Logo de Excélsior                                                        
Función

‘La vida es una escuela que aprendí en la montaña’: Roberto Canessa

El uruguayo es uno de los sobrevivientes del accidente aéreo de 1972 en Los Andes y compartió en exclusiva con Excélsior cómo la cinta La sociedad de la nieve, en la que se cuenta el hecho, ha conquistado a los más jóvenes. El hoy cardiólogo vendrá a México en abril para compartir su historia de vida mediante conferencias.

Nancy Méndez | 02-03-2024
Roberto Canessa, sobreviviente de Los Andes
El sobreviviente del accidente aéreo de 1972 en los Andes, quien, junto a Nando Parrado, atravesó la montaña sin equipo especial en busca de ser rescatado junto a sus compañeros de viaje, platicó en exclusiva con Excélsior. Foto: Cortesía Pinpoint

Cuando Roberto Canessa cierra los ojos y se traslada a Los Andes, donde en 1972, a sus 19 años de edad, sobrevivió no sólo al accidente aéreo del vuelo 571 de la Fuerza Aérea Uruguaya, sino a una travesía de 10 días y sin equipo especial a través de esta cordillera, junto con Nando Parrado, la primera imagen que viene a su mente es la del arriero Sergio Catalán, quien los encontró y posibilitó su rescate, luego de un recorrido de 60 kilómetros y tras 72 días del percance.

Veo al arriero, lo veo parado con su caballo, totalmente incierto de que no sabía de dónde veníamos. La generosidad de ese hombre de campo, que dejó su tarea para llevar a desconocidos. Pregunto yo ‘¿cuántos más tenemos que ser arrieros en esta sociedad que cae uno muerto al lado y te mueves para que no te salpique?

Yo diría ahora que si tienes dónde comer, dónde dormir y dónde tomar agua, el asunto eres tú. No esperes más que eso. Tenemos mucho más de lo que necesitamos y hacemos mucho menos de lo que podemos. Con esas cosas, ya está, ya sos millonario”, afirmó en entrevista exclusiva con Excélsior.

Hoy, el rugbista uruguayo, de 71 años de edad, es médico cardiólogo, conferencista y uno de los 16 sobrevivientes del accidente áereo.

La historia de los sobrevivientes trascendió en el mundo, por lo extraordinario de las circunstancias por las que pasaron. Tras el impacto de la aeronave, el 13 de octubre de 1972, la búsqueda por encontrar a los sobrevivientes se canceló días después, el 21 de octubre, cuando, tras sobrevolar la zona, las autoridades no lograron encontrar el fuselaje blanco del avión que se perdía entre la nieve.

En tanto, los sobrevivientes sufrieron congelación, sed y hambre, que los llevó a recurrir a la antropofagia. Y aunque parecía que todo estaba perdido, Roberto Canessa y Nando Parrado escalaron la montaña en busca de ayuda y lograron encontrarla para su rescate y el de sus compañeros de viaje, gracias al arriero Sergio Catalán.

Tal historia se relató sensiblemente en la reciente película La sociedad de la nieve, del director español J.A. Bayona, basada en el libro homónimo de Pablo Vierci.

La producción ganó 12 premios Goya y está postulada al Oscar en las categorías de Mejor Película Internacional y Mejor Maquillaje y Peinado.

Roberto Canessa, protagonista de la historia real y quien visitará la Ciudad de México para ofrecer dos conferencias acerca de su experiencia de vida tituladas Sobreviví a los Andes, el 13 y 15 de abril en el Centro Cultural Teatro I, reveló sus aprendizajes en la montaña.

No hay que esperar a que te vengan a rescatar los helicópteros, no hay que esperar de afuera, sino esperar de ti mismo. Si no hubiera sido por nosotros, estuviéramos muertos por la montaña. Ya nos dábamos por muertos. Pudimos conseguir los helicópteros, pero tuvimos que irlos a buscar caminando. Creo que hay que darse cuenta que las cosas dependen de sí mismo y no de los demás”, afirmó Canessa.

Su determinación y valentía para emprender la expedición que los salvaría, mucho tuvo que ver con lo aprendido en casa.

Ser fuerte de mente y ser tozudo está... casi no hay límite. Era un poco ese tipo de jugador de rugby determinado por una madre que me había dado mucha confianza. Yo le decía a mamá: ‘quiero ir a la Luna’ y ella me decía: ‘¿qué maleta vas a llevar?’.

Por eso es tan importante darles confianza a los niños y que aprendan de sus propios errores. No estar constantemente cuidándolos y no dejándolos crecer y eso es lo que yo les enseño a mis nietos, que dicen que el abuelo los deja hacer lo que quieran. La vida se aprende con las experiencias propias. Es una escuela que aprendí en la montaña”, afirmó.

¿Cuál fue la confrontación que vivió ante los compañeros de viaje que se quedaron en la nieve?

Creo que tampoco hay que prodigarse de más. El amor al prójimo como a ti mismo quiere decir que también tienes que cuidarte a ti, no tienes que darle al prójimo más de lo que tú tienes. Yo creo que muchos en la montaña, como Numa (Turcatti, q.e.p.d.) se prodigaron totalmente y se murieron, que es una lección muy heroica, pero muy triste también ¿no?

Eso lo muestra la película. Evidentemente te transporta a lo que pasó en la montaña. Es como un puente que te hace ver, de los ojos de la civilización a la que pertenecíamos, a transportarte a la sociedad de la nieve, una sociedad muy especial donde cuando se moría alguien, no te daba lástima por él, sino por ti, porque eras el próximo en la lista de espera”, relató.

