Reportan baja en muerte de soldados

CIUDAD DE MÉXICO, 2 de abril.- En los primeros tres meses de 2015 murieron siete militares en el marco de la lucha contra el narcotráfico, lo que representa la cifra más baja para un primer trimestre desde 2006, año en que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) comenzó a contabilizar las bajas por el combate a la delincuencia organizada.

En enero de este año, dos soldados murieron por agresión con arma de fuego en un enfrentamiento en Yurécuaro, Michoacán; en febrero, otro soldado falleció por una caída ocurrida en Mier, Tamaulipas; uno más perdió la vida a manos de criminales en Miguel Alemán, Tamaulipas; un cabo fue abatido en Puerto Vallarta, Jalisco, y un teniente tuvo un accidente en Arcelia, Guerrero.

Finalmente en marzo, el Ejército mexicano sólo tuvo una baja. Se trata de un soldado que perdió la vida por disparo de arma de fuego en Caborca, Sonora, según la relación de personal fallecido en aplicación de la campaña permanente contra el narcotráfico y la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos, actualizada al primer trimestre de 2015.

Considerando el sexenio del presidente Felipe Calderón y lo que va de la gestión del presidente Enrique Peña Nieto, el trimestre con más decesos para las Fuerzas Armadas fue el de 2010, cuando se reportaron 25 bajas. En segundo lugar están los primeros cuartos de 2008 y 2012, cuando fallecieron 18 uniformados en cada lapso.

En lo que va de la presente administración, el trimestre con más fallecimientos en las instituciones castrenses fue 2013, con diez decesos; en el primer cuarto de 2014 se reportaron ocho fallecimientos.

Van 444 decesos

En total, del 1 de diciembre de 2006 a la fecha, la lucha contra los cárteles de la droga ha costado la vida de 444 militares. De ellos, 357 perdieron la vida durante el sexenio de Calderón, lo que da un promedio de 4.9 fallecimientos al mes. Los restantes 87 decesos han ocurrido durante la gestión de Peña Nieto, lo que da un promedio de 3.1 al mes.

Tanto en la administración de Felipe Calderón como en la actualidad, el estado de la República donde han ocurrido la mayor parte de las muertes de uniformados es Tamaulipas, con 110 fallecimientos.

Cabe recordar que desde mayo del año pasado la Federación lanzó un operativo conjunto en Tamaulipas para combatir a las bandas que controlan el trasiego de enervantes y reducir los niveles delictivos, pues la entidad gobernada por Egidio Cantú sigue en primer lugar en la comisión de homicidios dolosos y culposos, secuestro y robo.

Otras entidades con elevado número de militares muertos es Michoacán y Sinaloa, con 51 casos cada una. Le siguen Guerrero, con 33 decesos; Nuevo Léon con 33, Sonora con 22, Durango con 19, Veracruz con 17 y Coahuila con 13.

El año con más bajas para el Ejército mexicano en el marco de la lucha contra las mafias de narcotraficantes es 2010, cuando perdieron la vida 89 militares. El menos violento fue 2014, con sólo 32 decesos.

Ante la exposición de los integrantes de las Fuerzas Armadas al peligro, desde hace una década las instituciones han incrementado las prestaciones para los militares que pierden la vida en combate contra los cárteles de la droga, tales como seguros de vida, seguros de estudio para los hijos, vivienda, atención médica y otras indemnizaciones.