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Nacional

Por riesgo de fuga, Lozoya va a la cárcel; ya duerme en el reclusorio Norte

A petición de la Fiscalía General, el juez de control dictó prisión preventiva justificada contra el exdirector de Pemex, acusado de lavado, cohecho y asociación delictuosa

David Vicenteño | Ciudad de México | 04-11-2021
Emilio Lozoya, exdirector de Petróleos Mexicanos, atravesó un mar de reporteros que intentaron sacarle una declaración antes de entrar a los tribunales del Reclusorio Norte.

Emilio Lozoya pasó su primera noche en el reclusorio Norte de la CDMX, en un área donde también están Javier Duarte, Juan Collado y Jorge Luis Lavalle, luego de que el juez de Control Artemio Zúñiga Mendoza le decretó la prisión preventiva justificada, vinculado a los delitos de cohecho, uso de recursos de procedencia ilícita y asociación delictuosa.

La FGR solicitó el cambio de las medidas cautelares a su testigo colaborador al advertir que hay riesgo de fuga, pues se le detectó una cuenta bancaria con dos millones de euros y una red de familiares en el extranjero que pueden ayudarlo a huir.

Además, el Ministerio Público Federal (MPF) advirtió al juez de Control sobre el riesgo de que Lozoya Austin pueda evadir la acción de la justicia debido a que se le encontró una cuenta bancaria con 2 millones de euros; además de contar con una red de familiares y amigos viviendo en el extranjero, que le pueden ayudar a huir, entre ellos su esposa, Marielle Helene Eckes, quien reside en Alemania.

Lozoya compareció ante un juez para solicitarle una nueva prórroga de dos meses para presentar evidencias de que 17 personas recibieron sobornos de Odebrecht, pero sólo le concedió uno, tras lo cual el fiscal y los epresentantes de Pemex y de la UIF pidieron encarcelarlo. Incluso mostraron su foto en el restaurante Hunan, al considerar que mostrarse así fue “una provocación a las instituciones públicas”.

Lozoya y su primera aparición pública en juzgados

 

A las 9:10 horas arribó a la reja de ingreso al Centro de Justicia Federal, del reclusorio Norte, una camioneta Tahoe, color negro, con placas RDU-492-C, con Lozoya Austin; su madre, Gilda Margarita Austin y Solís, y su equipo de abogados, encabezado por Miguel Ontiveros.

El litigante bajó del vehículo para abrirse paso entre representantes de medios de comunicación, hasta llegar con los policías auxiliares que controlan el ingreso, a quienes les explicó que llegaban personas que iban a participar en una audiencia.

La respuesta de uno de los vigilantes fue contundente: los interesados deben ingresar a pie. Ontiveros regresó a la camioneta, explicó la situación, y fue cuando Lozoya bajó de la camioneta, con un rostro de preocupación, vistiendo un saco azul y pantalón negro, para caminar hacia la puerta; de inmediato, cámaras y micrófonos se arremolinaron sobre el testigo, en su primera aparición pública para ingresar a un juzgado, lo que logró entre empujones y sin hacer declaraciones.

Inicialmente la audiencia estaba convocada para que Lozoya Austin solicitara al juez Zúñiga Mendoza una sexta prórroga para presentar evidencias, antes del cierre de investigación complementaria en el caso Odebrecht, en el que señaló a otras 17 personas como participantes en el manejo del soborno, para la aprobación de la reforma energética del gobierno de Enrique Peña Nieto y la obtención de contratos por parte de Pemex.

La defensa solicitó 60 días para reunir más evidencias, en particular la declaración del exdirector de Odebrecht México, Luis Alberto de Meneses Weyll, pero el primer revés llegó cuando juez de Control sólo otorgó la mitad, y estableció el plazo que vence el próximo 3 de diciembre.

Tras la resolución, el MPF, así como los representantes de Pemex y de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) se unieron para solicitar que se declare cerrada la etapa de investigación complementaria, con el argumento de que los documentos que alude la defensa para solicitar el plazo adicional, ya se encontraban en la carpeta de investigación.

Pero fueron por más al pedirle al juez Zúñiga Mendoza modificar las medidas cautelares de libertad condicional, uso de brazalete electrónico y la firma de procesados cada mes debido que su información no ha aportado nuevos elementos e incluso se le acusó de obstruir la investigación.

En su lugar, los representantes de la FGR solicitaron la prisión preventiva justificada, ante el riesgo de que Lozoya volviera a intentar evadir la acción de la justicia.

Además, el fiscal echó mano de las fotografías en el restaurante Hunan, difundidas el pasado 9 de octubre, para justificar una actitud de falta de respeto.

“Su comportamiento no se ajusta al de una persona sujeta a proceso penal y, si bien no tiene un impedimento, su presencia en el restaurante es una provocación a las instituciones públicas”, dijo.

El abogado Ontiveros contestó diciéndose sorprendido por esta petición, sobre todo porque aseguró que su defendido ha aportado pruebas y ha señalado con gallardía y valentía a varias personas de hechos de corrupción.