 

SOBREVIVIR O MORIR

Los sobrevivientes en la montaña tuvieron que tomar una decisión fundamental para lograrlo: la antropofagia, es decir, alimentarse de quienes habían muerto. ¿Cómo vivieron esa discusión moral y el impacto de hacerlo? Para Roberto Canessa era el fallo necesario para vivir o morir.

Eso es, sin duda, lo que más le llama la atención a la gente que no estuvo en la cordillera y, como yo estuve ahí, siento que fui un conejillo de indias de ese experimento y ¿sabes lo que sentía? Que eso no era humano, que eso no era normal, que por donde estaban transitando mis decisiones era totalmente extraño, que era un lugar donde se habían agotado los manuales de la civilización.

Pero cuando agarré ese pedazo y dije: ‘mejor no lo como, me quiero morir dignamente’, me acordé de mi madre y que yo tenía la oportunidad única de decirle: ‘mamá, no llores más, que estoy vivo’. Si para eso me tenía que comer a un muerto, me lo comía tranquilamente, de la misma manera que si mi cuerpo estaba ahí y yo me moría. Que fuera (yo) parte de la cena de mis amigos, realmente para mí hubiera sido un orgullo. Pero, ¿la humanidad qué puede decir? Si nos habían dado por muertos. Fíjate tú, ¿qué autoridad moral podían tener?

Igual cuando yo le dije: ‘¡mamá, llegué!’, ella me dijo: ‘yo te estaba esperando’, y luego le dije: ‘mamá, me tuve que comer a los muertos’ y ella me dijo: ‘¿y a mí qué me importa, quédate tranquilo, estás bien, ya estás en casa’”, compartió.

Hoy, tras esta segunda oportunidad, concibe la vida con agradecimiento y amor profundo.

El otro día mi nieto de cuatro años me dijo: ‘abuelo, yo quiero escalar montañas como vos, para salvar a mis amigos’. ¿Qué te parece? ¿Te parece que no es una respuesta linda? O como el abrazo que me dio el padre de Arturo Nogueira (quien murió en la montaña), cuando volvimos a jugar al rugby y me dijo: ‘hoy no está mi hijo, pero estás tú’. Yo creo que esa grandeza de las familias de quienes no volvieron, no me voy a cansar de agradecerles el respaldo frente a lo inefable de la ausencia de sus hijos”, enfatizó.

 

UNA PELÍCULA SENTIDA

Canessa hizo un cameo en La sociedad de la nieve como el médico que revisa a su propio personaje, interpretado por el actor Matías Recalt. El resultado del filme de Bayona lo tiene más que sorprendido, porque llevó la historia a nuevas generaciones.

Estoy totalmente fascinado, pero ¿sabes de qué? De ver a los jóvenes de 14 o 15 años que se enganchan con la película. Me paran por la calle y me dicen: ‘yo soy mexicano y no puedo parar de ver esta película que me enseña tanto’, como el poder enseñarle a la juventud a luchar por la vida. Los padres están agradecidos.

Es un fenómeno mundial (la cinta) y lo que ha hecho Bayona es una contribución a la humanidad y, sobre todo, a esta juventud que tanto nos preocupa y que son quienes van a llevar las riendas de nuestro destino.

Es una película empática y solidaria con lo que pasó y tiene la gente una oportunidad única de estar acompañándonos en la montaña, en esa montaña terriblemente hermosa, pero, a su vez, despiadada de lo que es la naturaleza más cruel y poderosa”.

Algo de lo que no se vio en esta producción fue que Canessa había descubierto un camino que quizá pudo llevarlos con mayor rapidez hacia su rescate.

Sí, el camino por el que se va a la cordillera. Se entra por el lado argentino, porque, si no, tienes que escalar al límite de cinco mil metros entre Argentina y Chile, pero esto también es un ejemplo de que hay varios caminos para llegar y no solamente el mejor te lleva al destino. Tienes que elegir uno y hacerlo, porque si no, quedas en la parálisis del análisis”, planteó.

Tampoco se retrató en la cinta que el rescate en realidad duró dos días y no uno como lo expone la trama.

Gustavo Zerbino (otros sobreviviente) le dijo a Bayona: ‘esa noche que pasamos ahí, fue una noche muy importante’ y dice Bayona: ‘si habrá sido importante esa noche, ¡esa noche sola da para una nueva película!’, lo cual quiere decir que han quedado muchas cosas poderosas afuera.

Si muestras lo que nos pasó en la cordillera, la gente se para y se va del cine. Es (sólo) una manifestación artística, una obra de arte, a través de la tragedia de lo que nos pasó. Tienes que verla cuatro veces, porque se filmaron 400 horas y se mostraron dos, entonces hay mucho ahí. Y bueno, el premio Oscar ya se lo dio la humanidad con ese apoyo que nos dan cuando vamos por la calle. Eso ya está. Lo demás es política”, destacó.

 

LA CONFERENCIA

A Canessa le entusiasma venir a México en donde ofrecerá 12 conferencias.

Les voy a dar un abrazo muy fuerte al corazón de todos esos chilangos divinos que siempre me han recibido con tanto cariño. Quiero decirles: ‘tú no tienes problemas, tienes dificultades; no esperes a que se te caiga el avión para darte cuenta de todo lo que tienes’.

A su vez, quiero decirles que no hay que cansarse en la vida de ser bueno. Nunca te canses de ser bueno”, concluyó.

 

 

Aquí podrás acceder a noticias en tiempo real

Conoce lo más viral en Facebook Trending 

Lee a los columnistas de Excélsior Opinión

 

clm

 

Te recomendamos

Tags

Comparte en Redes Sociales