Milagroso regreso con un Ave María; Green Bay vive

CIUDAD DE MÉXICO.

Los Empacadores lograron su cuarto mayor regreso en la historia gracias a un Ave María de Aaron Rodgers, quien sin tiempo en el reloj de juego y dos puntos abajo, mandó un pase de 61 yardas hacia la zona de anotación, que atrapó Richard Rodgers, y Green Bay le dio una dramática voltereta a los Leones, que vieron cómo se iban sus posibilidades de playoffs.

Detroit llegó a tener una ventaja de 20-0 en el tercer cuarto, pero con 14 puntos en el tercer periodo y 13 más en el último, los Empacadores evitaron una limpia en la serie ante los Leones, algo que no sucede desde 1991.

Cuando en el Ford Field todo era celebración porque la defensa había detenido el ataque de sus rivales y con el reloj de juego en ceros, Devin Taylor le pegó en la máscara al quarterback de Green Bay, lo que colocó a los Empacadores con la posibilidad de una jugada más y en su propia yarda 39.

Con esas 15 yardas extra, Rodgers, quien cumplió 32 años el miércoles, aprovechó su regalo y soltó todo el brazo con el tradicional pase Ave María a las diagonales.

Richard Rodgers se colocó por delante de receptores y profundos para quedarse con el envío, mientras las caras en Detroit eran de desconcierto y tristeza.

Los Leones aprovecharon un lento inicio de Green Bay y anotaron 17 puntos en el primer cuarto, 14 de ellos con 48 segundos de diferencia, gracias a una intercepción de Glover Quin que dejó a los Leones en la 17 de sus rivales, luego de que Matthew Stafford lograra el primero de dos pases de touchdown.

Matt Prater anotó su segundo gol de campo para el 20-0, pero Green Bay, lejos de bajar los brazos, comenzó con la dramática remontada.

Este es el mejor sentimiento en muchos años. Es un gran regalo de cumpleaños, tengo 32 pero me sigo sintiendo joven y este es el mejor partido que he jugado desde que ganamos el Super Bowl”, dijo Rodgers.