta habitual después de Navidad por su sencillez y buen resultado.

Receta de pan francés con panettone

Ingredientes para 4 personas:

• 8 rebanadas gruesas de panettone
• 4 huevos
• 1 taza de leche entera
• 1/4 de taza de crema para batir
• 1/2 cucharadita de canela en polvo
• 1 cucharadita de vainilla
• 1 pizca de sal
• Mantequilla para cocinar
• Para servir (opcional):
• Azúcar glass
• Miel o jarabe
• Fruta fresca
• Yogur natural o crema batida

Procedimiento:

1. En un tazón grande, bate los huevos junto con la leche, la crema, la vainilla, la canela y la sal hasta que todo quede bien integrado.
2. Sumerge las rebanadas de panettone en la mezcla durante unos segundos por cada lado. Es importante no dejarlas demasiado tiempo para que no se rompan.
3. Coloca un sartén a fuego medio y derrite un poco de mantequilla.
4. Dora las rebanadas por ambos lados hasta que estén bien cocidas y con un color dorado uniforme.
5. Sirve el pan francés caliente y acompaña con los ingredientes de tu preferencia.

Utiliza panettone de uno o dos días para que absorba mejor la mezcla. Cocina a fuego medio para evitar que se queme por fuera y quede crudo por dentro; y no remojes de más el pan, ya que su miga es delicada.

El pan francés de panettone se disfruta mejor recién hecho, pero puede conservarse correctamente. En refrigeración: guarda las rebanadas cocidas en un recipiente cerrado hasta por dos días.

Para recalentar: usa un sartén o el horno para recuperar la textura. Congelación: puede congelarse hasta por un mes si se separan las rebanadas con papel encerado. Se recomienda evitar el microondas por tiempos prolongados, ya que el pan puede resecarse.

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Tipos de pan ideales para hacer pan francés

Aunque el panettone es una opción destacada, el pan francés puede prepararse con distintos tipos de pan, siempre que tengan la consistencia adecuada para absorber la mezcla sin deshacerse.

El pan brioche es uno de los más utilizados, ya que es suave y ligeramente dulce. De hecho, el panettone se considera una variante del brioche, pero con frutas. El pan de molde también es común por su textura uniforme y facilidad de manejo.

El pan rústico o campesino ofrece una miga más firme y una corteza que aporta contraste al dorarse. Por su parte, el pan integral es una alternativa para quienes buscan un sabor más intenso y un mayor contenido de fibra.

Otros panes dulces como challah o pandoro también pueden usarse con buenos resultados, siempre que no estén demasiado frescos. La recomendación general es utilizar pan del día anterior, ya que el pan recién hecho suele romperse con facilidad al remojarse.

Esta versión del pan francés es ideal para desayunos especiales, brunch familiares o celebraciones, sobre todo durante la temporada decembrina. Se puede acompañar con frutas frescas para equilibrar el dulzor o con yogur para aportar cremosidad.

Servido con café, té o chocolate caliente, el pan francés de panettone se convierte en un platillo reconfortante que destaca por su sabor y sencillez. Su preparación no requiere técnicas complicadas, pero el resultado es distinto al del pan francés tradicional.

El pan francés de panettone es una alternativa sencilla y sabrosa para reinventar un platillo clásico. Aprovecha un pan tradicional de las fiestas y lo transforma en un desayuno especial, ideal para compartir.

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