Johnny Depp inaugura edición 76 del Festival de Cannes

El actor se dejó querer  por el público que lo acompañó en la presentación de la cinta francesa Jeanne du Barry

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Actor Johnny Depp

CANNES.- Si Johnny Depp ya era un devoto de Francia y su cultura, ahora tiene una deuda pendiente con ellos. Y es que tras la proyección de Jeanne du Barry en la gala inaugural de la edición 76 del Festival de Cannes se confirmó que la elección de la cinta respondió a todo tipo de intereses menos a los méritos artísticos de la propia película dirigida y protagonizada por la realizadora  Maiwenn.

Y es que el actor originario de California mantiene una profunda relación con la república gala, no solamente porque estuvo casado con la actriz Vanessa Paradise, sino porque tiene una hija nacida en París (Lily Rose Depp) y hasta un par de propiedades en la región de la Costa Azul.

Por eso no extraña (aunque sí llama la atención) su inclusión en la producción francesa, en la que con un perfecto dominio del idioma interpreta al rey Luis XV en los años en los que sucumbió a los encantos de la cortesana Jeanne du Barry, una mujer que tras nacer en los estratos más bajos de la sociedad, llegó a vivir en el  Palacio de Versalles por solicitud exporfesa del monarca que marcaría un antes y un después en el siglo XVIII.

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Los teorías más conspiratorias apuntan a que el certamen galo programó la cinta en su noche de inauguración para darle a Depp el espaldarazo definitivo para salir de una de las crisis personales y profesionales más profundas de su carrera, en la que se había alejado del cine para defenderse en los tribunales de las acusaciones por difamación y violencia doméstica en contra de su exesposa, la también actriz Amber Head.

La presencia de Depp se dio en medio de la poelémica por estas acusaciones de violencia. 

Al poner la alfombra roja a hombres y mujeres que agreden, el festival envía el mensaje de que en nuestro país podemos continuar ejerciendo violencia con total impunidad”, dijo un colectivo de 123 trabajadores del cine francés en un manifiesto.

Pero eso es algo que muy poco importa para sus fanáticos que la tarde de ayer esperaron durante horas en La Croisette para conocer a la estrella de películas como El joven manos de tijera, La leyenda del jinete sin cabeza o Los piratas del Caribe, quien dedicó varios minutos para firmar autógrafos y tomarse selfies con sus fans que no daban crédito de tener a una de las más grandes estrellas de Hollywood a unos centímetros.

Johnny, Johnny, Johnny”, gritaba la multitud enardecida reunida en La Croisette, la misma que atestiguó cómo se despojó de sus lentes de sol morados para, ya sobre la alfombra roja, posar con su esmoquin, camisa blanca y cola de caballo, al lado de sus compañeros de reparto, con quienes se tomó de la mano para dejarse retratar por cientos de fotógrafos vestidos de gala para la ocasión.

Encumbrado como la estrella del cine, John Christopher Depp II (su nombre real), subió los 24 escalones del Palacio del Cine que lo condujeron al Teatro Lumière.

-Con inf. de AFP

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