Se apoyan ante violencia vicaria
Para visibilizar este delito, las ilustradoras recaudan fondos mediante la reproducción de sus obras

La violencia vicaria es un fenómeno semejante a la tortura, una forma de delincuencia organizada en que participan jueces y autoridades en complicidad con los victimarios, denunciaron madres que han sido despojadas de sus hijos e hijas.
Para visibilizar, denunciar y actuar contra ese delito, mujeres víctimas presentaron el Calendario Vicario, que reproduce pinturas de Gloria Monterrubio y Claudia Jiménez, ambas madres que fueron despojadas de sus hijos.
Este calendario, editado por el Instituto de la Mujer de Morelos es un trabajo a favor de cambiar la cultura de desaparecidos por una cultura de paz. Con el donativo para este proyecto se ayuda a las madres a resolver sus casos y se contribuye a impulsar la legislación en Morelos y que la A.C. Artistas Legales pueda dar presentación jurídica y apoyo integral a otras madres e infancias que viven lo mismo.
En la presentación del calendario, se hizo hincapié en que las principales víctimas de la violencia vicaria son los hijos, quienes son violentados al ser separados de sus madres, al ser sometidos a la versión de que fueron víctimas de abandono de parte de sus progenitoras, y, además, porque se les inculca odio hacia ellas.
Los hijos que se llevan ya no regresan igual. Y hay que entender que un agresor nunca será un buen padre”, afirmó Lizbeth Estrada Manrique, actual víctima de violencia vicaria.
Sus hijos fueron llevados de Chihuahua a Morelos y tiene más de un año sin contacto con ellos.

Claudia Jiménez, artista plástica y víctima de violencia vicaria insistió que ese delito demuestra que en México la delincuencia alcanza niveles “delirantes”, pues existe contubernio entre autoridades y jueces que permiten y solapan que los padres sustraigan a sus hijos, y les impidan cualquier contacto con las madres.
La violencia no está generalizada. Lo que está generalizado es la impunidad. Hay que estar conscientes de que en este fenómeno existe la víctima, el victimario y el espectador, y todos esos papeles se pueden intercambiar”, reiteró Jiménez.
La artista expuso que oficialmente hay alrededor de 3 mil 200 mujeres que pertenecen a colectivos que las arropan y las protegen, pero hay un número indeterminado de mujeres víctimas de este delito que no han encontrado el camino jurídico para iniciar el proceso de recuperación de sus hijos.
Gloria Monterrubio, artista plástica, insistió en que las mujeres organizadas en colectivos han marcado el camino jurídico para recuperar a sus hijos sin ejercer violencia pese al dolor al que han sido sometidas y a la colusión de jueces que no aplican los principios del interés superior de los niños, ni realizan su trabajo con perspectiva de género.
Alexandra Volin, pionera en la lucha por la justicia para las madres víctimas de violencia vicaria, expuso que se trata de un colectivo que sigue visibilizando la problemática y articulándose para tener mayor fuerza.
Estamos en vías de ser una Asociación Civil, y eso nos dará más fuerza. Este tema no es más que una forma más de delincuencia organizada, por eso se requiere de una sociedad civil más organizada”, reiteró Volin.
El Calendario Vicario tiene la particularidad de iniciar el conteo de días el 10 de mayo, para reforzar que este delito afecta en primera instancia a las madres.
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