Ryan Grantham, actor de Riverdale, condenado a cadena perpetua por asesinar a su madre

El ex actor de Riverdale y Diary of a Wimpy Kid, Ryan Grantham, ha sido condenado a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional durante 14 años por el asesinato de su madre en 2020.

El 21 de septiembre en Vancouver, la jueza de la Corte Suprema de Columbia Británica, Kathleen Ker, dictó el castigo por asesinato en segundo grado ya que la sentencia ya era una conclusión inevitable sobre las leyes de la provincia canadiense.

Grantham, nominado a los Premios Leo, se entregó a la policía poco después de dispararle a su madre Barbara Waite, de 64 años, en la nuca el 31 de marzo de 2020, en la casa de la familia en Squamish, al norte de Vancouver.

Un cargo de asesinato en segundo grado viene sin elegibilidad para libertad condicional de entre 10 y 25 años. 

Loss fiscales recomendaron en una audiencia de sentencia a principios de este año que Grantham no recibiera la libertad condicional hasta por 18 años. El equipo legal del ex actor había sugerido 12 años como una consecuencia justa.

Originalmente acusado de asesinato en primer grado, Grantham ha estado bajo custodia durante los últimos dos años y medio, según confirmaron a Deadline funcionarios, ya que se encontraba en un programa de salud mental desde su arresto, Grantham está en proceso de ser transferido a una instalación más permanente, dicen las fuentes.

Grantham interpretó a Jeffrey Augustine en la cuarta temporada de Riverdale en 2019. Aunque apareció brevemente, el personaje tuvo un papel fundamental en el programa basado en los cómics de Archie. 

Fue Jeffrey Augustine quien mató al difunto Luke Perry que interpretó a Fred Andrews en la serie en un atropello y fuga que cambió casi todo en el programa. Comenzando su carrera en 2007, Grantham también apareció en la película Diary of a Wimpy Kid de 2010, así como en Supernatural , iZombie y The Imaginarium of Doctor Parnassus.

Más tarde se reveló en la corte que después del asesinato de su madre, Grantham tomó un video del cuerpo y confesó el asesinato ante la cámara. 

Un día después, después de colocar cuidadosamente el cuerpo en una escena semirreligiosa, Grantham tenía intenciones siempre cambiantes, en un momento iba a intentar matar al primer ministro canadiense Justin Trudeau, como también escribió en un diario ingresado como evidencia. 

Grantham también consideró cometer un tiroteo masivo en la Universidad Simon Fraser de Vancouver o en el icónico puente Lions Gate.

Afortunadamente, nada de eso sucedió y, en cambio, Grantham fue a la oficina de policía de East Vancouver y confesó su crimen. 

“Maté a mi madre”, según los informes, declaró sin rodeos a la policía en la recepción de la estación.

En marzo de este año, el actor expresó su pesar por lo que había hecho. “Frente a algo tan horrible, pedir perdón parece tan inútil”, dijo Grantham al tribunal de Vancouver y al juez Ker, leyendo una hoja de papel. “Pero desde cada fibra de mi ser, lo siento”.

bgpa