Dani Flow y Vicente Fox
Fox se refirió como “dama de compañía” a la esposa del gobernador con licencia de Nuevo León. Lo hizo en las horas del Flow Fest y del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. Lo hace en el momento histórico en que dos mujeres buscan la Presidencia de la República.
Dani Flow tiene 27 años. Es un apasionado de las Chivas. También es un reguetonero de mucho éxito. “La presencia de la esencia de jugar con mexicano/ puro mexicano/ sin títulos robados”, es parte de una estrofa, en clara referencia al América, el rival clásico del Guadalajara. Dani Flow también tiene varios tatuajes, dos de ellos en los pómulos. Su canal de YouTube registra al momento 375 mil suscriptores, sus redes sociales cuentan con millones de seguidores, más los cerca de 14 mil escuchas mensuales de su Spotify. Irremediablemente, Dani Flow, un millonario precoz, pegó con tubo en el Coca-Cola Flow Fest del fin de semana pasado, en el Autódromo Hermanos Rodríguez.
Va un fragmento de una de las letras de sus canciones: “Da-da-dame chance de lamerte el hoyo dilatado/Ya sabes que te lo embarro de lado, trr/ Ya sabes que te cojo vestido de diputado/ Ya sabes que, al chile, me sobra varo”.
Quién sabe en qué momento la brújula lírica-musical nos llevó por estos lares. Como soy un profano en el asunto, fue mi compañero Jorge Santamaría, editor de Función, la sección de espectáculos de este diario, quien me dio a conocer a Dani Flow. Jorge cubrió el mencionado festival, y apuntó sobre el hecho de que ésas y demás letras por el estilo sean aceptadas y celebradas “sobre todo por las morras”.
Llama la atención, asimismo, que el Flow Fest se haya desarrollado en el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. Resulta sintomático que donde los expertos advierten agresión y misoginia, los directivos de una marca de refresco (impulsora principal de la Navidad) vea una espléndida oportunidad de negocio. Es una gran época para los teóricos del marketing.
Sin embargo, por demás está visto el fluir de las expresiones sobre los prejuicios. Hacia los años 80 del siglo pasado, las bandas de heavy metal fueron acusadas de “satánicas”. Pero no hay artistas ni intérpretes peligrosos. Los reparos, en todo caso, están en los fanáticos. Por ejemplo, con Vicente Fox basta y sobra. Se refirió como “dama de compañía” a la esposa del gobernador de Nuevo León. Lo hizo en las horas del Flow Fest y del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. Lo hace en el momento histórico en que dos mujeres buscan la Presidencia de la República, tiempo que coincide con el par de ternas integradas por mujeres que Andrés Manuel López Obrador envió al Senado para ocupar la vacante de ministra en la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Lo hace, para redondear el desastre, cuando, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo, durante el tercer trimestre del año, “la participación laboral femenina llegó a 46.4%, el nivel más alto que se tiene registro (2005)” (El Economista, 28/Nov/2023)
Todo tiene un impacto. La red X cerró la cuenta de Fox. No es que los del Frente Amplio por México defiendan la libertad de expresión, como pregonan, pero tampoco pueden negar como quisieran al expresidente, el hombre que dio a conocer a Xóchilt, precisamente.
CAJA NEGRA
Aunque Henry Kissinger hizo el infierno en la tierra, murió a los 100 años en la tranquilidad de su residencia de Connecticut. “Creo que todos podemos estar agradecidos y apreciar su servicio público”, dijo el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby. Que le pregunten sobre ello a los argentinos y a los chilenos que soportaron las botas al cuello de las dictaduras de Videla y Pinochet, respectivamente, dos criaturas que gozaron del amparo de Kissinger. O habría que procurar la opinión de los vietnamitas rociados con napalm. Le dieron el Nobel de la Paz a ese hombre hostil, patrocinador de guerras. “Mr. Kissinger, may your soul rot in hell”, un cenotafio que diga.
