¿Cómo saber si mi intestino se está paralizando?

Estreñimiento, inflamación, náuseas… son algunos de los malestares más comunes cuando se habla de “problemas intestinales”. Pero, ¿cuándo estos síntomas podrían indicar que el intestino se está paralizando?

Para empezar, sí: el intestino se mueve. Los alimentos no viajan simplemente de la boca al inodoro por un proceso químico.

Los órganos grandes y huecos del tracto gastrointestinal contienen una capa muscular que, mediante un proceso llamado peristalsis, hace que sus paredes se muevan para empujar los alimentos y líquidos”, explica el National Institute of Diabetes and Digestive and Kidney Diseases (NIDDK).

También te puede interesar: Los medicamentos comunes reconfiguran tu intestino en secreto durante años, según estudio

Síntomas de un intestino paralizado

Después de dos o tres días sin evacuar, o tras semanas de inflamación abdominal y cólicos, es posible que surja la sospecha de estar ante una parálisis intestinal o una oclusión intestinal.

Como en cualquier afección médica, la detección oportuna es crucial. Un intestino que deja de moverse puede provocar complicaciones graves si no se trata a tiempo.

De acuerdo con la Mayo Clinic, los principales signos de una obstrucción intestinal incluyen:

• Dolor abdominal tipo cólico, intermitente
• Pérdida del apetito
• Estreñimiento persistente
• Hinchazón o distensión abdominal
• Incapacidad para expulsar gases
• Mal aliento

Síntomas de alarma que requieren atención médica urgente:

• Dolor abdominal severo o constante
• Fiebre
• Presencia de sangre en las heces
• Signos de deshidratación (boca seca, mareo, orina oscura)

También te puede interesar: Posbióticos, la nueva era de la salud intestinal que supera a los probióticos

¿Qué puede provocar que el intestino deje de moverse?

Unos días de estreñimiento o un fin de semana de excesos alimentarios pueden ser suficientes para detonar un problema más serio.

Principales causas de obstrucción intestinal:

• Adherencias intestinales: tejido cicatricial que se forma después de una cirugía abdominal
• Hernias
• Cáncer de colon
• Enfermedades inflamatorias intestinales, como la enfermedad de Crohn
• Diverticulitis
• Vólvulo o retorcimiento del colon
• Impactación fecal (heces retenidas)

¿Qué es el íleo paralítico o pseudoobstrucción intestinal?

Antes de hablar de tratamientos, es importante entender una condición muy relacionada: el íleo paralítico, también llamado pseudoobstrucción. Ocurre cuando los músculos intestinales dejan de moverse temporalmente, aunque no exista una obstrucción física.

Las causas son similares a las de una obstrucción intestinal, pero el tratamiento difiere significativamente:

• Reposo intestinal: suspender temporalmente la ingesta de alimentos
• Nutrición parenteral: líquidos, electrolitos y nutrientes por vía intravenosa
• Procinéticos: medicamentos que estimulan el movimiento intestinal
• Sonda nasogástrica: para eliminar aire y líquidos acumulados

¿Qué hacer si el intestino se paraliza por completo?

Si hay sospecha de parálisis total o parcial del intestino, el médico puede solicitar estudios como:

• Radiografía abdominal
• Tomografía computarizada (TAC)
• Ecografía
• Enema con bario o aire

En casos de oclusión intestinal total, se puede requerir:

• Colocación de un stent metálico para liberar el paso
• Cirugía para eliminar la porción intestinal obstruida
• Cierre editorial

Una parálisis intestinal no es algo que deba pasarse por alto. No es lo mismo un mal día digestivo que una obstrucción real que puede poner en riesgo tu salud. Si tienes síntomas persistentes como distensión, cólicos intensos o imposibilidad de evacuar, consulta a tu médico de inmediato.

Evita la automedicación: aunque algunos síntomas parezcan comunes, detrás puede haber una condición grave que requiere atención profesional. La salud intestinal no espera.