Benito Santos, niño creativo, hombre libre

De niño, Benito Santos deseó tener una muñeca Barbie entre sus manos, pero el contexto social de hace más de 40 años y a que “crecí en un pueblo muy pequeño de Jalisco (Tepehuaje de Morelos)” no se pudo.

Ahora, “es una maravilla que algo que deseas tanto y no puedes tener, en algún momento de tu vida llega este gran regalo, donde no sólo es tener una muñeca, sino que es una muñeca vestida por mí, un maquillaje que yo diseñé, el pelo y que, además, le estamos diciendo al mundo que hay una muñeca con tradiciones mexicanas, de colección y es la muñeca más famosa del mundo”.

Santos habla de la nueva edición, ya a la venta, de Barbie Día de Muertos, vestida y diseñada por él mismo para Mattel. El proceso, que ha sido una catarsis para el mexicano, ha llegado a mover fibras muy sensibles en mucha gente y en él mismo.

En entrevista con Excélsior, Santos cuenta que crear las ilustraciones para los diseños de la muñeca (vestido, maquillaje, color de piel y pelo) le llevó mes y medio o dos. Su inspiración vino de su gusto por lo mexicano, del mariachi, de los ballets folclóricos nacionales (a los que le gusta asistir) y de sus abuelas y tías en rebozo.

Tiene, comenta, “muy consciente todo el folclor que ha estado a mi alrededor y creo que Benito Santos está siendo más orgulloso que nunca, orgulloso de sus raíces y estoy tratando de llevar esa cultura a diseño contemporáneo, que fuera del gusto de todo mundo. Soy un hombre muy nacionalista y de ahí sale toda esa inspiración”, dice.

A la marca le presentó tres diseños: uno en vestido blanco con flores rojas, otro basado en las escaramuzas y el último de mucho vuelo con olanes. Vino la retroalimentación y le dijeron que el primero se vería mejor con vestido negro y flores rojas; él aceptó gustoso.

El jalisciense, quien se convierte en el primer mexicano en diseñar para Barbie, ya había tenido un acercamiento con la marca entre 2018 y 2019, cuando lo invitaron a hacer una colección “y presenté mi colección como un homenaje a la muñeca. Después llegó la invitación de Mattel América y Mattel México. Ellos tienen un equipo de diseñadores increíbles expertos y recibí la invitación para hacer el diseño.”

Ha sido algo de mucha motivación, pues no me lo creía. Ha sido un proyecto desde hace dos años, un proceso de estar trabajando en ideas que venían... Se dieron las cosas y fue maravilloso lo que ha sucedido”, subraya.

MOMENTOS ICÓNICOS

En su carrera, el modisto considera que ha tenido varios momentos importantes, pero hay tres que podría destacar.

El primero fue cuando Ximena Navarrete se convirtió en Miss Universo 2010 con aquel impactante vestido rojo diseñado por él. El acto lo colocó en el ojo internacional.

El segundo vino al vestir a la exprimera dama de México, Angélica Rivera, cuando fue esposa del expresidente Enrique Peña Nieto. “Imagínate, el dar entrevistas a otros países, cuando se hablaba de los vestidos en visitas de Estado, se hablaba dentro y fuera de México.”

Y el tercero, desde luego, al vestir a Barbie. “Ha rebasado fronteras, hay gente que nos escribe a través de nuestras redes sociales, coleccionistas del mundo y que nos dicen que quieren algo mío.

Creo que Mattel va a seguir haciéndolo con diseñadores mexicanos y siempre he dicho que cuando se abre una oportunidad para alguno de nosotros, en la rama que sea, la gente voltea, y los mensajes han sido muy bonitos.

“Son muchos (momentos) los que me han tocado, pero éstos tres tienen una importancia grande. Como marca es muy importante lo que sucedió”.

LA DISCIPLINA Y LA PASIÓN

Benito Santos estudió medicina en la Universidad de Guadalajara. Le encanta, por eso lo hizo, comparte, pero sin duda había algo en él innato, que no se percató, pero los demás a su alrededor sí.

Su niñez y adolescencia estuvo marcada por los concursos de Miss Universo. Los veía, se fijaba en los vestidos y trataba de hacer los suyos propios.

Pero siempre fue muy aficionado a la ilustración. En la primaria, periódico mural que había, contaba con una ilustración suya.

El contacto con la moda fue desde muy niño, pero no era consciente”.

El mesabanco de la escuela, de madera, lo tenía todo rayado con zapatillas y flores. Lo mismo le sucedió a los libros de texto gratuitos. Ya en la Facultad de Medicina, también tenía todo con siluetas femeninas y moños.

A la medicina le debo la disciplina que tengo y eso lo trasladé a mi negocio. Cuando empiezo a estudiar moda cinco años después, fue por hobby. Empecé a sanar muchas cosas.

Lo curioso es que a través de las redes sociales y gente que me encuentro, que estuvieron conmigo en la secundaria o bachillerato, me dicen ‘es que siempre hiciste eso’. La gente del pueblo me decía ‘siempre hacías monas’ y esto era algo que ya se venía venir y yo no lo veía.

El niño creativo nunca desapareció, a lo mejor se pausó un poco. Nunca se fue, pero que lo haya tenido yo consciente, no. El otro día dije que era un hombre libre y es una responsabilidad que implica tener esta voz que, de llegar a mucha gente que me sigue y que esas cosas que hagas generen un cambio.”

¿Para quién diseña Benito Santos?, se le pregunta.

Benito Santos es un hombre protagonista, que le gusta que sus mujeres sean protagonistas y amo hacer (vestidos de) novias, porque ese día son las protagonistas. Amo hacer una celebridad, porque ese día en la alfombra roja tiene que ser la mejor.

A Benito le gusta empoderar a la mujer, visto a la mujer para empoderarla, para reconocerla, para honrarla, para decirle que tiene todo el potencial para hacer muchas cosas. Vivo con la mujer, rodeado de mujeres y para las mujeres”, concluye.

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