¿Qué es el efecto umbral y por qué te hace olvidar cosas?

¿Alguna vez has entrado en una habitación con un propósito claro solo para olvidar instantáneamente lo que ibas a hacer? Es una experiencia frustrante y sorprendentemente común que muchos atribuyen a un misterioso "efecto umbral". 

A menudo, damos por sentada nuestra capacidad cognitiva, sin darnos cuenta de que pequeños lapsos cotidianos podrían ser pistas sobre el funcionamiento intrincado de nuestro cerebro y la necesidad de cuidarlo activamente. 

Investigaciones recientes han comenzado a arrojar luz sobre cómo factores ambientales y de estilo de vida impactan nuestra función cognitiva, ofreciendo valiosas perspectivas sobre cómo podemos proteger nuestra mente del deterioro.

¿Qué es el "efecto umbral" que hace olvidar a qué íbamos al cambiar de habitación? 

Es una pregunta común y una experiencia que resuena con muchas personas: el acto de cruzar un umbral y, de repente, la mente se queda en blanco, olvidando el propósito inicial de entrar en la nueva habitación. 

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Lo anterior puede afectar con mayor gravedad a las personas con enfermedades neurodegenerativas. Las características de los umbrales y puertas afectan la cognición en contextos específicos, como en personas con la enfermedad de Parkinson, según un estudio publicado en Frontiers in Neurology. 

Este estudio investigó cómo las puertas pueden provocar un síntoma debilitante conocido como "congelación de la marcha" (FOG, por sus siglas en inglés) en la enfermedad de Parkinson. Aunque no es directamente sobre el olvido al cambiar de habitación, sí explora cómo los ambientes de las puertas impactan los procesos cognitivos y motores.

Otro estudio publicado British Journal of Psychology concluyó que el cambio de lugar, al cruzar un umbral, impacta selectivamente en el recuerdo de los detalles de un evento, pero no afecta tanto la familiaridad que se tiene con ellos. 

Esto significa que es más difícil recordar conscientemente información específica (como el color exacto de un objeto o su ubicación precisa en la habitación anterior) después de cruzar una puerta. 

Sin embargo, la sensación de que algo es familiar o que ya se ha visto antes (la familiaridad) permanece intacta. El estudio sugiere que los umbrales de las puertas actúan como "límites" que ayudan al cerebro a organizar la memoria por eventos o lugares.

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¿Cómo afecta el cerebro el paso por los umbrales (y otros factores ambientales)?

El estudio de Frontiers revela cómo los entornos de las puertas pueden desencadenar problemas cognitivos y motores significativos en personas con Parkinson. La "congelación de la marcha" es un bloqueo motor súbito que impide el avance, y las puertas son un factor provocador notable.

Los investigadores realizaron una encuesta en línea con 171 personas con enfermedad de Parkinson y encontraron que el 69% de los participantes experimentaron congelación provocada por las puertas.

Este estudio profundizó en los mecanismos subyacentes, sugiriendo que las puertas pueden activar la congelación a través de procesos:

• Visuomotores: el estudio encontró que las puertas estrechas, los pasillos estrechos y las habitaciones pequeñas después de la puerta aumentaron la probabilidad de congelación. Las puertas bajas también aumentaron significativamente el riesgo. En contraste, las puertas anchas fueron el factor que más disminuyó la gravedad de la congelación.
• Atencionales: el desorden (acumulación de objetos) antes y después de la puerta fue el factor de mayor rango que influyó en el comportamiento de congelación, aumentando las posibilidades de congelación en el 81.4% y 83.1% de los encuestados, respectivamente. 
• Emocionales: las condiciones de iluminación también son un factor influyente. Una habitación más oscura después de la puerta aumentó la frecuencia de congelación en la mayoría de los encuestados (68.4%), y fue la única característica de puerta para la que ninguno de los encuestados reportó una disminución de la congelación. 

Una de las conclusiones importantes fue el hallazgo respecto a las puertas automáticas, que  también pueden agravar la congelación, probablemente añadiendo presión de tiempo y, en el caso de las puertas giratorias, imponiendo una velocidad y trayectoria específicas. 

Por ejemplo, entrar en una puerta giratoria automática aumentó la congelación en el 73.3% de los participantes.

Aunque este estudio se centra en un síntoma específico de la enfermedad de Parkinson, subraya la importancia de cómo nuestro entorno físico, y en particular los "umbrales" o puntos de transición, pueden afectar nuestras capacidades cognitivas y motoras de formas complejas.

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¿Cómo mejorar la memoria y la salud cerebral en general?

Los Centers for Disease Control and Prevention (CDC) sobre cómo mantener y mejorar la salud cerebral, reducir el riesgo de deterioro cognitivo y prevenir la demencia. Estas estrategias se centran en un enfoque integral que abarca el estilo de vida, la nutrición y el manejo de condiciones de salud.

• Actividad física: se recomienda firmemente la actividad física para adultos con función cognitiva normal para reducir el riesgo de deterioro cognitivo, y la recomienda condicionalmente para adultos con Deterioro Cognitivo Leve (DCL).
• Adoptar hábitos alimentarios saludables: una alimentación saludable y equilibrada es decisiva para un desarrollo óptimo, mantener la salud y prevenir enfermedades no transmisibles (ENT) que aumentan el riesgo de demencia, de acuerdo con los National Institutes of Health (NIH).  
• Dejar de fumar: el consumo de tabaco es un importante factor de riesgo de demencia y deterioro cognitivo.
• Control del peso: se recomiendan condicionalmente intervenciones para el sobrepeso o la obesidad en la mediana edad para reducir el riesgo de deterioro cognitivo o demencia, priorizando las intervenciones sobre el estilo de vida que incluyan dieta y actividad física.

Aunque el misterio del "efecto umbral" de la memoria al cambiar de habitación no esté completamente resuelto en las fuentes actuales, la ciencia nos ofrece un panorama robusto sobre cómo podemos activamente salvaguardar y potenciar nuestra memoria y salud cerebral. 

Adoptar un estilo de vida saludable que incluya actividad física regular, una dieta equilibrada, el manejo proactivo de enfermedades crónicas y el compromiso cognitivo y social, son pilares fundamentales para una mente sana a lo largo de los años.