Artista guatemalteco conmueve a Roma con su arte sacro

Christian Escobar Chrispapita exhibe tres pinturas monumentales en la exposición Sublime.

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Christian Escobar Chrispapita y una de sus obras.

En uno de los templos más emblemáticos del corazón histórico de Roma, la capital italiana, frente al Foro de Trajano, la exposición de arte sacro Sublime, del artista guatemalteco Christian Escobar Chrispapita, se ha convertido en uno de los acontecimientos culturales más significativos del Jubileo 2025. Reconocida como evento oficial del Dicasterio para la Evangelización del Vaticano, la muestra permanecerá abierta hasta el 6 de enero de 2026 en la iglesia del Santísimo Nombre de María.

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La exposición presenta tres pinturas monumentales realizadas con la técnica del claroscuro: San Miguel Arcángel, San Gabriel Arcángel y María Dolorosa.

María Dolorosa es la madre que comparte el dolor de sus hijos, pero también quien, con fe y silencio, espera la Resurrección”, explicó el artista.

Exposición de arte sacro Sublime, “una oración visual”

La curaduría está a cargo de Marinellys Tremamunno, periodista vaticanista, quien ha definido las obras como “una oración visual situada entre el barroco italiano y la sensibilidad espiritual latinoamericana”.

La inauguración, celebrada el pasado 10 de octubre, fue precedida por una solemne misa y por las palabras de monseñor Andrea Manto, rector del templo, quien calificó la exposición como “un momento de gracia capaz de tocar los corazones e invitar a la contemplación del amor trinitario”.

En el marco del Jubileo, la programación de Sublime prevé para mañana, 5 de diciembre a las 18:30 horas de Roma, un encuentro con el artista. En el evento participará el crítico de arte italiano Francesco María Bonifazi.

El arte sacro nació en mi vida como un acto de fe; mis manos son sólo un instrumento de Dios”, expresó el pintor guatemalteco.

Un vehículo de evangelización y diálogo cultural

Con Sublime, Chrispapita consolida su presencia en el panorama internacional y confirma la vigencia del arte sacro como vehículo de evangelización y diálogo cultural. El crítico Bonifazi destacó que es una voz nueva dentro del arte sacro, pero con un estilo propio que ha sido capaz de devolver a la pintura religiosa su sentido de trascendencia y emoción.

Es el poder del discurso lo que distingue la obra de Chrispapita, la expresividad que transmite una claridad expositiva impecable, un estilo pictórico gramaticalmente perfecto, eso es lo que marca la diferencia. La frialdad (del hiperrealismo) no tiene cabida en este joven maestro, que llegó del extranjero con su carga de dolor y color, de ímpetu inquebrantable, de una sonrisa en el rostro de la vida”.

La exposición puede visitarse lunes, jueves y sábado de 9:30 a 13:00 horas, y los domingos antes de la misa de las 11:00 horas. La entrada es libre.

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*mcam