¿Quién inventó el mole Doña María? La historia detrás del platillo mexicano

Descubre la historia del mole Doña María: un ícono de la gastronomía nacional.

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El mole Doña María nació en una cocina familiar y hoy es parte esencial del sabor nacional. | Instagram

En casi todas las alacenas de los hogares mexicanos hay un elemento común que ha trascendido generaciones: un vaso de cristal con etiqueta amarilla y letras rojas que guarda uno de los sabores más emblemáticos del país. Se trata del mole ‘Doña María’, un producto que no sólo ha alimentado a millones de familias, sino que también guarda una historia profundamente entrañable y familiar, que se remonta al corazón de San Luis Potosí en la década de los años cincuenta.

Mole Doña María de dónde es

La historia de este icónico mole comienza en el Hotel Progreso, un negocio familiar en San Luis Potosí, propiedad de los bisabuelos de Héctor Hernández Pons, actual presidente del consejo de Grupo Herdez.

En una entrevista con el empresario para el podcast Cracks, conducido por Oso Trava, reveló que Doña María, la mujer detrás de la famosa marca, no era otra que la hermana de su abuela.

Tras la muerte del bisabuelo, la bisabuela —una excelente cocinera originaria de Alsacia, Francia— se quedó al frente del hotel y transmitió su pasión por la cocina a todas sus hijas. En ese ambiente familiar, donde se preparaban embutidos, platillos típicos y postres caseros, nació el amor por la gastronomía que más tarde daría origen al mole ‘Doña María’.

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Detrás del mole Doña María hay una historia de esfuerzo, tradición y una mujer visionaria que transformó su receta en una marca querida por generaciones. | Instagram

¿Quién fabrica el mole Doña María?

Entre todas las hermanas, María Pons destacó por su sazón, especialmente al preparar mole. La vida la llevó a enfrentar desafíos personales: tras separarse de su esposo —quien había malgastado todo en apuestas— y enviudar poco después, se vio en la necesidad de salir adelante sola. Su respuesta fue la cocina.

Comenzó vendiendo comida casera, y el mole fue el platillo que más éxito tuvo. Lo preparaba de manera artesanal y lo vendía primero en polvo, empacado en sobres de celofán. Con el paso del tiempo, y para facilitar su conservación, optó por empacarlo en frascos de vidrio. Sin saberlo, ese cambio marcaría el diseño característico de su producto y lo convertiría en un elemento que aún hoy forma parte de la vajilla de millones de familias mexicanas.

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Conservando su fórmula original desde los años cincuenta, el mole Doña María es un homenaje al sazón casero y a las raíces de la cocina mexicana. | Instagram

Receta mole Doña María

Uno de los detalles que hicieron especial al mole ‘Doña María’ desde el inicio fue la visión de su creadora: preparar un producto base, delicioso por sí solo, pero lo suficientemente versátil como para que cada familia le agregara su propio "toque especial".

Algunas preferían más chocolate, otras un poco más de chile. Esa libertad para personalizarlo sin perder la esencia es parte del secreto de su éxito.

Desde esos días, la receta original se ha mantenido intacta. Como lo mencionó Hernández Pons, la fórmula desarrollada por su tía abuela continúa siendo la misma, con ingredientes 100% mexicanos y elaborada bajo métodos que conservan su sabor tradicional, pero con mejoras tecnológicas que han permitido mantener su calidad y extender su distribución.

Doña María Mole

El crecimiento del negocio fue tal que Doña María decidió construir una pequeña fábrica en una casona del centro de San Luis Potosí. Así nació la empresa Productos Marpe S.A., un nombre que fusionaba los nombres de María y su esposo Pedro, aunque este último ya había fallecido. En 1955, debido a la expansión y profesionalización del negocio, la empresa cambió su razón social a Productos Doña María S.A.

Durante ese tiempo, contó con el apoyo de su familia, especialmente de su cuñado —el abuelo de Héctor Hernández Pons—, quien le ayudó a mejorar sus procesos con tecnología. Fue ese mismo abuelo quien, años después, hizo posible que el legado de Doña María no se perdiera y quedara en manos de desconocidos.

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El icónico frasco de vidrio con mole no sólo guarda sabor, también historia, identidad y miles de recuerdos compartidos en torno a la mesa. | Instagram

Mole Doña María Grupo Herdez

Cuando Doña María decidió vender su negocio, recibió varias ofertas en San Luis Potosí. Fue entonces cuando su cuñado le preguntó cuánto le estaban ofreciendo y, tras escuchar la cifra, le respondió sin titubear: “Yo te lo pago, pero en efectivo”. Al preguntarle por qué no lo había dicho antes, él contestó con sencillez: “Porque quería que tú pusieras el precio. No quería que pensaras que te estaba tranzando”.

Ese gesto no sólo habla del cariño y respeto familiar, sino que marcó el inicio de una nueva etapa para la marca. El mole Doña María pasó a formar parte de la empresa Herdez, donde se ha mantenido como uno de los productos más vendidos, especialmente el mole rojo.

Hoy, hablar de mole Doña María es hablar de la historia de una mujer que, en medio de la adversidad, convirtió su talento en una fuente de sustento, inspiración y orgullo.

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