CIUDAD DE MÉXICO
Como bien sabes, muchas personas han aprovechado esta temporada para salir de vacaciones, sin embargo, a veces relajarse tanto puede llevar a olvidar las rutinas diarias.
Salir a divertirse a la playa, el bosque o una excursión puede provocar que en ocasiones releguemos los tres cepillados necesarios después de cada comida.
Lamentablemente, estos 'pequeños' olvidos pueden generar mal aliento y en el peor de los casos infecciones en las encías.
Aunque no lo creas, las enfermedades bucodentales suelen aumentar tras el periodo vacacional, ya que las personan suelen dejar en segundo plano su higiene.
Unos dientes sanos no sólo te darán un buen aspecto, sino que te permitirán sentirte bien, hablar y comer apropiadamente.
Con buena salud bucal, solo 30% de capitalinos
De acuerdo con especialistas, el cepillado antes de dormir es el más importante.
Durante la noche, los ácidos que dañan los dientes se forman más fácilmente, porque segregamos menos saliva y el hecho de tener la boca cerrada crea las condiciones favorables para que las bacterias proliferen", afirma el Dr. Malagón, experto en Ortodoncia y Ortopedia en su página.
Otro de los 'problemas' vacacionales es el agua de las albercas, ya que gracias al cloro -y otras sustancias químicas- se acumula el sarro y la placa dental con más frecuencia de lo habitual.
Las proteínas salivales se descomponen rápidamente en contacto con el pH del agua de la piscina y forman depósitos orgánicos en los dientes, de color marrón, conocidos como el sarro de los nadadores
Por esta razón, si quieres evitar malestares, es imprescindible mantener una higiene óptima.
El cepillado, los enguajes y el hilo dental te ayudarán a mantener el equilibrio de la flora y reducirán la proliferación de bacterias nocivas.
***MJPR***
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