'El destino de Maduro debe ser la prisión': diputado venezolano Franco Casella

CIUDAD DE MÉXICO.

Hace un mes quedó marcada la gestión del presidente venezolano, Nicolás Maduro, ese país y el resto de América Latina. El pasado 23 de enero juramentó como presidente interino el diputado Juan Guaidó, con el apoyo de Estados Unidos y otros países.

La oposición logró agruparse y trazar una ruta para poner fin al chavismo, aseguró a Excélsior Franco Casella, diputado y dirigente del partido Voluntad Popular.

El mapa, afirmó, es el fin de la usurpación, un gobierno de transición y elecciones libres.

Hoy, paradójicamente, el destino de Nicolás Maduro se encuentra en sus manos”, declaró a través de WhatsApp, en cuya fotografía aparece junto a Guaidó.

A un mes de la proclamación de Guaidó, ¿en qué condiciones se encuentra la oposición?

La oposición venezolana se ha fortalecido en una ruta claramente conocida: el cese de la usurpación, que exista el gobierno de transición y elecciones libres y transparentes.

¿Cuál es el destino de Nicolás Maduro?

Enfrentar las consecuencias de sus hechos, generar un encuentro con la conciencia, donde quiera que la tenga escondida, que es la consecuencia al crimen de lesa humanidad, enfrentar a aquellos que perdieron a sus seres queridos, producto de la falta de medicinas, o aquellos niños que murieron por desnutrición.

Ojalá sea el destino de la justicia. Que el Estado de derecho permita juzgarlo, y que pueda defenderse y enfrentar una justicia imparcial, y no la forma en que ha atentado contra los presos políticos.

Ojalá sea en una prisión donde se le respeten sus derechos humanos, donde pueda estudiar, graduarse y terminar una carrera. Donde pueda leer libros, ver la luz del sol, cosa que él no les permite a nuestros presos políticos. Ojalá que su encuentro sea de cara con el Creador para arrepentirse.

¿Qué papel están jugando los militares?

El rol de los militares es obedecer a la Constitución y obedecer al poder constituido, que en este momento está encarnado en la figura de Guaidó.

¿Y la sociedad civil?

Empezar a trabajar en la reconstrucción y en la reconciliación. Con odio y con revanchismos no vamos a alcanzar el país que merecemos; tenemos que dar un paso hacia la dignidad, sin renunciar a la justicia.

¿Y México, que se ofreció a mediar entre ambas partes?

México tiene la oportunidad histórica de demostrar con hechos su compromiso con la defensa de los derechos humanos, con la democracia. Le toca al señor Presidente de México ponerse del lado del pueblo venezolano.

¿Qué hará la Asamblea Nacional?

Las próximas acciones van dirigidas a la reconstrucción nacional, a generar mayor presión para que los hombres y mujeres del uniforme acaten al poder constituido.

Reconocen dificultades

En Venezuela se vive una carrera contrarreloj para lograr el ingreso de la ayuda humanitaria enviada por Estados Unidos y rechazada por el presidente Nicolás Maduro, quien ordenó el jueves pasado cerrar la frontera con Brasil.

Williams Dávila, diputado de la Asamblea Nacional venezolana, alertó que la situación en su país “no es color rosa, la cosa está dura y va a ser difícil. Esto ya no se puede sostener”.

En entrevista con Pascal Beltrán del Río, para Imagen Radio, Dávila confió en el apoyo del pueblo venezolano al asegurar que “hay una convicción, una pasión y una firme determinación de que este régimen tiene que caer”, pues, dijo, “tiene que haber un cambio”.

Ante el temor de lo que pueda pasar hoy y pese a la postura de Nicolás Maduro, el diputado venezolano señaló que él y un grupo de legisladores ya se encuentran en la frontera alistando los preparativos para apoyar el ingreso de la ayuda internacional.

Nosotros vamos a llegar a los sitios donde va a pasar la ayuda humanitaria, no sé qué podrá pasar, pero vamos a estar ahí, vamos a pasarla con ayuda del pueblo y ahí es donde nosotros estamos apelando a que las fuerzas armadas tomen una determinación: o ayudan al pueblo o nos echan plomo”, remarcó.

Williams Dávila precisó que se encuentran del lado venezolano y no están pasando hacia la ciudad colombiana de Cúcuta, ante la sospecha de que el gobierno de Maduro cierre la frontera “y nosotros nos quedemos fuera”.

-De la Redacción