Policía de Brasil allana la casa de Bolsonaro en operativo sobre su vacunación covid
El exmandatario fue un ferviente opositor a los inmunizantes contra el covid-19, y repitió en reiteradas ocasiones durante su mandato que no había sido vacunado.

La policía brasileña allanó el miércoles la casa del expresidente Jair Bolsonaro y confiscó su teléfono celular como parte de una investigación sobre sus registros de vacunación contra el covid-19. La investigación puede responder preguntas sobre cómo exmandatario, un escéptico estridente del coronavirus que juró nunca recibir una vacuna contra el virus, fue registrado como vacunado en los registros de salud que se hicieron públicos en febrero.
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"Las inserciones falsas, ocurridas entre noviembre de 2021 y diciembre de 2022, dieron como resultado la alteración de la verdad sobre (...) la condición de inmunización contra el covid-19 de los beneficiarios", señala el comunicado difundido por el Ministerio de Justicia y Seguridad. La supuesta falsificación permitió a personas "emitir los respectivos certificados de vacunación y utilizarlos para eludir las actuales restricciones sanitarias impuestas por las autoridades públicas (Brasil y Estados Unidos) destinadas a prevenir la propagación (...) del covid-19", agrega la nota.
Bolsonaro confirmó a los periodistas el allanamiento de su casa en Brasilia y reiteró que nunca se había vacunado contra el covid-19. Negó cualquier papel en la supuesta falsificación de documentos.
"Por mi parte, no hubo nada falsificado. No tomé la vacuna. Punto", dijo, y agregó que su teléfono fue incautado.
La investigación de la vacuna es una de las muchas que ponen bajo presión al exlíder de extrema derecha, incluidas investigaciones sobre supuesta supresión de votantes, ataques a la legitimidad de las elecciones brasileñas y malversación de donaciones extranjeras. Bolsonaro ha negado haber actuado mal en esos casos.
La policía federal dijo en un comunicado que estaban cumpliendo 16 órdenes de allanamiento y seis órdenes de arresto preventivo en Brasilia y Río de Janeiro como parte de la operación, pero no reveló los nombres de los objetivos. Dos personas familiarizadas con la investigación dijeron que la policía arrestó a Mauro Cid y Max Guilherme, asistentes personales de Bolsonaro como presidente y que se quedaron como sus ayudantes cuando renunció en enero.
La policía dijo que estaba investigando "datos falsos" supuestamente agregados a una base de datos nacional de covid-19 entre noviembre de 2021 y diciembre de 2022, cuando Bolsonaro era presidente. Derrotado en las elecciones presidenciales de octubre, viajó a Estados Unidos el 30 de diciembre, dos días antes de la toma de posesión de su sucesor de izquierda, Luiz Inácio Lula da Silva.
El certificado de vacunación era obligatorio para entrar a Estados Unidos. El gobierno de estadunidense anunció el lunes que esta obligación se levantaría a partir del 11 de mayo. Desde su regreso a Brasil a fines de marzo, Bolsonaro ha sido entrevistado dos veces por la Policía Federal.
“Como resultado, pudieron emitir certificados de vacunas y usarlos para eludir las restricciones impuestas por las autoridades públicas en Brasil y Estados Unidos”, dijo la policía.
Bolsonaro fue muy criticado por su gestión de la pandemia, que causó más de 700 mil muertes en Brasil. La investigación apunta a razones "ideológicas" para eludir las reglas de vacunación, dijo la policía, "para mantener un discurso de ataque a la vacunación contra el covid-19".
“Confiamos en que se aclaren todas las dudas jurídicas y se demuestre que Bolsonaro no cometió actos ilegales”, escribió en las redes sociales Valdemar Costa Neto, líder del partido político de Bolsonaro.
El 5 de abril tuvo que prestar declaración por la investigación abierta por el ingreso irregular a Brasil de valiosas joyas regaladas por Arabia Saudita en 2021. Y la semana pasada, Bolsonaro debió declarar ante la PF como parte de otra investigación sobre su presunto papel en los disturbios del 8 de enero, cuando miles de sus seguidores invadieron las sedes de los tres poderes del Estado en la capital brasileña en un intento de tumbar a Lula, quien había asumido siete días antes.
Con información de AFP | dm
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