Logo de Excélsior                                                        
Nacional

Zacatecas, entre pueblos fantasma por guerra entre narcos

La disputa de grupos del narcotráfico por Zacatecas ha provocado una ola de violencia y el desplazamiento de miles de personas; de las huellas de los combates queda registro en los inmuebles.

AFP | Zacatecas | 25-03-2022
La guerra entre grupos del narcotráfico ha provocado el desplazamiento de miles de personas en Zacatecas. (AFP)
AFP

Un pueblo fantasma, las siglas de los cárteles en los muros, su casa vandalizada: Miguel está de vuelta en Palmas Altas, en el estado de Zacatecas, perla del México barroco aplastada por la guerra entre los narcos.

Escoltado por militares, Miguel (nombre cambiado) regresa a su pequeño rancho que ha sido saqueado. Recuperado a mediados de marzo por el Ejército y la Guardia Nacional, el pueblo está desierto, salvo por unos perros que caminan bajo el sol abrasador.

Te recomendamos: Madres de desaparecidos en Zacatecas sufren al no hallar a sus hijos

Un vehículo calcinado yace abandonado a la entrada del pueblo, que se extiende sobre una árida meseta al pie de la Sierra de Los Cardos.

Imagen intermedia

Un vehículo calcinado a la entrada del pueblo de Palmas Altas, que había sido tomado por bandas criminales. (AFP)

"Aquí manda las 4 letras", proclama una pintada con las siglas "CJNG", del Cártel Jalisco Nueva Generación, por cuyo jefe, Nemesio Oseguera, El Mencho, Estados Unidos ofrece 10 millones de dólares.

Unos muros más adelante, las siglas "CJNG" están minuciosamente tapadas con pintura negra por otras tres letras, "CDS", del cártel de Sinaloa, que sobrevivió a la captura de Joaquín El Chapo Guzmán, condenado a cadena perpetua en Estados Unidos.

Desde 2020, estas dos organizaciones se pelean por Palmas Altas y otras áreas de Zacatecas, ruta estratégica hacia el mercado de drogas estadunidense y los puertos del Pacífico y el Golfo de México.

"La historia cambió el año pasado, el Miércoles de Ceniza (17 de febrero de 2021)", recuerda Miguel, un afable agricultor de unos 50 años.

"Comenzaron a secuestrar y golpear a la gente. Mataron a un señor y a su hijo. El miedo nos hizo salir", cuenta a la AFP.

Imagen intermedia

Miembros de la Guardia Nacional aseguran la entrada del poblado de Palmas Altas, luego de que fuera tomado y saqueado por miembros de organizaciones criminales. (AFP)

Un año después solo quedaban cinco familias. "O te vas o te mueres", les decían los delincuentes. El pueblo permanece desierto desde entonces.

Zacatecas y los miles de desplazados por la violencia

Miguel se refugió en Jerez, a unos 30 km de Palmas Altas. Con el despliegue de seguridad espera volver a tiempo para podar sus árboles frutales. "Solos no podemos".

En Zacatecas hay unos 2 mil desplazados, según las autoridades.

Te recomendamos: Viviendas de Jerez, Zacatecas son utilizadas como cuarteles por el crimen organizado

"Queremos que regresen a casa", afirma el secretario de Seguridad de Jerez, Marco Vargas, cómodamente instalado en su oficina en el corazón de este pueblo mágico, atributo turístico de localidades con calles empedradas e iglesias barrocas.

"Vamos a mantener las fuerzas del orden para impedir posibles incursiones o el regreso del crimen organizado", añade Vargas con la voz opacada por el tambor, los trombones y las trompetas de una orquesta que interpreta música tradicional en la terraza de un restaurante.

Zacatecas ya fue campo de batalla entre el Cártel del Golfo y Los Zetas en la década de 2010. 

El CJNG y el CDS han tomado el relevo en áreas remotas de la sierra.

Imagen intermedia

Un residente revisa su casa luego de que fuera saqueada por miembros de una organización criminal en el poblado de Palmas Altas. (AFP)

La violencia es cotidiana: El pasado 15 de enero, un chatarrero fue asesinado al mediodía en su lugar de trabajo en la población de Fresnillo, considerada entre las más peligrosas de México. 

Un tiroteo estalló minutos después en una calle cercana.

Zacatecas también vive picos de barbarie de los que se habla en todo el país. A principios de enero, diez cuerpos fueron encontrados en una camioneta abandonada frente al palacio de gobierno, a un costado de la catedral en el centro histórico de la capital del mismo nombre. 

Fue "una provocación", sostuvo el presidente Andrés Manuel López Obrador.

Te recomendamos: Desplazados de Sarabia regresan a sus hogares; encuentran saqueos y desolación

"Cultura de paz" en Zacatecas

En su catedral de fachada finamente labrada, tras el sermón dominical, el obispo de Zacatecas, Sigifredo Noriega Barceló, confiesa que le gustaría hablar con la "gente que hace el mal", como los llama discretamente: "Lamentablemente no hay interlocutores. Hay muchos grupos, que se dividen y subdividen".

Muy protegido por el Ejército y la Guardia Nacional, el centro de la capital regional es tranquilo. Los turistas mexicanos toman el teleférico hasta la Bufa, el punto más alto de la ciudad.

Por la noche, un payaso arranca carcajadas a los niños sentados con sus padres en la escalinata de la catedral. Los enamorados se besan.

Imagen intermedia

Un hombre ingresa a una casa con agujeros de bala en el portón, que fue saqueada por miembros de una organización criminal en el municipio de Jerez de García Salinas. (AFP)

No solo hay violencia en Zacatecas, suspira la directora del museo de Guadalupe, Rosita Franco, empujando las puertas de la biblioteca conventual que conserva un millar de libros que datan del siglo XVI al XIX.

El rey de España, Felipe VI, pasó un largo rato entre las estanterías durante su visita al museo en 2015 con su esposa Letizia Ortiz, recuerda Franco frente a un retrato de Carlos III, antepasado del monarca.

Franco se niega a hacer cualquier comentario directo sobre la violencia que golpea incluso a Guadalupe, en las afueras de Zacatecas capital. 

Las autoridades prefieren hablar del potencial turístico de la región.

"Creemos en la cultura de paz (...), que el arte cambia vidas y que el arte y la cultura son derechos humanos", dice, invitando a los visitantes a regresar a Zacatecas para el festival barroco de septiembre. ¿Por qué no?

Imagen intermedia

Un soldado monta guardia junto a unos grafitis del narcotraficante Mayo Zambada y el cártel de Sinaloa en la vereda Palmas Altas, municipio Jerez de García Salinas. (AFP)

Visita nuestra Última hora

vjcm

Te recomendamos

Tags

Comparte en Redes Sociales