Un hombre mexicano que vive para el golf 

Andrés Jurado cierra los ojos y recuerda con cariño uno de los primeros acercamientos que tuvo al golf. Cuando era niño, un señor de origen checoslovaco que trabajaba como encargado de alimentos y bebidas en el hotel donde su madre era gerente, decidió cortar sus propios palos para hacerlos a su medida.

Aquel gesto artesanal fue la puerta de entrada a un deporte que ya formaba parte de su entorno. El actual presidente de la Federación Mexicana de Golf (FMG) creció a un costado de los fairways y las trampas, dentro de una familia desarrolladora responsable de proyectos como la Hacienda de Cocoyoc y el Club Campestre Lomas de Cocoyoc, bajo la herencia de su abuelo, Paulino Rivera Torres.

Con esos palos improvisados y el green como patio de juegos, comenzó una historia que hoy lo tiene al frente de la FMG.

Tengo la fortuna de haber crecido en un campo de golf. Llevo trabajando para el club 22 años, empecé a participar en las reuniones mensuales que se tenían en la Asociación de Golf del Sur (AGS) como representantes de los dos clubes que tenemos en Morelos, la Hacienda de Cocoyoc y Lomas de Cocoyoc. Después de algunos años tuve la fortuna y el honor de ser nombrado presidente de la AGS y empezar a participar dentro de las juntas del Consejo de la Federación Mexicana de Golf”, señaló Jurado en entrevista para Excélsior. 

A sus 47 años, tiene la responsabilidad de liderar una federación sólida. En épocas de agradecer y compartir, Andrés Jurado externa sus deseos para el 2026, en donde la FMG celebra 100 años de su fundación y que con esfuerzo, buscarán seguir impulsando el talento de nuestro país con proyectos que cambiarán el rumbo del golf en México.

"Llegó en el momento justo. Es una responsabilidad que requiere de mucha energía, tiempo y conocimientos. Muchas veces se ha cuestionado el tema de mi edad, hoy la edad en ese sentido no es un referente, depende de la capacidad que tengas para asumir una responsabilidad. Todos los consejeros a lo largo de la federación hemos desempeñado estos cargos de manera voluntaria, no hay ninguna remuneración, estoy convencido que todos lo hemos desarrollado por cariño y amor al golf. Las instituciones las hacen las personas, es muy importante reconocer que dentro de la FMG siempre ha habido buenas personas”, mencionó.

Estamos por cumplir 100 años, más que festejar, queremos reconocer la trayectoria de la institución, la trayectoria de las personas que la construyeron. A mí me toca liderar el festejo, pero yo he participado muy poquito tiempo si lo tomamos en proporción de todas las personas que llevan al servicio de la Federación”.

Ese ADN de liderazgo ha marcado su carrera profesional. Pocos saben que también es un amante de los negocios, junto a su esposa y su hermana, hace unos años encontró un nicho en la cultura del té. Fundaron la Escuela Mexicana de Té y con ello, TIANTÉ, un emprendimiento que buscaba difundir la cultura del té en el estado de Morelos, pero que actualmente es una referencia de conocedores y fanáticos en México y el mundo.

Tengo la fortuna de venir de una familia de empresarios, de desarrolladores. A pesar de qué estudié derecho y no sabía mucho de alimentos y bebidas, encontré un nicho y fui creciendo con el tiempo”.

TRANSFORMAR IDEAS

Andrés Jurado reconoce que históricamente el golf en México ha sido percibido como un deporte poco accesible. Sin embargo, explica que a través de la Escuela Nacional Pública de Golf se busca cambiar esa narrativa, generando un primer acercamiento con niñas y niños de contextos económicos menos favorables, como un paso fundamental para democratizar el golf y ampliar su base social en el país.

“Para poder transformar una situación, hay que ubicar y reconocer dónde estás  parado, claro que el golf desafortunadamente en México es un deporte, no diría elitista pero no es accesible para todo el mundo. A través de la Escuela Nacional Pública de Golf, hemos generado el primer contacto con niños y niñas que tienen posibilidades económicas no tan favorables, es el principio de poder transformar ese criterio dentro del país, es un trabajo que va a requerir de todo un periodo de tiempo más largo para poder llegar al punto final”, señaló Andrés Jurado.

EL GOLF EN MÉXICO

El presidente de la Federación Mexicana de Golf se muestra optimista sobre el presente y futuro del golf nacional. Destaca el crecimiento desde las categorías infantiles y juveniles, el desarrollo de jugadores en el sistema colegial de Estados Unidos y la consolidación de golfistas en los circuitos profesionales.

Estamos en un momento increíble, tenemos desde la base a muy buenos jugadores infantiles y juveniles, jugadores que están en College y otros nombres que ya están en el máximo circuito. En el caso de las mujeres es muy injusto, siempre hay esa comparación con Lorena Ochoa, hay que entender que lo que hizo Lorena es algo muy especial en el deporte, pero que también hay grandes referentes que están empezando a tener esa posibilidad de dar el gran salto”

CAMPESTRE LOMAS DE COCOYOC

Jurado habló con emoción del Club Campestre Lomas de Cocoyoc, un campo con un significado muy personal en su vida. Más allá de su rol institucional y del cuidado por evitar cualquier conflicto de interés, comparte el profundo cariño que le tiene al lugar donde vivió algunos de los momentos más importantes de su historia personal, incluido el día en que le entregó el anillo de compromiso a su esposa en el hoyo 6.

“Justo no quiero que sucedan ese tipo de cosas, es un campo al que le tengo todo el cariño del mundo, pero va a tener que estar en la congeladora durante estos cuatro años para que no parezca que queremos beneficiar al campo. Es un lugar al que tengo mucho cariño, respeto, he pasado los momentos más felices de mi vida, aquí le di el anillo de compromiso a mi esposa”.