La Noche de Rábanos reúne a miles en Oaxaca y preserva una tradición de 1897
Miles de personas celebraron la Noche de Rábanos en Oaxaca, tradición decembrina con arte efímero, historia y fuerte impacto cultural y turístico.
En la víspera de la Nochebuena se cumplió la cita de la celebración más emblemática de la capital oaxaqueña. Miles de personas —locales y visitantes— se concentraron alrededor del Jardín de la Constitución para sorprenderse con las obras artísticas presentadas en la Noche de Rábanos, un evento representativo previo a la Navidad.
Alrededor del mediodía, mujeres y hombres inscritos en la edición 128 alistaron las figuras elaboradas con rábanos de distintos tamaños, para que a lo largo del día los paseantes acudieran a la muestra colectiva, que dura sólo unas cuantas horas debido a las características del tubérculo y a su rápido proceso de oxidación.
Inspiración artística y tradiciones oaxaqueñas
La mayoría de las creaciones están inspiradas en motivos navideños, como el nacimiento y la llegada de los Reyes Magos, así como en tradiciones oaxaqueñas, entre ellas la festividad de la Virgen de la Soledad y el Día de Muertos, además de bailes, trajes típicos y pasajes de la historia de la ciudad. Por la noche, el gobierno estatal entregó reconocimientos y estímulos económicos a los trabajos más destacados.
En esta ocasión, la exposición también incluyó estampas representativas de las costumbres y tradiciones oaxaqueñas elaboradas por personas privadas de la libertad (PPL), alumnos del Taller Gráfica Siqueiros del Centro Penitenciario de la Villa de Etla.
Asimismo, internos del Centro Penitenciario Varonil de Tanivet participaron con la obra “Sueños, tierra y libertad”, una propuesta que simboliza aspiraciones, pertenencia y el valor de la independencia desde una mirada artística.
Orígenes históricos de la Noche de Rábanos
La primera Noche de Rábanos se realizó en 1897 en la Plaza del Marqués o Plaza de Armas, hoy Jardín de la Constitución. Desde entonces, esta costumbre se celebra cada año como parte esencial de las festividades decembrinas de Oaxaca.
Hace unos 30 años, el gobierno del estado y el Ayuntamiento de Oaxaca de Juárez coordinan la entrega de 15 toneladas de rábanos de distintos tamaños a los participantes de las categorías infantil y adultos.
De acuerdo con registros históricos del Ayuntamiento de Oaxaca de Juárez y crónicas retomadas por Excélsior, la Noche de Rábanos fue instaurada de manera oficial el 23 de diciembre de 1897 como una estrategia para impulsar la venta de productos hortícolas locales, particularmente del rábano cultivado en los Valles Centrales, tras una sobreproducción registrada a finales del siglo XIX.
Impacto cultural y económico actual
Actualmente, el certamen contempla varias categorías:
- Rábanos tradicionales
- Rábanos libres
- Flor inmortal
- Totomoxtle
El evento reparte una bolsa económica que en años recientes ha superado el millón de pesos en premios y estímulos, con el objetivo de preservar esta manifestación cultural, considerada Patrimonio Cultural Inmaterial del estado de Oaxaca.
Además, datos de la Secretaría de Turismo de Oaxaca indican que el evento atrae anualmente a más de 100 mil asistentes y genera una derrama económica superior a los 30 millones de pesos durante la temporada decembrina.
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