'No habrá una historia oficial': Pedro Salmerón

CIUDAD DE MÉXICO.

No haremos una historia oficial desde el Instituto Nacional de Estudios Históricos de las Revoluciones de México (INEHRM)”, promete el historiador Pedro Salmerón Sanginés, para quien la historia es la espina dorsal de la identidad y ya trabaja en dos planes para 2019: las celebraciones por el centenario luctuoso de Emiliano Zapata y un foro para dinamitar esa idea de que México fue un pueblo conquistado, sometido y sojuzgado.

Queremos hacer de la historia un mecanismo de construcción de cultura política y de cultura cívica. Ése es el gran objetivo del INEHRM, que la historia sirva para construir raíz y que esa raíz sirva para construir cultura política”, explica rodeado de pilas de libros a 18 días de haber sido nombrado director del INEHRM.

Salmerón adelanta que el 12 de enero de 2019, el presidente Andrés Manuel López Obrador dará a conocer el programa completo para honrar a Zapata. El anuncio, adelantó, será en Villa de Ayala y, aunque todavía no se define si el 2019 sólo estará dedicado a Zapata o también a las lenguas indígenas, el Caudillo del Sur será la figura central.

Hablar de Zapata implica abordar el programa agrario en México, la marginación agraria y, más allá del ángulo que yo le vaya a dar, desde el INEHRM no vamos a hacer una nueva historia oficial ni vamos a imponer criterios. Lo que haremos es abrir una buena cantidad de foros y darle voz a gente con distintas posiciones sobre el zapatismo”.

¿Incluirá a todas las voces? “Incluso a historiadores como Enrique Krauze, Héctor Aguilar Camín, Jean Meyer, si aceptan, y a Javier Garciadiego, mi maestro, quien formará parte del consejo de este instituto; queremos darle cabida a todas las voces”.

¿Los foros se realizarán en la Ciudad de México? “Habrá cinco foros a nivel nacional, pero en distintas partes de México, no sé, en Cuernavaca, Puebla, Tlaltizapán y aquí, en el Castillo de Chapultepec de la Ciudad de México”.

¿Hay algún símbolo en eso? “¡El poder! El poder de aquella época, además es el Museo Nacional de Historia”.

¿Le preocupa reivindicar hechos de la historia reciente que hayan quedado al margen en el pasado? “Sí, como la Matanza de Acteal, el (nacimiento del) Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), del que se hablará en alguno de los foros, entre otros”.

¿Qué opina sobre la Estela de Luz? “No voy a opinar sobre eso... porque no es algo que me toca. Eso ya fue. No voy a opinar. Ya fue”.

¿Cómo será la relación entre el INEHRM y la Coordinación Nacional de Memoria Histórica y Cultural de México que encabeza Beatriz Gutiérrez Müller? “Tendremos una colaboración importante, junto con la Secretaría de Cultura federal, donde se trabajarán tres puntos: el rescate de la memoria histórica, el Plan Nacional de Lectura y un debate sobre la historia”.

ESQUIVAN PALABRA “CONQUISTA”

Salmerón también prepara el congreso Quinto Centenario de la Irrupción Española y la Guerra Mesoamericana, una de las celebraciones que evitará usar el término conquista o sometimiento.

Batallamos mucho con el nombre indicado, porque queríamos quitar la palabra conquista, cualquier referencia a sometimiento y a enfrentamiento, no reducir eso al enfrentamiento entre Cortés, Moctezuma y Cuauhtémoc, a esa personalización de la historia que se ha limitado a españoles y mexicas”, sostiene.

Porque en realidad fue una guerra entre dos facciones de hablantes del náhuatl que cuando llegaron los españoles se aprovecharon de algunas cosas, detalla. “Sin embargo, tampoco queríamos edulcorar (la historia), no queríamos omitir que fue un acto violentísimo y que los españoles llegaron con un afán de dominación y lucro; bajo ninguna circunstancia se puede omitir eso, pero sí hay que dinamitar esa idea de que México es un pueblo sometido o juzgado”.

Paralelamente, el INEHRM festejará la cultura mexicana y, a lo largo de 2019, dedicarán especial atención a los centenarios del fallecimiento de Amado Nervo y del nacimiento de Pedro Ramírez Vázquez, entre otros más dedicados a la arquitectura y la poesía, que tendrán un lugar destacado, por ejemplo, lecturas de poesía de poetas como Manuel Acuña y Manuel Gutiérrez Nájera.

¿Cuál será la búsqueda desde el INEHRM? “Bueno, el neoliberalismo quiso matar a la historia en el sentido de que se pensara que todos crecimos sin raíces y que tú podías prosperar si le echabas ganas. Yo le llamo a eso el ‘echeleganismo fase superior de la mercancía ideológica neoliberal’. Eso ya se acabó”.

¿El neoliberalismo se olvidó de la historia? “Quiso matar la historia, quiso destruirla y decir que todo es basura, que nada sirve. Pero nosotros somos conscientes de que la historia es la espina dorsal de la identidad”.

¿Para qué le sirve la historia a los de a pie?, se le inquiere al autor de Breve historia de la Revolución Mexicana, La cabeza de Villa, Los carrancistas y 1915. México en guerra, entre otros más.

La historia, si la conoces bien, te sirve como una especie de sicología colectiva, en donde el analista te pregunta sobre tu pasado y la percepción de tu pasado te ayuda a entender dónde se originó ese nudo y cómo se fue anudando cada vez peor, para luego ser ser capaces de desanudarlo. Lo mismo sucede en la historia”.

En este punto, añade, hay alguien a quien nadie podría acusar de marxista o izquierdista, me refiero al gran filósofo español José Ortega y Gasset quien decía: “Yo soy yo y mis circunstancias”, pero se nos olvida la segunda parte de la cita: “Yo soy yo y mis circunstancias y si no las cambio a ellas, no cambio yo”, y para cambiarlas hay que entenderlas”.

¿Ha habido presidentes austeros en la historia e México? “¡Desde luego! Benito Juárez y Lázaro Cárdenas. Lo que no ha habido en la historia moderna es algún estadista que sea un erudito conocedor de la historia, sin importar que sea de derecha o izquierda como Churchill o Lenin.

Pero si tú lees los textos de Juárez, Porfirio Díaz o Francisco I. Madero, Venustiano Carranza y Cárdenas eran profundos conocedores de la historia. En cambio, Enrique Peña Nieto o Vicente Fox eran absolutos ignorantes de la historia. ¡Miremos y comparemos! Pero me consta, personalmente, que Andrés Manuel López Obrador es un erudito conocedor y un apasionado de nuestra historia”.