Provocan multas con luz preventiva en Estados Unidos
El Departamento de Transporte de Florida reduce medio segundo la duración de la luz amarilla de los semáforos en intersecciones donde unas cámaras registran las infracciones. En lo que va del año ya han generado más de 120 millones de dólares

CIUDAD DE MÉXICO, 1 de junio.- Recortar medio segundo la duración de la luz amarilla de los semáforos de Florida aumentó las multas y, por consiguiente, los ingresos para el estado, los condados, las ciudades y las empresas encargadas de las cámaras que toman las imágenes de los infractores.
De acuerdo con un reportaje publicado por el canal de noticias local 10 News, el Departamento de Transporte de Florida redujo en silencio las normas sobre la duración de la luz amarilla en 2011 y lo aplicó especialmente en intersecciones clave que tienen las llamadas Cámaras de Luz Roja (RLC, por sus siglas en inglés).
Dichas cámaras graban en automático a los automovilistas que se pasan la luz roja, y con ese material, el Departamento de Transporte envía las multas a los domicilios de los propietarios de los vehículos.
De acuerdo con el reporte, en 2012 las RLC generaron más de 100 millones de dólares en multas en 70 comunidades de Florida. De enero a mediados de mayo de 2013, las mismas cámaras ya habían generado 120 millones de dólares.
El 52.5 por ciento de esos recursos fueron a parar al estado y el restante se dividió entre las ciudades, condados y las empresas que instalaron las cámaras.
Aunque la reducción de duración de la luz amarilla fue de apenas medio segundo, eso bastó para duplicar el número de multas, asegura el canal en su página de internet www.wtsp.com
Al respecto, el Departamento de Transporte de
Florida afirma que cada violación generada electrónicamente es revisada por un oficial de la policía local antes de validar y enviar la multa al conductor.
La agencia señala también que no tenía ningún motivo financiero para acortar las luces amarillas, pues no recibe ningún pago directo de cada multa de 158 dólares, que se eleva a 262 dólares si no se paga en los primeros días.
Pero para James Walker, director ejecutivo de la Asociación Nacional de Automovilistas, “las Cámaras de Luz Roja son un negocio con fines de lucro entre las ciudades y las empresas de las cámaras y el estado”.
“Cambiaron las reglas, creo yo, deliberadamente, con el fin de que las luces amarillas más cortas dejaran más multas”, dijo a 10 News el representante de la asociación, que hace campaña en contra de las RLC alegando que la tecnología afecta principalmente a los conductores seguros.
Ignoraron riesgos
La duración de la luz amarilla se calcula, al menos en Estados Unidos, utilizando una compleja fórmula que toma en cuenta variables como el tamaño de la intersección, la inclinación del camino, el tiempo de reacción del conductor para frenar y, principalmente, la velocidad autorizada para circular en cada calle o avenida.
En su ley anterior, Florida establecía que se tomaría en cuenta el límite de velocidad o el promedio de velocidad real de los vehículos, “el que fuera mayor”. Pero en la reforma de 2011 se eliminaron esas palabras y se dio libertad a cada condado y ciudad para reducir la luz amarilla a su gusto.
Lo anterior pese a que el Departamento de Transporte y la Administración Federal de Autopistas de Estados Unidos recomiendan no utilizar el límite de velocidad en la ecuación para determinar la duración de la luz amarilla, ya que hacerlo resulta en “más violaciones a la luz roja y tasas de accidentes más altas”.
Otro informe de la primera dependencia revela que cuando la duración de la luz amarilla se alarga, se registra una severa caída en el número de accidentes.
“El incremento de un segundo en la duración de la luz amarilla provoca una disminución de 40 por ciento en el número de accidentes graves relacionados con la luz roja”, dice el informe del Departamento de Transporte.
Jim Walker asegura que acortar la duración de la luz también provoca que los conductores tengan menos tiempo para reaccionar, lo que puede dar lugar a colisiones traseras. Pero Charles Territo, portavoz de American Traffic Solutions (ATS, por sus siglas en inglés), una de las mayores operadoras de cámaras de luz roja, dijo que los accidentes por alcance “no son causados por las cámaras de luz roja, son causados por conductores distraídos”.
Además, el Departamento de Transporte recomienda agregar medio segundo extra de luz amarilla en las intersecciones por las que circulen muchos camiones o conductores de edad avanzada para que puedan reaccionar de forma segura.
