Cumple un año Plan DN III E contra el Covid-19

El Plan DN III E se diseñó por el Ejército y la Fuerza Aérea mexicanos en 1965. Foto: Cuartoscuro

CIUDAD DE MÉXICO

El Plan de Auxilio a la Población Civil en casos de desastre, denominado Plan DN III-E, de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) cumple un año de aplicación continua en su modalidad de atención y combate a un agente biológico, el SARS-Cov2, que provoca la enfermedad de Covid-19.

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Además, esta estrategia es el eje rector para las tareas del Plan Mariana, de la Secretaría de Marina-Armada de México (Semar), y Guardia Nacional A, de esta corporación federal, que también están combatiendo la pandemia.

En el informe más reciente de esas actividades, entre el 19 de febrero al 20 de marzo pasados, 39 mil 183 elementos de las tres instituciones atendieron a 3 mil 99 pacientes en instalaciones militares y navales.

También se realizó el traslado de 5 mil 239 enfermos por Covid-19 entre instalaciones hospitalarias, se realizó el traslado de 828 toneladas de insumos médicos y se contrató a 127 profesionales de la salud.

En la fase más reciente de la aplicación del Plan DN III E, las fuerzas armadas se sumaron al Plan Nacional de Vacunación, con tareas de trasladado, vigilancia en rutas terrestres y, en algunos casos, en la aplicación de los biológicos.

El informe de estas tareas, correspondiente al periodo del 19 de febrero al 20 de marzo de este año, establece que como parte de las actividades logísticas para el traslado de vacunas se transportaron vía aérea un millón 831 mil 60 dosis.

Por la vía terrestre se transportaron 3 millones 201 mil 440 dosis de vacunas con el apoyo de24 aeronaves, con 136 operaciones aéreas y 145:35 horas de vuelo.

Para el traslado de biológicos por vías terrestre se realizaron en todo el territorio 515 rutas, para la distribución de las dosis a los centros de vacunación, con la participación de 16 mil 343 elementos de las tres instituciones en operaciones aéreas y terrestres.

Atención ante emergencias

El Plan DN III E se diseñó por el Ejército y la Fuerza Aérea mexicanos en 1965, y se aplicó por primera ocasión al año siguiente durante las inundaciones entre Tamaulipas y Veracruz, provocadas por el huracán Inés, con el desbordamiento del río Pánuco.

La estrategia atiende afectaciones a la población civil causadas por desastres de tipo natural, como sismos, huracanes o nevadas; también por causas provocadas por el ser humano, como accidentes, derrame de sustancias peligrosas o incendios.

Para el caso del Covid-19 se aplica una estrategia para daños causados por un agente biológico natural, lo que ha provocado la pandemia más reciente de la historia.

A lo largo de la historia, el Plan DN III E ha brindado apoyo a la población en fenómenos como los terremotos de 1985 en la Ciudad de México y los ocurridos el 7 de septiembre de 2017 en Oaxaca y Chiapas.

También se desplegó la ayuda tras el sismo del 19 de septiembre de ese mismo año, que volvió a afectar a la capital del país y a estados como Morelos, Puebla, México, Hidalgo, Veracruz y Michoacán.

Epidemia e inundaciones

El 24 de marzo del año pasado, el secretario de la Defensa Nacional, general Luis Cresencio Sandoval González, anunció la puesta en marcha del Plan DN III E, como parte de la segunda fase del combate al Covid-19.

Se detalló que sólo 16 mil 750 elementos estarían destinados para trabajos de atención a la salud, en 62 hospitales de terapia intensiva y 41 de hospitalización en todo el país.

La Fuerza Aérea Mexicana estableció 125 rutas para el traslado de más de 430 toneladas de insumos para la instalación de los hospitales Covid, con más de 750 horas de vuelo.

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Además, con el apoyo de otros países, se realizaron puentes aéreos para trasladar a 750 extranjeros, vacacionistas, que se quedaron varados en México, y se repatrió a más de ml 500 connacionales que habían quedado en la misma condición.

En medio de esta situación, entre septiembre y noviembre del año pasado una serie de inundaciones afectaron, principalmente, a los estados de Tabasco y Chiapas.

Para el apoyo a la población civil, la Sedena desplegó 2 mil 492 elementos del Ejército y la Fuerza Aérea, mientras que la Armada de México desplegó a todo su personal, naves marítimas y terrestres en ambas entidades.