Comisión Nacional de Lucha Libre
La lucha libre es un deporte que ha evolucionado con el paso del tiempo, constituyéndose actualmente como un legado cultural de nuestro país, una tradición que otorga a México un símbolo de identidad, espectáculo y tradición, que incluso el Gobierno de la Ciudad de ...
La lucha libre es un deporte que ha evolucionado con el paso del tiempo, constituyéndose actualmente como un legado cultural de nuestro país, una tradición que otorga a México un símbolo de identidad, espectáculo y tradición, que incluso el Gobierno de la Ciudad de México la declaró Patrimonio Cultural Intangible.
En este sentido, y para abonar a esta actividad deportiva y a los cimientos que permitan su pleno ejercicio, buscando abatir los rezagos existentes, es necesario considerar la operación de una Comisión Nacional de Lucha Libre, lo anterior con fundamento en la Ley General de Cultura Física y Deporte, artículo 87, que a la letra dice: “La Conade coordinará y promoverá la constitución de comisiones nacionales de deporte profesional, quienes se integrarán al Sinade de acuerdo con lo establecido en el reglamento de esta ley”. La instancia en comento tendría entre sus propósitos: agrupar y tutelar las comisiones locales existentes en el país, generar cohesión en el marco del Sistema Nacional de Cultura Física y Deporte (Sinade) a partir de los proyectos propios del Estado mexicano y otorgar medidas de prevención en materia de salud a través de instituciones públicas y privadas al gremio objetivo. Aunado a lo señalado, la propuesta parte del hecho de considerar que en nuestro país se precisa la existencia y formalización de un órgano rector que, además de unificar a todas y todos quienes participan en la lucha libre, favorezca el acceso a derechos humanos fundamentales como la seguridad social, al ser un deporte de contacto con riesgo latente de perder la vida, razón por la que las empresas aseguradoras no ofertan seguros de gastos médicos mayores que den cobertura a estos profesionales, de tal suerte, que la existencia de esta comisión daría a los luchadores certeza jurídica y seguridad social para poder desempeñar su actividad de manera profesional y segura, incluida evidentemente en este rubro.
Así, entonces, en el marco de lo señalado en el artículo 64 de la ley de mérito: “la Conade, para promover la constitución de comisiones nacionales de deporte profesional, en consulta con el Sinade, determinará las disciplinas deportivas en las que requiera su existencia y expedirá los lineamientos de coordinación que proceda”. Hay que señalar que la lucha libre se ubica como el quinto deporte más popular en México, sólo superado por el futbol, boxeo, basquetbol y beisbol, considerando que existen alrededor de ocho mil luchadores de ambos sexos, quienes son verdaderos atletas; la importancia de la lucha libre estriba de acuerdo con un estudio de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, en que durante más de 80 años ha tenido éxito debido a que presenta historias de personajes que entrenan, se superan y llegan a lugares insospechados, el análisis revela que la gente se identifica con estos personajes porque son héroes de carne y hueso, luchan contra lo desconocido y poseen esta idiosincrasia nacional de la superación.
Se trata de un tema muy arraigado en la cultura del mexicano, su importancia en nuestro país es fundamental, puesto que se trata de un símbolo de identidad que emociona con sus elementos distintivos como la máscara del luchador, sus funciones en el ring y la arena en donde se hace toda la parafernalia; de igual suerte, este ejemplo que hoy compartimos en esencia forma parte de lo que debe de acontecer para contar con una Comisión de Box de carácter profesional, ya lo abordaremos en una próxima entrega atendiendo a la imperiosa necesidad de que uno de los deportes también más trascendental cuente legalmente con una directriz nacional en beneficio de las boxeadoras y boxeadores, entrenadores, promotores y equipos multidisciplinarios que participan en el desarrollo y promoción del deporte de los puños, que han dado históricamente a México 14 preseas olímpicas.
