Esconden la cara; Tri cae ante Argentina

El Tri, en una postura conservadora, perdió por marcador de 2-0 ante el combinado albiceleste y se jugará todo ante Arabia Saudita

Irving ‘Chucky’ Lozano lamenta la derrota del Tri ante Argentina. Foto: Mexsport
Irving ‘Chucky’ Lozano lamenta la derrota del Tri ante Argentina. Foto: Mexsport

 

DOHA.- El Tri cayó 2-0 y se aleja cada vez más de los octavos de final, y es que la Argentina de Messi, aquella que se colgó la etiqueta de favorita al título, por fin despertó.

Bien lo dijo el Tata Martino, había que esperar a que Lionel Messi tuviera una mala noche, de lo contrario, no habría cómo frenarlo.

La cuarta entrega de la saga mundialista entre ambos dividió al Estadio Lusail que se pintó de verde y celeste al mismo tiempo.

Argentina, urgida del triunfo, prometió un futbol apabullante, teniendo como figura al mejor del mundo, pero el Tri del Tata Martino, con un sorpresivo y atípico planteamiento le complicó el escenario.

La rivalidad, que trascendió a las calles de Doha, se llevó de vuelta al terreno de juego, un encuentro trabado en donde el miedo al fracaso fue palpable.

El tono del partido lo marcó una dura entrada de Alexis Vega sobre Gonzalo Montiel, aquella sería la línea que se seguiría.

Entre Guido Rodríguez y Nicolás Otamendi se encargaron del Chucky Lozano, la férrea marca se hizo sentir. El Tri mostró una cara distinta con jugadas prefabricadas.

Fue el mismo Andrés Guardado el encargado de seguir puntualmente los pasos de Messi. El veterano, en su quinto Mundial, apeló a su experiencia.

La batalla en las butacas la ganaba el Tricolor que al minuto 39, casi con reloj en mano, entonó al unísono el Cielito Lindo.

La más clara del partido fue para Alexis Vega, con un tiro libre que le complicó las cosas al Dibu Martínez, quien se lanzó sobre su costado derecho y alcanzó el balón.

Argentina se reagrupó para el complemento, volvió a mostrar su futbol hábil en espacios cortos, con jugadas de pared y centros precisos.

México intentó ser cauto en su accionar, había hecho un partido casi impecable defensivamente, pero una fuerte barrida de Erick Gutiérrez, quien tomó el lugar de Guardado en la custodia de Messi, abrió el partido.

Si bien, el tiro de Messi pasó por arriba de la portería de Ochoa, esa jugada fue determinante para terminar de convencer a Argentina de adelantar líneas.

Y así lo hizo, Ángel Di Maria, el eterno socio silencioso de Messi, se asoció con el astro para darle un balón al 10 que sin pensarlo dos veces, incluso sin levantar la mirada, disparó raso.

Los ánimos decayeron y los cambios de poco le sirvieron a México que se vio superado por el buen momento de la Albiceleste, Gutiérrez erró en la marca, consintió de más a Enzo Fernández y éste no perdonó con un disparo cruzado que marcó el segundo gol.

El panorama es oscuro para el Tri, pero aún tiene vida, se complicó en demasía sus intenciones de avanzar a octavos de final pues llegará al duelo ante Arabia Saudita con la obligación de ganar a la espera de que Argentina derrote a Polonia, de preferencia por dos o más goles.

 

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