Cumple príncipe su último deseo

Enrique se salió con la suya y será cremado en lugar de ser enterrado en la tumba real 
 

Por: DPA

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COPENHAGUE.

El fallecido príncipe Enrique de Dinamarca, marido de la reina Margarita II, no tendrá un funeral de Estado, sino que será cremado y su familia se despedirá de él con un funeral íntimo en Copenhague. El príncipe consorte falleció en la tarde del martes a los 83 años en el palacio de Fredensborg.

En septiembre de 2017, la casa real comunicó que padecía demencia. En enero contrajo una pulmonía durante sus vacaciones en Egipto. Los médicos detectaron además un tumor benigno en sus pulmones.

La semana pasada su estado empeoró drásticamente; la casa real canceló todos sus compromisos y el príncipe heredero, Federico, de 49 años, regresó de los Juegos Olímpicos de Invierno en Corea del Sur. El príncipe Enrique fue llevado el martes a Fredensborg, donde quería pasar “sus últimos días”.

Según informó ayer una portavoz de la casa real danesa, Enrique deseaba ser cremado. La mitad de sus cenizas será arrojada al mar, y el resto irá a parar a una urna del jardín del palacio de Fredensborg, al norte de la capital.

El año pasado anunció que no quería ser enterrado junto a su mujer, en la catedral de Roskilde, argumentando que nunca fue nombrado rey y que por lo tanto no quería descansar eternamente junto a una reina.

Henri de Laborde de Monpezat pasó sus primeros años en Indochina, donde su padre administraba las plantaciones familiares. La guerra les expulsó definitivamente de Vietnam, aunque Henri volvió posteriormente a Hanói para pasar su examen de bachillerato.

Tras estudiar Ciencias Políticas, vietnamita y chino, abrazó la carrera diplomática. Tenía un puesto en Londres cuando conoció a Margarita, entonces heredera de la corona danesa.

Al casarse con ella, cambió de nombre, renunció a su nacionalidad francesa para convertirse en danés y cambió su fe católica por el protestantismo. Pero sobre todo se resignó, a regañadientes, a caminar tras los pasos de Margarita, adorada por sus súbditos.

“Acepto jugar el juego. Pero es muy duro para un hombre no ser considerado en el mismo plano que su esposa”, reconoció en sus memorias, El destino obliga, publicadas en 1997.

El presidente francés, Emmanuel Macron, manifestó ayer sus condolencias a la reina Margarita, asegurando que el príncipe siempre impulsó la amistad entre Francia y Dinamarca.

Mientras que el embajador francés en Dinamarca comentó en Twitter: “El príncipe Enrique era el más francés de los daneses y el más danés de los franceses”.