News 10 recordó que Tampa Bay es el hogar de cinco de los 12 distritos con mayor número de ancianos en Estados Unidos, aunque ahora también es el hogar de algunas de las luces amarillas más cortas del país.
“Es inmoral para hacer eso”, manifestó Walker. “Básicamente están castigando a los conductores seguros con ingeniería deliberadamente incorrecta. Eso no es moral para mí.”
Washington tiene la vía en la que más se benefician
La Avenida Nueva York, en Washington DC, es probablemente “una de las calles más lucrativas del mundo” en cuanto a generar ingresos por multas de tránsito se refiere, asegura un reporte del periódico The Washington Post.
Y es que las nueve cámaras instaladas en esa avenida generaron el año pasado casi 11.8 millones de dólares por las 93 mil 313 multas por rebasar los límites de velocidad y no respetar la luz roja de los semáforos. La cifra llega a 28 millones de dólares si se contabiliza desde el inicio de 2011.
Es, en promedio, 30 mil 570 dólares lo que se obtiene al día gracias a las cuatro cámaras-radares de velocidad y cuatro cámaras que graban a quienes no respetan el alto en apenas tres millas o 4.82 kilómetros.
Y lo mejor del caso, al menos para el Distrito de Washington, es que la mayoría de los infractores no viven en él, sino en Maryland, Virginia y otros estados. Es por ello que los residentes de Washington encuestados se dicen satisfechos por el despliegue de cámaras y radares de velocidad distribuidos en toda la ciudad.
“Los no residentes del Distrito pueden experimentar más la desventaja de recibir multas sin percibir el beneficio de las calles más seguras”, dijo a The Washington Post Anne T. McCartt, vicepresidenta del Instituto de Seguros para la Seguridad en las Carreteras.
De acuerdo con una encuesta realizada por el Instituto a finales del año pasado, “un gran porcentaje de residentes apoyó las cámaras de luz roja e incluso las cámaras de velocidad”.
De hecho, 76 por ciento de los entrevistados aprobó el uso de cámaras de velocidad y 87 por ciento el uso de las cámaras de luz roja.
Los partidarios de las cámaras también dijeron que se sienten más seguros donde están instaladas y casi la mitad de ellos pidieron que se utilicen para capturar a personas que no se detienen por completo en las señales de alto.
El 47 por ciento dijo que apoyaría el uso de las cámaras para detectar a los conductores que se estacionan frente a entradas de estacionamientos e invaden las intersecciones o cruces peatonales.
Y es que más de un tercio de las personas fallecidas en accidentes de tránsito en Washington DC eran peatones. Entre 2007 y 2011, 41 por ciento de los accidentes fatales en la ciudad ocurrió en las intersecciones. El exceso de velocidad provocó 25 por ciento de las muertes en ese mismo periodo.
Menos accidentes
De acuerdo con McCartt, un estudio del Instituto de Seguros para la Seguridad en las Carreteras reveló que en las ciudades donde se utilizan las Cámaras de Luz Roja disminuyeron 24 por ciento los accidentes fatales causados por no respetar el alto.
Otro hallazgo notable en la investigación es que el miedo a ser descubierto es mayor al que provoca pagar una multa. En el caso específico de los conductores ebrios, la policía encontró que publicar los planes de operativos en su contra es más eficaz que esconder agentes para “cazar” a los borrachos.
Los investigadores descubrieron que ese principio se extiende a las cámaras de tráfico, pues aunque a los conductores les duele pagar una multa de 50 dólares, el temor a ser descubiertos les hace tener más cuidado.
Una prueba de ello, dice McCartt, es que quienes conducen por la Avenida Nueva York ya han identificado la ubicación de las cámaras y disminuyen su velocidad conforme se acercan a ellas, lo que también provoca que frenen los vehículos que vienen tras ellos.
“Nuestros estudios han demostrado que las infracciones disminuyen con las Cámaras de Luz Roja y las cámaras de velocidad”, indicó McCartt a The Washington Post.
Pese a ello, en los seis primeros meses del año, las cámaras de la Avenida Nueva York estaban por igualar o superar el número de multas e ingresos por infracciones de tránsito.
EL EDITOR RECOMIENDA



