Suicida, cerrar filas con la 4T: Camacho Quiroz; llama a ser oposición generosa

CIUDAD DE MÉXICO.

En estos momentos, “cerrar filas con el gobierno es impensable (…) un voto ciego, la entrega, la capitulación del PRI sí sería suicida”, advierte el expresidente nacional del Revolucionario Institucional, César Camacho Quiroz, una de las voces que pide convocar a los órganos deliberativos estatutarios para evaluar los resultados electorales, porque el partido no debe ver por el retrovisor.

Convencido de que el PRI debe asumirse como una oposición no mezquina, sino generosa, responsable, profesional, abierta a analizar todos los temas, el también exgobernador del Estado de México advierte que “la inercia” no resolverá los problemas que enfrenta el partido y por eso insiste en la discusión dentro de una Asamblea Nacional.

En entrevista con Excélsior, César Camacho comparte su valoración sobre el doble papel que tendrán integrantes del Comité Ejecutivo Nacional, que serán también diputados federales.

“Estatutariamente, no está impedido que así ocurra. Lo que sí creo es que en términos prácticos, políticos, equitativos, es discutible si sigue siendo algo conveniente, porque además quienes pidieron estar en las posiciones son ellos mismos, es decir, nadie los forzó. Sí es uno de los temas de la agenda pendiente que ojalá se discuta ampliamente al interior de los órganos de dirección del partido”, considera.

Sobre el reciente diferendo entre la dirigencia nacional del partido y un grupo de militantes, lamenta que “asuntos de esta naturaleza, de orden político, acaben dirimiéndose en la Fiscalía General de la República o en los juzgados penales. Creo que esto no es una buena señal y hago votos porque pronto se pueda superar”.

Habla de los triunfos y las derrotas del partido y plantea que es necesario “hacer un balance cuidadoso, preciso, aritmético y encontrar, con una actitud de autocrítica, pero también edificante, qué pasó, para aprender del resultado.

“El PRI no tiene que ver por el retrovisor para recordar a la ciudadanía glorias pasadas, éxitos anteriores. Tiene que ver para adelante, ser propositivo, inteligente y construir bloque opositor. A veces se pueden perder las votaciones, pero se tienen que ganar las discusiones para documentar de la forma más amplia el sentido del voto”, asegura.

Recuerda que “no hay un término perentorio que esté reconocido para la reflexión, pero estos son asuntos de sensibilidad política, de juicio, de convicción de que las cosas no pueden seguir así. La inercia no va a arreglar nuestros problemas ni atender nuestros pendientes. Por eso hay que romper la inercia. Hay que cambiar los ritmos. Hay que cambiar eventualmente la dirección, pero esa decisión no puede ser en el ámbito personal”.

Camacho Quiroz añade que es preciso “hacer los ajustes del caso para estar en condiciones de formular una agenda legislativa social y políticamente atractiva. Habrá que reconocer que la posición del PRI nacional en las elecciones del pasado junio fue una oferta pobre: evitar que Morena y sus aliados tuvieran la mayoría calificada o eventualmente la mayoría simple.

“Y bueno, logramos que no tuviera la mayoría calificada, de hecho no la tenía, debía de construirla; pero no fue suficiente y mi impresión es que nos quedamos cortos en la oferta política de la convocatoria al electorado, al pedir que no votaran por Morena, pero no fuimos lo suficientemente persuasivos para convencerlos de que votaran por nosotros y por nuestros aliados”, afirma.

Desde su perspectiva, es necesario que el PRI convoque a una Asamblea Nacional, porque no es lo mismo un Programa de Acción diseñado desde el poder, que el Programa de Acción que se necesita para un partido político de oposición, con sólo cuatro gubernaturas.

“Resulta que el Programa de Acción que está vigente está hecho desde el poder; es decir, cuando el PRI estaba en la Presidencia de la República y tenía una mayoría que pudo construir en las Cámaras. En consecuencia, está desfasado; está fuera de lugar y estoy seguro que quizá la Asamblea Nacional puede revisar también los Estatutos y el código de ética”, dice.

César Camacho insiste que es preciso analizar lo que pasó en las elecciones, “pero no sólo desde Insurgentes Norte y hacer un vuelo de pájaro en el país, sino desde los estados, los municipios y a las secciones electorales para ver qué pasó.

“El orgullo priista necesita tener asideros no sólo de carácter político, ideológico, de principios, sino de orden práctico; el por qué la gente tiene que votar por el PRI y no por otras expresiones. Y la Asamblea puede mostrar opciones de política social; sobre la inseguridad desbordada; empleo, educación, violencia intrafamiliar, feminicidios. Los temas abundan y necesitamos detectar cuáles son los que más preocupan no sólo a la militancia, que es infaltable, sino también al resto de los ciudadanos”, explica.

Interrogado sobre la decisión del dirigente nacional del partido, Alejandro Moreno Cárdenas, que por el momento no se convocará a los órganos deliberativos, César Camacho responde que son “bienvenidos los foros de discusión e intercambio de impresiones, pero creo que debe haber una desembocadura, un acuerdo o una serie de acuerdos que se puedan tomar y creo que estos tienen que adoptarse al amparo de los órganos de dirección establecidos por nuestro sistema”.