Nueva escultura en parroquia de San Rafael CDMX, un llamado a orar

Los mexicanos estamos llamados a defender al país y a luchar para que tenga instituciones fuertes y corporaciones de seguridad civiles y militares que trabajen en favor de la gente y no de los criminales o gobernantes corruptos.

Esa es la esencia de la escultura colocada hace unos días en el atrio de la parroquia de los santos Cosme y Damián, de la colonia San Rafael en la Ciudad de México.

Orar por México

Sin ser una imagen religiosa, la pieza creada por el artista plástico Arturo Guzmán Rivera pretende que los asistentes o visitantes al templo católico recuerden - previo a su ingreso - orar por México, sus niños, sus gobernantes y desear lo mejor para el país, explicó el padre José de Jesús Aguilar, párroco de esta iglesia y subdirector de radio y televisión de la arquidiócesis de México.

"Tenemos que hacer oración para que los niños crezcan en un ambiente sano con el ejemplo de sus padres, que todo mundo pueda transitar por sus calles y por sus carreteras sin ningún conflicto, que no haya drogadicción, que no se extienda el narcotráfico, que la violencia cese, que nuestro ejército, la gente de seguridad sean protegidos y protejan al pueblo y no a gente corrupta, que no se enlacen con quienes están buscando el mal de nuestro país, que las instituciones que han sido creadas por el pueblo sean defendidas para que México crezca fuertemente" detalló a Grupo Imagen.

En el caso particular de los gobernantes y autoridades, el propósito de la escultura radica en alejarlos de los "discursos bonitos" sin acciones benéficas para la gente.

"Pidamos también para que todos los gobernantes viajen, ¿en qué sentido? A que el mundo conozca a México por sus palabras, con sus acciones; pidamos para que los gobernantes no tengan una política discursiva, es decir discursos que hablen de todo bonito y no acciones, sino más bien para que los gobernantes se caractericen por acciones concretas en bien de todo el pueblo".

Otro de los propósitos de la obra que muestra un águila con las alas abiertas, una serpiente y un nopal es detonar las oraciones en pro del crecimiento económico de México, agregó el padre José de Jesús Aguilar.

"Y pidamos para que todo territorio tenga su máximo crecimiento en lo que se refiere a la explotación de recursos y sobre todo que no haya ninguna persona que no viva en injusticia, que la pobreza vaya siendo erradicada" comentó.

"Cuando vengan aquí a la parroquia recuerden que aquí hay este signo de que somos orgullosamente mexicanos y tenemos que defender nuestro país y buscar lo mejor para todos" enfatizó.

La pieza escultórica simboliza también lo que hay dentro de cada persona: una serpiente que se arrastra o bien, un águila que vuela y busca los niveles superiores de vida.

"Cada quien tendrá qué ver quién gana en su interior, la serpiente que destruye, la serpiente que te lleva a los más bajo o el águila que te lleva hacia arriba" planteó el sacerdote.

En los últimos tres años, en el atrio de la parroquia de San Cosme y San Damián se han colocado 14 esculturas de imágenes religiosas y civiles, entre ellas, sobresale la dedicada a las madres buscadoras de México y a los desaparecidos, que a partir del domingo pasado quedó en una perfecta diagonal hacia la escultura del águila y la serpiente.