Logo de Excélsior                                                        
Expresiones

Con una ballena a cuestas

La consagración literaria del célebre escritor neoyorquino Herman Melville nacido hace 200 años, solamente llegó tras su muerte, ocurrida en 1891

EFE | 28-07-2019
Imágenes: Tomadas de la versión de Moby Dick, de Herman Melville, ilustrada por Gabriel Pacheco y traducida por Andrés Barba. Editorial Sexto Piso, México, 2014 / Fotoarte: Jesús Sánchez
Imágenes: Tomadas de la versión de Moby Dick, de Herman Melville, ilustrada por Gabriel Pacheco y traducida por Andrés Barba. Editorial Sexto Piso, México, 2014 / Fotoarte: Jesús Sánchez

CIUDAD DE MÉXICO.

El próximo jueves se conmemorará el 200 aniversario del nacimiento de Herman Melville, el creador de una de las criaturas más temidas y amadas de la literatura: la ballena blanca Moby Dick, la protagonista de este clásico de la literatura.

Publicado en 1851, cuando Melville tenía 32 años (nació en Nueva York el primero de agosto de 1819), este lanzamiento supuso un gran impacto editorial para el autor estadunidense, que ya tenía varios libros publicados, entre ellos dos muy vendidos como Typee y su secuela Omoo, donde narraba su vivencia a bordo del ballenero Acushnet, con el que surcó los Mares del Sur, y su estancia entre los caníbales.

Una experiencia que le sirvió también para escribir la novela que ha trascendido hasta nuestros días como un clásico que nadie debería perderse, porque en ella el lector no sólo disfrutará de la aventura marítima, sino que se sumergirá en todo una análisis y reflexión sobre el ser humano, sus anhelos y sus frustraciones.

 

Imagen intermedia

Herman Melville publicó su novela Moby Dick en 1851

 

Pero también es una historia que lo catapultó, aunque no en vida, hacia el Olimpo de las letras, ya que significó su consagración como uno de los padres de la literatura moderna pese a que él no disfrutó de esta condición, ya que tal fue el fracaso de Moby Dick, que todo lo que escribió después se vio empañado por esta circunstancia.

Por eso Herman Melville tuvo que dejar la granja donde había escrito su novela culmen y volver a Nueva York para trabajar como inspector de aduanas, una profesión que ejerció hasta su desapercibida muerte, el 28 de septiembre de 1891.

Así que ahora, 200 años después de su nacimiento toca visitar por primera vez o revisitar estas páginas llenas de tempestades, así como otros títulos que han llegado a las librerías españolas para recordar que hay más vida detrás del ballenero Pequod y su tenaz capitán Ahab.

 

Imagen intermedia

 

MÁS ALLÁ DEL DEMONIO BLANCO

 

En concreto, podemos acudir a otra de las consideradas como mejores obras del neoyorquino, el cuento Bartleby, el escribiente, una historia que fue publicada por primera vez en 1853 de manera anónima en dos entregas en una revista estadunidense.

En ella, Melville nos descubre a uno de los personajes más insólitos y obstinados en la historia de la literatura. Tanto es así que muchos han encumbrado esta obra como precursor del existencialismo y antecedente de algunos de los temas del genio checo Franz Kafka.

Asimismo, el sello español Alianza Editorial nos propone la versión ilustrada de esta obra en un formato de gran tamaño bañado por las ilustraciones de Stéphane Poulin; y Penguin Random House recupera este clásico con una introducción de Enrique Vila-Matas.

Por su parte, el sello mexicano Sexto Piso lanzó en 2014 una versión del clásico de Melville, ilustrada por el artista visual Gabriel Pacheco, y calificó a esta novela publicada en 1851 como “intensa, desmesurada, erudita, fascinante y polifónica”.

 

Imagen intermedia

Portada de Moby Dick, ilustrada por el artista Gabriel Pacheco y publicada por el sello Sexto Piso

 

Asimismo, con el objetivo de recuperar otras obras del escritor, la editorial Alba editó recientemente Chaqueta blanca, una crónica que precede a la gran historia de la ballena blanca en la que, de manera personal, Melville relata todos los años que pasó en el mar descubriendo nuevos territorios, tribus y costumbres “exóticas” para acercarlas a esa sociedad occidental inmersa irremediablemente en el asfalto.

Y también de la mano de esta casa editorial puede llegar a nuestras manos Benito Cereno (1855), la mejor de las novelas de Melville según el célebre escritor argentino Jorge Luis Borges, quien al respecto dejó escrito: “Hay quien ha sugerido que Herman Melville se propuso la escritura de un texto deliberadamente inexplicable que fuera un símbolo cabal de este mundo, también inexplicable”.

De traernos a nuestros días esta obra también se ha encargado con motivo de este aniversario la editorial Nórdica Libros, quien a través de las ilustraciones de Elena Ferrándiz nos devuelve la historia real del español Benito Cereno, de cuyo buque, el Santo Domingo, se apoderaron en 1804 los esclavos que llevaba por aguas del océano Pacífico rumbo a Lima, donde esperaba venderlos.

Por último, para aquellos lectores y lectoras que quieran saber quien es “M”, el escritor y editor argentino Eric Schierloh ha retomado la figura del escritor estadunidense para componer su universo cotidiano a través de sus cartas, memorias o fotografías. Sin duda alguna, todo un material por descubrir en el libro M, de la editorial Eterna Cadencia.

 

EN PANTALLA GRANDE

 

Además de las adaptaciones cinematográficas de Moby Dick en blanco y negro de 1926 (versión muda) y 1930, ambas con John Barrymore como protagonista, quizá la más famosa fue la que dirigió en 1956 John Huston. En ella, el fiero capitán Ahab fue interpretado por el afamado actor Gregory Peck.

En Francia, en 2004, se produjo el cortometraje Capitán Ahab, dirigido por Philippe Ramos, quien encabezó un reparto formado por Frédéric Bonpart en el papel principal. Hay otra versión de 2010 dirigida por Trey Stokes. La más reciente se produjo y exhibió en 2015. Se trata de En el corazón del mar, dirigida por Ron Howard. El elenco lo integraron Chris Hemsworth, Tom Holland, Cillian Murphy, y Benjamin Walker.

 

Con información de Notimex

 

AMU

 

Te recomendamos

Tags

Comparte en Redes Sociales