Entre aguas negras y basura, así viven pobladores de Veracruz

En municipios como Poza Rica, Veracruz, el desastre que dejaron las inundaciones se recrudece con la falta de respuesta municipal

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En Poza Rica la gente busca en la basura algo que les pueda servirFoto: Especial

La renovación de las 212 administraciones municipales en Veracruz vuelve a exponer un patrón que se repite cada que termina un período: la suspensión temporal de servicios básicos y trámites, un vacío administrativo que impacta directamente en la vida cotidiana de miles de personas. 

Aunque las autoridades suelen justificarlo como parte del proceso de entrega–recepción, los efectos sociales son más profundos y revelan fallas en la gestión pública local.

En municipios como Poza Rica, el desastre que dejaron las inundaciones de octubre se recrudece con la falta de respuesta de la administración municipal a los drenajes colapsados que han dejado calles con aguas negras y malolientes, aunado a este fenómeno está el problema de la recolección de basura: por todos lados hay desechos regados y personas buscando entre éstos algo que les sirva.

No hay desazolve ni limpieza. Seguimos esperando a que los servicios se restablezcan, pero es más importante el cambio de administración, por lo que se ve”, reveló Angélica, una vecina afectada.

En Fortín, el alcalde saliente suspendió los servicios desde una semana antes y Naolinco lo hizo a partir del pasado 9 de diciembre, cuando desde el alcalde hasta los colaboradores y empleados ya no fueron a laborar y lo anunciaron en redes. 

Pero lo único que hizo el alcalde morenista Luis Montero fue bajar la cortina antes de que llegara el día de cobro de los trabajadores, porque no les pagó completo el aguinaldo y actualmente las instalaciones del palacio municipal están tomadas.

“Todo se suspendió, había quienes necesitaban sacar trámites y todo fue cerrado, ahora esperar al siguiente alcalde”, refirió Luis, un artesano zapatero.

En el municipio de Álamo los daños provocados por las lluvias y las inundaciones se agudizaron, desde antes de la Navidad la administración saliente de la alcaldesa Blanca Lilia Arrieta ya no presta servicios.

“Mal y de malas, así estamos. Las autoridades de aquí no ayudaron, no se vio que movieran nada. Qué tristeza, se paga mucho por este muladar”, expresó Avelina Pérez, quien tenía un puesto de comida que tuvo que retirar porque la calles de tan empolvadas por el lodo levantan polvo todo el tiempo y los alimentos se contaminan.

En Xalapa, el servicio regular que presta Limpia Pública se suspendió y se observa en las esquinas la basura regada, porque llegan los indigentes y en el afán de buscar entre los desechos, rompen y tiran.

Las autoridades municipales llegan el próximo 1 de enero y acaso hasta ese momento, en un día inhábil, algunos comiencen de nuevo a enderezar los servicios.

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Calle llena de basuraFoto: Especial

JCS