Coronavirus: Clientes responden con filas a reapertura de centros comerciales y tiendas departamentales

SALEN PARA AGLOMERARSE. Con filas, que en algunos casos provocaron la saturación de espacios (como en el Centro), la gente tuvo que esperar para entrar a realizar sus compras. Muchos iban acompañados, incluso, con menores de edad. Por su parte, los centros comerciales y tiendas departamentales sanitizaron los inmuebles antes de abrir y cumplieron con todos los protocolos. Fotos: Quetzalli González, David Solís y Cuartoscuro

CIUDAD DE MÉXICO.

La Ciudad de México sigue en semáforo naranja y desde ayer reabrieron 263 tiendas departamentales y 338 centros comerciales. Y no parece que les haya ido mal en el arranque, pues se registraron filas de espera enormes.

Desde muy temprano, y antes de que dieran las 11:00 horas, ya había largas filas que se dirigían al filtro sanitario, el único lugar por el que los compradores pueden pasar y donde se les toma la temperatura, se les da gel sanitizante, se revisa que utilicen correctamente el cubrebocas y se cuentan para evitar que se supere 30 por ciento de la capacidad.

Ay, la verdad que (estoy) muy emocionada, me emocioné ¿Quién iba a pensar que la reapertura de, bueno, de las tiendas iba a causar eso?”, dijo Tania Riquemes, cliente de una tienda departamental.

Más de 100 días después, los grandes almacenes y centros comerciales recibieron a sus clientes consentidos. Algunos les tendieron una alfombra de gala y los recibieron con aplausos y otros, como Galerías Coapa, les abrieron el estacionamiento habilitado como puerta de ingreso para evitar aglomeraciones.

En un recorrido que realizó Excélsior, registró que en Parque Las Antenas, en Iztapalapa, más de 100 personas hacían fila de manera ordenada, aunque sin respetar la sana distancia; tardaron más de 30 minutos en entrar. Tres horas después de la apertura la fila continuaba.

En Plaza Oasis, en Coyoacán, antes del inicio de actividades, el personal de seguridad desinfectó el área de entrada y salida.

Las necesidades de los primeros clientes fueron diversas: pago de créditos, devolución de compras o artículos que ayudan a aguantar el encierro.

Vine a comprar un rompecabezas para poder seguir pasando el tiempo encerrado. Ya lo estaba esperando”, dijo Roberto Villasana.

Raquel Chávez, otra clienta, dijo que desde abril no tenía licuadora. “En molcajete funciona muy bien” puntualizó.

Como parte de las medidas de higiene el cliente no puede probarse la ropa, aun así hubo quien se animó a comprar.

La compré (la ropa) a cálculo, viendo a ver si me queda. Si no me la cambian, me dijeron”, comentó David Hernández, otro cliente.

Hubo una plaza que rebasó las expectativas de clientes: Parque Delta, pues durante el día se registraron filas de hasta 800 personas que recorrían toda la cuadra de la plaza en Obrero Mundial, desde avenida Cuauhtémoc hasta Xochicalco.

En Twitter, el usuario Alberto. (@armanrockr) compartió que sólo fue a comprar una bufanda de la marca Leonardo. “5hrs formado pero al fin pude comprar mi bufanda en Parque Delta”, comentó, causando inconformidad en muchos usuarios, quienes lo criticaron por salir a comprar algo que no es esencial cuando los contagios activos de covid-19, hasta ayer, eran cuatro mil 122, y hubo 112 defunciones más para acumular 7,303, de acuerdo con el gobierno capitalino.

En el Centro Histórico el panorama fue similar. En la Plaza de la Tecnología, alrededor de 500 personas tuvieron que hacer fila para entrar por el pequeño filtro sanitario. A diferencia de Parque Delta, donde hay mucho espacio para que la fila pudiera ser amplia, ahí la gente se aglomeró en la calle y la fila dio varias vueltas sobre la acera.

Al igual que otros días, muchas personas no traían cubrebocas o lo utilizaban mal.