NUEVO LEÓN
El semáforo delictivo reveló que durante el mes de marzo de este año aumentaron los casos de violación y violencia familiar en la mayoría de los municipios de la zona metropolitana de Monterrey.
El incremento en este tipo de delitos coincide con el primer caso de Covid-19 en Nuevo León confirmado el 11 de marzo y con el arranque de la campaña nacional de confinamiento domiciliario para evitar contagios exponenciales.
La mayoría de las víctimas de este tipo de delitos son mujeres de todas las edades, desde adultas, adolescentes y niñas, de acuerdo a Información de la Fiscalía General de Justicia del Estado.
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En el caso de violencia familiar, el semáforo indicó el color rojo en los municipios de Apodaca, Cadereyta, Escobedo, García, Guadalupe, Monterrey, San Pedro, Santa Catarina y Santiago.
Lo anterior representa un aumento respecto al promedio histórico de la Fiscalía de Justicia.
Los municipios de Juárez y San Nicolás tuvieron color amarillo, es decir una reducción menor al 25 por ciento de casos respecto al promedio histórico.
En lo que respecta al delito de violación, solamente el municipio de San Pedro tuvo una reducción de más del 25 por ciento en el número de casos, mientras que el resto de los municipios de la zona metropolitana se mantuvieron en rojo.
Irma Alma Ochoa, presidenta de Arthemisas por la Equidad, señaló que en la mayoría de las denuncias presentadas por las víctimas revela que en el hogar donde habitaban era un espacio violento y de desigualdad.
"Por desgracia para muchas mujeres, niñas y adolescentes, el domicilio familiar no es el espacio de protección, de seguridad y de respeto que se requiere para el sano desarrollo debido a estos temibles momentos de pandemia la violencia se ha incrementado exponencialmente", indicó la activista.
Programas de apoyo de autoridades no es suficiente
Si bien las autoridades municipales y del Gobierno Estatal han aumentado los servicios de atención, el problema de violencia de género es tan grave, que los programas no son suficientes, advirtió Ochoa.
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Indicó que, al ser un problema mayúsculo, no hay recursos humanos e infraestructura suficiente para atender a todas las víctimas por lo que es necesario reorientar los esfuerzos a la prevención del delito.
"Debemos orientar nuestros esfuerzos en prevenir; creo que el gran desafío para el Estado y la sociedad, es la prevención", indicó.
Busquen ayuda
Por último, la activista exhortó a las mujeres víctimas de cualquier tipo de violencia a denunciar estos actos ante las autoridades y buscar ayuda en los organismos gubernamentales y ciudadanos.
Además, pidió a las víctimas acudir a la Fiscalía Especializada en Delitos contra las Mujeres para exponer su caso.
"A las mujeres les diría que sepan que no están solas, y les recordaría que hay instituciones y organizaciones sociales creadas para protegerlas y apoyarlas", concluyó.
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