Don Olegario Vázquez Raña dejó huella; el éxito siempre fue su blanco

Olegario Vázquez Raña apuntando con su rifle de aire en una competencia.

Don Olegario Vázquez Raña realizó todos los disparos con su rifle de aire a 10 metros sin saber que ya era el dueño de un récord del mundo... El 13 de octubre de 1975 su nombre alcanzó un sitio sin igual al convertirse en el primer mexicano en mejorar una marca del orbe, cuando fue el mejor en la final de los Juegos Panamericanos en la Ciudad de México, hazaña que lo acompañó con la presea dorada.

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El oro y el récord mundial con una marca de 393 puntos de 400 posibles fueron dos de los brillos de una trayectoria en la que don Olegario Vázquez Raña fue ascendiendo desde su juventud, cuando el tiro deportivo llegó a su vida por fortuna y que una vez que lo conoció lo hizo su pasión.

No sabía que había establecido un nuevo récord mundial. Estaba seguro de que mi puntuación era elevada, como para obtener una medalla, pero no una nueva marca”, dijo a Excélsior momentos después de su gran actuación en las justas panamericanas con 40 años de edad. “Cuando me di cuenta de que mi puntuación era elevada me puse algo nervioso, como lo pueden comprobar en mi última serie. Mis últimos cuatro disparos casi pegaron fuera del círculo del nueve”.

Ése fue el momento de mayor esplendor en el alto rendimiento de quien ya contaba con tres participaciones en Juegos Olímpicos —Tokio 1964, México 1968 y Múnich 1972— de las cuatro que acompañarían su vida como deportista después de competir en Montreal 1976, justas en las que tuvo su mejor resultado olímpico con el décimo sitio en el rifle a 50 metros.

thumb — Olegario Vázquez Raña recibiendo una medalla panamericana.

Don Olegario Vázquez Raña tomó por primera ocasión un rifle de competencia deportiva en la década de los 50 y la primera vez que se inscribió a una prueba local lo acompañaron las guirnaldas de la victoria. El joven que hizo del tiro su pasión no se limitó a ser un destacado deportista, pues combinó la precisión como tirador con arduos entrenamientos matutinos, en los que desde las cinco de la mañana ya estaba en pie con sesiones que duraban hasta las ocho, para seguir con otra de las facetas en las que el éxito lo acompañó como la de empresario. De convertirse en el mejor tirador de rifle de México siguió para asumir cargos directivos que aprovechó para impulsar su disciplina.

La última etapa de su vida deportiva la compaginó asumiendo el cargo de presidente de la Federación Mexicana de Tiro Deportivo, cargo que desempeñó 17 años (1975-1992) y que, tras dejarlo, fue reconocido como su presidente vitalicio.

Los éxitos que cosechó en las fosas de tiro deportivo, en las que se colgó 18 preseas en competencias que forman parte del ciclo olímpico (siete en Juegos Panamericanos y 11 en Juegos Centroamericanos y del Caribe), encontraron eco en su etapa como dirigente, pues en 1980 fue elegido para encabezar a la Federación Internacional de Tiro Deportivo (ISSF), responsabilidad que tuvo durante 38 años hasta 2018.

La relevancia de don Olegario Vázquez Raña al interior del Movimiento Olímpico también lo llevó a desempeñar relevantes cargos dentro del Comité Olímpico Internacional, del que era miembro como presidente de la ISSF, pero desde 1988 fue nombrado para cargos en Solidaridad Olímpica (1988-1998), en Nuevas Vías de Financiación (1994-1997), Miembro para la Elección de los Olímpicos de 2000 (1993), Marketing (1994) y miembro activo del COI.

En la última etapa de su vida, fue reconocido como miembro de honor del Comité Olímpico Internacional (COI), destacando por su amistad y cercanía con los presidentes del COI, Juan Antonio Samaranch, Jacques Rogge y Thomas Bach, con los últimos dos compartiendo instalaciones en justas olímpicas luego de que el belga Rogge fue competidor de vela y el alemán Bach esgrimista.

REVOLUCIÓN EN EL TIRO DEPORTIVO

Cuando las especialidades del tiro deportivo languidecían ante la falta de evolución en sus competencias, la figura de don Olegario Vázquez Raña marcó un antes y después desde la presidencia de la Federación Internacional de Tiro Deportivo (ISSF), reanimando el interés por su deporte ante una nueva realidad mundial.

Destacado como deportista, hizo que esa característica lo acompañara desempeñando sus cargos directivos. Asumió la rectoría de la ISSF en 1980 para comenzar una revolución desde adentro, después de darse cuenta de que para los aficionados perdía interés la prueba al no saber al instante los resultados que iban obteniendo los competidores tras sus disparos, ya fuera en pruebas de pistola o de rifle.

Así que promovió el sistema electrónico de calificación de blancos para que los resultados fueran inmediatos y no hasta que un juez verificara la tanda de disparos. Promovió que las finales de las pruebas tuvieran espacios televisivos durante las justas olímpicas y así darle un realce y promover el interés del público.

También hizo que el rifle de aire a 10 metros, la especialidad que tanto brillo le dio a él como deportista, formara parte de los programas olímpicos a partir de Los Ángeles 1984.

PIONERO DEL PREMIO NACIONAL DE DEPORTES

Con el récord del mundo de rifle de aire, acompañado por el oro de los Juegos Panamericanos de la Ciudad de México, y una exitosa trayectoria deportiva, el primero de los comités que se conformó para elegir a los ganadores del recién creado Premio Nacional de Deportes (PND) no tuvo complicaciones para elegir por unanimidad a don Olegario Vázquez Raña como el merecedor de tener tan alta distinción junto con el clavadista Carlos Girón.

El gobierno mexicano reglamentó la entrega del PND por primera ocasión en 1975, con unas reglas muy diferentes a las actuales: se buscaba premiar a las destacadas trayectorias de los deportistas mexicanos. No había más parámetros que ese y don Olegario Vázquez Raña cumplía con creces el hacerse acreedor del primero de los premios más relevantes que entrega el gobierno federal mexicano a sus deportistas.

Don Olegario Vázquez Raña forjó una trayectoria deportiva como el más destacado tirador en la historia de México. En 1975 ya había alcanzado sus más grandes brillos como especialista en rifle y el PND haría justicia a su trayectoria sin igual hasta el día de hoy, en el que su nombre figura como el del único especialista en tiro deportivo que ha sido reconocido por el gobierno.

La evolución del PND ahora contempla varias categorías, además de reconocer económicamente a los deportistas no profesionales, deportistas paralímpicos, a jueces y entrenadores. Ante la mayor diversidad de oportunidades para acceder a este galardón en estos días, el deporte nacional todavía está a la espera de su segundo tirador en obtener el premio y con ello unirse a don Olegario Vázquez Raña como otro de los reconocidos en pruebas de tiro deportivo.