Ellos son los últimos centinelas y guardianes de la vaquita marina

Con chasquidos intermitentes muy peculiares, a veces largos y en ocasiones cortos, se comunican y orientan bajo el agua, las ocho vaquitas marinas que luchan por su vida en el Alto Golfo de California.

A diferencia de las ballenas o los delfines que generan sonidos como cánticos, la vaquita marina emite chasquidos que detectan los hidrófonos de fabricación especial que colocamos en su hábitat”, explicó Daniel Arellano Millán, coordinador de Campo de Pesca Alternativa de Baja California (Pesca ABC).

La mayoría de los encuentros acústicos con el mamífero marino en mayor peligro del mundo se dan precisamente en la zona de cero tolerancia, en el último bastión de la especie de 12 x 24 kilómetros, donde no debería haber ni una sola red de pesca.

Dany, como le llaman sus amigos, es un joven originario de Guerrero Negro, Baja California Sur, que desde pequeño tuvo intereses por la flora y la fauna, y que cuando creció, por azares del destino se convirtió en uno de los últimos guardianes de la vaquita marina.