Macron en Londres: lo que hay detrás de su histórica visita al Reino Unido

Calificada como "histórica visita" por Downing Street, Macron se reúne con Starmer y Carlos III en una visita centrada en defensa e inmigración

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El rey Carlos III del Reino Unido saluda cordialmente al presidente de Francia, Emmanuel Macron, durante una reunión oficial celebrada en Blenheim Palace, cerca de Oxford, como parte del encuentro de la Comunidad Política Europea en julio de 2024. Ambos líderes lucen atuendos formales en un entorno histórico con estanterías y columnas decorativas.

El presidente francés, Emmanuel Macron, inició este martes una visita de tres días a Reino Unido, donde será recibido por el rey Carlos III, antes de una cumbre con el primer ministro Keir Starmer centrada en la inmigración y la defensa.

Tras el enfriamiento en las relaciones bilaterales a raíz del Brexit y bajo los anteriores gobiernos conservadores, la visita ocurre en un clima de acercamiento entre ambos países, impulsado por la llegada del laborista Starmer a Downing Street hace un año.

La guerra en Ucrania, que ha devuelto los temas de defensa y seguridad al centro de las preocupaciones europeas, ha acercado más a los dos aliados, principales potencias militares del continente.

Reunión con la realeza y actos oficiales

"Nuestros dos países enfrentan una multitud de amenazas complejas, provenientes de múltiples direcciones. Como amigos y aliados, las enfrentamos juntos", afirmará el rey en su discurso previo a la cena de Estado del martes.

Esta visita, la primera de un presidente francés desde Nicolas Sarkozy en 2008 y de un dirigente europeo tras la coronación de Carlos III, fue calificada el lunes como "histórica" por Downing Street.

Del lado francés, se busca proyectar una señal de "reconvergencia" en torno a "intereses compartidos", en línea con la "reconfiguración" más amplia que desea Starmer con la Unión Europea.

Agenda bilateral y cooperación militar

En el plano político, se prevé que la cumbre bilateral del jueves confirme un refuerzo de la cooperación en materia de defensa y de lucha contra la inmigración ilegal.

Antes de eso, Macron y su esposa, Brigitte, fueron recibidos a última hora de la mañana en la base militar de Northolt por el príncipe heredero Guillermo y su esposa Catalina.

Juntos se dirigieron al Castillo de Windsor, al oeste de Londres, donde los esperaban el rey y la reina Camila, casi dos años después de su propia visita a Francia.

Tras un desfile en carruaje, una revista de tropas y la cena de Estado, la primera jornada estuvo marcada por actos oficiales en torno a la realeza.

Macron también pronunció un discurso ante miembros de la Cámara de los Lores y de los Comunes reunidos en la Galería Real del Parlamento.

Encuentros clave y desafíos compartidos

El miércoles se reunirá con Starmer en Downing Street, participará en un evento sobre inteligencia artificial y asistirá a una cena en la City de Londres.

En el ámbito económico, París espera avances en el proyecto de la central nuclear Sizewell C, que aún está a la espera de una decisión final de inversión.

También está prevista una visita al Museo Británico.

El jueves se celebrará la cumbre bilateral, en la que se esperan avances, especialmente en temas de defensa.

Uno de los objetivos es adaptar a los nuevos desafíos de seguridad —en particular la amenaza rusa— los acuerdos de Lancaster House, firmados en 2010 y que constituyen la columna vertebral de la cooperación militar bilateral.

Inmigración y cooperación transfronteriza

Comprometidos en el conflicto en Ucrania, Starmer y Macron copresidirán el jueves una reunión virtual de los países de la "coalición de voluntarios", con miras a un futuro alto el fuego.

Lanzada en marzo, esta iniciativa sigue dependiendo de las negociaciones impulsadas bajo los auspicios de la administración del expresidente estadounidense Donald Trump.

Del lado británico, las expectativas son altas respecto a la lucha contra la inmigración ilegal, tras un número récord de llegadas por el Canal de la Mancha desde enero.

Londres lleva meses presionando para que las fuerzas del orden francesas intervengan y detengan los pequeños botes.

Actualmente, conforme al derecho marítimo, una vez que las embarcaciones están en el agua, las autoridades francesas solo intervienen en operaciones de rescate.

Sobre este tema sensible, Londres y París también discuten un posible intercambio de migrantes: Reino Unido aceptaría a algunos y enviaría la misma cantidad de regreso a Francia.

Según varios medios, este proyecto inquieta a algunos países europeos, que temen que Francia termine devolviendo a esos migrantes al primer país de la UE al que llegaron.

Agence France Presse. 

 

 

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