El indiciado argumentó su colaboración ante las autoridades y ofreció las escrituras de dos inmuebles con un valor superior a los 7 millones de dólares, como reparación del daño. Habló en contadas ocasiones:

“Es un caso muy complejo, hay quienes no quieren que se sepa la verdad”; “de trato privilegiado pregúntenle a mi madre, que ha estado en cinco cárceles diferentes. Si la gente piensa que es un trato privilegiado, tenemos discrepancia de opiniones; “no me arrepiento de haber denunciado…”

Tras cinco horas de audiencia, el juez Zúñiga Mendoza resolvió darle la razón a la FGR, y ordenó la prisión preventiva en contra de Lozoya. Consideró que de encontrarse culpable, pasaría mínimo 12 años de prisión.

Lozoya estará en zona VIP junto a Lavalle, Duarte...

En su primera noche en el reclusorio Norte, estaba previsto que a Emilio Lozoya le hicieran una prueba PCR de covid-19.

De salir negativo, estará en el área conocida como “ingreso”, donde permanece el exsenador panista Jorge Luis Lavalle, delatado por el exdirector de Pemex y, hasta el martes, el único preso en México como parte de la trama de sobornos presuntamente entregados por la empresa brasileña Odebrecht.

Imagen Noticias, con Ciro Gómez Leyva, informó anoche que la zona de ingreso es considerada un área VIP del penal capitalino. Ahí están, entre otros personajes, el exgobernador de Veracruz, Javier Duarte, y el abogado Juan Collado.

Específicamente, Lozoya pasó la noche en el Dormitorio 10, pintado de colores gris, azul claro y blanco, y donde hay 10 celdas. El lugar cuenta con un guardia “dedicado a ver que esté bien, que no le hagan daño y que no se haga daño”.

Además, Lozoya lleva los mismos zapatos que lució durante la audiencia, pero sin agujetas. Tampoco porta el traje azul marino con el que se presentó ante el juez. En su lugar, lleva puesto el uniforme obligatorio del penal, en colores caqui.

La estancia en la que está el exdirector de Pemex mide tres metros de largo por 2.40 de ancho y 2.40 de alto, con sólo un foco. “Un foco pelón, si Lozoya quiere oscuridad tendrá que darle vuelta para atenuar la luz, pues de cualquier manera en el pasillo siempre hay una luz prendida”, se informó.

Monreal pide analizar a testigos protegidos

Para el senador Ricardo Monreal, el caso Lozoya muestra que es momento de analizar la ley que se aplica a los testigos protegidos o que se apegan al criterio de oportunidad, a fin de evitar que sea utilizado para lograr impunidad.

“Es el momento de revisarla, para que sea más eficaz y contundente, y pueda generar condiciones de debido proceso y de equidad en la propia justicia. Deben ser los dos temas: el de responsabilidad penal, que es el ejercicio del juez para sujetarlos a procesos privados de su libertad. Y aunado con la reparación del daño, el resarcimiento de los daños”, dijo Monreal Ávila en entrevista en el Senado de la República.

Humberto Padgett, Georgina Olson y Leticia Robles de la Rosa

Lozoya ofrece reparar el quebranto

Emilio Lozoya Austin dijo ser inocente de los cargos de cohecho, uso de recursos de procedencia ilícita y asociación delictuosa, que le imputó la Fiscalía General de la República (FGR), y ofreció reparar el daño, aunque no haya tenido responsabilidad penal.

Durante la audiencia ante Artemio Zúñiga, Juez de Control del Centro de Justicia Federal del Reclusorio Norte, el exdirector de Pemex agumentó a su favor. De pie, aseguró no tener responsabilidad por el soborno de 10 millones de dólares que pagó la empresa Odebrecht a cambio de la aprobación de la reforma energética y la obtención de contratos.

Agregó que ha colaborado en todo momento con la FGR, como parte del criterio de oportunidad que se le otorgó, para señalar a los verdaderos responsables de esos hechos.

Lozoya concluyó con el dicho de que no violó en ningún momento las medidas cautelares que se le otorgaron: permanecer en el Valle de México, portar un brazalete electrónico y firmar cada mes  el libro de procesados.

Como parte de su ofrecimiento de reparar el daño, el indiciado presentó dos escrituras de inmuebles con un valor superior a los siete millones de dólares, lo que fue rechazado por la FGR, por estar fuera del plazo.

Miguel Ontiveros, abogado defensor de Lozoya, informó que el indiciado quedó tranquilo al interior del Reclusorio Norte, con la confianza de que su situación cambiará porque va a colaborar en el combate a la corrupción.

“El señor Lozoya y su familia están tranquilos, a sabiendas de que estamos cooperando plenamente con las autoridades del Estado mexicano, con la Fiscalía, con el Poder Judicial y también en armonía con las pretensiones de prevención de la corrupción del presidente  López Obrador.

“Estamos ciertos que la vía es el acuerdo con la FGR, él ratificará ante un tribunal su denuncia y estamos absolutamente convencidos que este es un paso que va a acelerar la suspensión del ejercicio de la acción penal, a favor de él y su familia”, comentó Ontiveros.

UIF respalda a la FGR en prisión preventiva a Lozoya

La Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público dio un espaldarazo a la Fiscalía General de República para que se declare prisión preventiva a Emilio Lozoya, exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex).

Mediante su cuenta de twitter, Santiago Nieto publicó que el día de hoy personal de la #UIF sostuvo reunión de trabajo con la FGR para darle seguimiento a los asuntos prioritarios.

De la misma forma, el funcionario federal dio a conocer que “La #UIF participa en la audiencia del caso Odebrecht. Hemos argumentado a favor de la postura de la @FGRMexico de revocar la medida cautelar a Emilio L y sustituirla por prisión preventiva”.

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