¿Por qué en Belice hablan inglés? La razón detrás del país latinoamericano que no habla español
Descubre cómo el legado británico convirtió a Belice en la excepción lingüística de Latinoamérica.

En el mosaico cultural de América Latina, donde el español y el portugués dominan, existe un país que tiene como idioma oficial un que nadie se espera: ¿por qué en Belice hablan inglés?
Se trata del único territorio de la región con esta característica, pero no es casualidad, sino resultado de un desarrollo histórico singular marcado por colonos, piratas, diplomacia y auge comercial.
Además de su riqueza cultural y biodiversidad, Belice posee una identidad lingüística que le ha permitido construir un puente entre Latinoamérica y el angloparlante Caribe. Sin embargo, pese a lo que se pudiera creer, la influencia del idioma no tiene relación con Estados Unidos, sino con Inglaterra.
Todo comienza con la llegada de colonos británicos durante los siglos XVII y XVIII, quienes establecieron asentamientos centrados en el comercio de maderas preciosas, ignorando la soberanía española en la región.
Con el tiempo, ese dominio informal fue cimentado institucionalmente bajo el nombre de “British Honduras”, hasta que Belice obtuvo su independencia en 1981 sin renunciar al inglés como lengua predominante.
Hoy en día, el inglés gobierna la educación, la administración pública y los medios en Belice. Sin embargo, su rica diversidad lingüística incluye el criollo beliceño (Kriol), el español de usos cotidianos y varias lenguas indígenas.

El origen del idioma inglés en Belice
Desde el siglo XVII, piratas y bucaneros ingleses conocidos como Baymen establecieron las primeras colonias en lo que hoy es Belice. Aunque España reclamaba el territorio, los Baymen explotaban madera valiosa sin interferencias coloniales directas.
A lo largo del siglo XVIII, se consolidó una estructura social y comercial donde el inglés era esencial. En 1798, los Baymen y sus aliados rechazaron una invasión española en la famosa Batalla de St. George’s Caye.
Esta victoria marcó el control efectivo británico sobre el territorio y dio inicio a la oficialización de prácticas angloparlantes en la administración local. Para 1840, la región fue reconocida oficialmente como colonia británica y en 1862 se convirtió en una colonia perteneciente a la corona británica, con el nombre de “British Honduras”.
Durante este periodo, el inglés fue adoptado como la lengua de la educación, la burocracia y los medios oficiales, reforzando su posición dominante.

¿El inglés es el idioma oficial de Belice?
Una vez obtenida la independencia el 21 de septiembre de 1981, Belice mantuvo el inglés como idioma oficial, además de conservar su vínculo con la Commonwealth británica.
De hecho, el país preservó estructuras administrativas, judiciales y educativas basadas en el modelo británico, lo que ha permitido que el inglés siga siendo dominante.
En las escuelas utilizan el inglés como idioma principal, y toda actividad gubernamental se realiza en esa lengua. Documentos oficiales, leyes y señalización pública están en inglés.

¿En Belice se habla español?
A pesar de que el inglés es el idioma oficial de Belice, el español tiene una presencia notable en el día a día de su población. Se enseña como segundo idioma y, en muchos contextos informales, incluso supera al inglés en rutinas cotidianas.
Se estima que más de la mitad de la población beliceña habla español; especialmente en las regiones fronterizas con México y Guatemala.
¿Qué idiomas se hablan en Belice?
Además del inglés y el español, en Belice se habla el Kriol, un “idioma criollo” que comparte gran parte de su léxico con el inglés, pero también extrae características de lenguas africanas occidentales, como el akan, bantú (escure) y yoruba, de acuerdo con el estudio “Variedades beliceñas del español: contacto lingüístico y prácticas plurilingües” publicado por la Universidad de Costa Rica.
El Kriol se utiliza en conversaciones informales, música, literatura local y actividades culturales; sin embargo, la mayoría de la población utiliza una mezcla de los tres idiomas, tanto en el mismo espacio geográfico, como en actividades cotidianas y culturales.
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