Persisten delitos en distintos municipios; crece el cobro de piso a comerciantes

CUAUTITLÁN IZCALLI.

Robo a transporte público, de carga,  extorsiones, feminicidios y homicidios dolosos es la constante en los municipios metropolitanos del Estado de México, lo que ha provocado que cinco de sus localidades sean considerada de las más violentas en el país, pues tan sólo en  lo que va del año en la entidad se han registrado 190 mil 755 carpetas de investigación por delitos del fuero común, de acuerdo con el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de seguridad Pública (SESNSP).

Tanto la ciudadanía, organizaciones y algunas autoridades consideran que hace falta mayor coordinación entre las corporaciones de los tres órdenes de gobierno para frenar estos delitos que, incluso, aseguran los industriales, ponen en riesgo la inversión en el estado. 

Actualmente los municipios metropolitanos de Ecatepec, Nezahualcóyotl, Naucalpan, Tlalnepantla y Cuautitlán Izcalli se ubican dentro de los 50 de mayor incidencia delictiva, aunque sus autoridades locales aseguran que los delitos van a la baja.

Sin embargo, cifras del SESNSP indican que delitos como robo han ido en aumento, pues mientras en enero se reportaron 10 mil 174 pesquisas para junio la cifra pasó a 11 mil 851. Las carpetas de investigación abiertas por homicidio en mayo en sus distintas modalidades registraron un repunte al alcanzar 336, cuando en enero eran 286. 

El mes con mayor registro de secuestro fue en febrero, con 16, y junio, con 12, mientras que el delito de extorsión se ha mantenido con más de 200 denuncias. 

Según cifras globales, en el último año, delitos como robo disminuyó 2.85%, mientras que el de lesiones aumentó 9.78% en comparación con el año pasado, al igual que el homicidio, con 7.51% y extorsión, con 15.92%, además del feminicidio.

En municipios como Nezahualcóyotl, la extorsión es un delito que ha estado afectando a los comerciantes, quienes deben pagar una cuota y de no hacerlo sufren represalias.

Ya de forma religiosa deben pagar un derecho de trabajar y lo tienen que pagar en silencio, porque si dicen algo le matan a su familia...aquí nos damos cuenta de que, a cada rato, balean a la gente de un restaurante, de un negocio, y ahí dejan a las personas muertas, es el pago que deben cuando deciden ya no regalar el dinero; esto, ante la inoperancia de quienes debían atacar el delito”, apuntó Arturo Hernández, líder social de la organización Tengamos un Sueño. 

Reconoció que, aunque la policía de Nezahualcóyotl ha hechos labores de inteligencia y conoce los lugares donde hay mayor incidencia y qué grupos delincuenciales operan, no puede actuar porque son rebasados.  

Consideró que hace falta mayor coordinación entre las corporaciones policiacas.

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