Alberto Blanco y un testimonio personal del rock

Tras dedicar su vida a la poesía, “esa otra forma de usar el lenguaje”, y haber publicado 36 poemarios en México, y 18 más en otros países e idiomas, el escritor, músico y artista visual Alberto Blanco (1951) entrega ahora un ensayo narrativo sobre el género musical que lo acompañó durante su adolescencia y marcó su vida: el rock.

Lo escribí como un ejercicio gustoso, memorioso. Como un testimonio muy personal de lo que significó y significa el rock. También como una manera de compartir esa experiencia”, comenta en entrevista con Excélsior.

TE RECOMENDAMOS: Poeta Alberto Blanco recibe Premio Xavier Villaurrutia

No lo hice con la intención de revalorar una época ni con un afán didáctico de decirles a los jóvenes: ‘Escuchen esta música, vale la pena’. Simplemente me nació hacerlo. Y está escrito con un ánimo muy hospitalario y con sentido del humor”, aclara.

En 1966. El año del nacimiento del rock (Reservoir Books), que aborda en siete capítulos, uno por año, lo que sucedió en este ámbito de 1963 a 1969, el ensayista reflexiona sobre el espíritu de una época y las ideas que propiciaron una de las revoluciones culturales más importantes del siglo XX.

Al ritmo de los Beatles y los Rolling Stones, de Bob Dylan y Frank Zappa, resuenan los ecos de la psicodelia, el peace and love y las luchas por los derechos civiles; pero también se sienten las heridas de los abusos de las drogas, la violencia autodestructiva, la corrupción de la industria de la música y el conformismo social. Así que ésta no es nada más una historia de la música, sino un recordatorio de la capacidad que ésta tiene para transformar la consciencia”, apuntan los editores.

TÍTULO: 1966. El año

del nacimiento del rock

AUTOR: Alberto Blanco

ILUSTRACIONES: Luis Fernando Enríquez

GÉNERO: Ensayo narrativo

EDITORIAL: Reservoir

Books, México,

2024; 280 pp.

UN POETA MEXICANO QUE ESCUCHÓ AL ROCK MUY DE CERCA

Blanco explica que la confección del ensayo comenzó como un ejercicio común entre los aficionados al rock. “Eso he sido toda mi vida. Pensé como oyente, como músico, compositor, pianista. Este libro está escrito por un poeta mexicano que vio y vivió todo este fenómeno de lejos, pero lo escuchó muy de cerca”.

Dice que empezó a preguntarse cuál fue el gran año del rock. “Primero pensé que 1969 había sido el tiempo dorado; luego que 1968, y después que 1967. Pero, ya estando ahí, me di cuenta que en 1966 fue cuando cambió todo. A partir de este año se dio una exposición de creatividad inédita en la música popular”, destaca.

El traductor señala que “antes de 1966 ni siquiera se usaba el término ‘rock’. Existía el rock and roll, pero éste terminó en los años 50 con la entrada de Elvis Presley al Ejército estadunidense. A principios de los 60, el rock and roll ya era historia.

Los primeros años de la década de los 60 no tienen nada de rock. La música era muy fresa. Y en ese contexto aparecen los Beatles, a finales de 1962, con un sonido fresco y distinto. Y componían sus propias canciones, lo que nadie hacía”, agrega.

Quien estudió Química y Filosofía añade que “a este movimiento lo caracterizaron muchas cosas, no sólo la subversión. Lo más valioso fueron la música y las letras. Las letras de los mejores letristas del rock fueron importantes, como las de Dylan y John Lennon. Pasaron a formar parte de la familia de los poetas que para muchos fueron fundamentales”.

Al ver este fenómeno a la distancia, el maestro en Estudios Orientales admite que “ha cambiado absolutamente todo. 1966 sucedió hace 58 años. Ya no volverá a ser igual. El rock estuvo en el centro de la escena y fue la punta de lanza para la transformación de una generación. Eso ya no volvió a suceder, ni sucederá. La tecnología, como el internet, ha modificado todo”.

El Premio Xavier Villaurrutia 2017, por El canto y el vuelo, está convencido de que los jóvenes escuchan lo que quieren y lo que necesitan, aunque a muchos les sigue gustando el rock.

Hoy en día tienen acceso a todo. Es común que escuchen muchos géneros musicales. La oferta de Spotify llega a unos 80 millones de canciones. Hoy no es nada inusual pasar de un reggaetón al rock, al jazz o a la música clásica. Y está bien”, concluye.

El autor que acaba de publicar en España el poemario Canto desierto (Hiperión), “que considero lo mejor y más intenso que he hecho nunca, me llevó 30 años escribirlo”, piensa que el reto de todo trabajo es redondearlo.

Una vez que está redondo, rueda, nadie puede evitarlo. Eso espero de mis libros”, dice.

CONSULTA AQUÍ LAS NOTICIAS DE ÚLTIMA HORA

*mcam