Cuidado con los biberones; hallan 'estrógeno líquido' en niños

CIUDAD DE MÉXICO, 12 de marzo.- Las alertas comenzaron desde 2006: “Los biberones y otros recipientes plásticos liberan sustancias químicas dañinas para el cuerpo”, afirmaba la Food and Drug Administration (FDA, por sus siglas en inglés), organismo estadunidense que regula los medicamentos, alimentos y otros temas de salud en Estados Unidos. Cuatro años después los expertos recomendaban que las madres regresaran al uso de biberones de vidrio.

Sin embargo, en México y el resto del mundo aún se venden contenedores de leche y de otros alimentos elaborados con plásticos que contienen bisphenol A (BPA, por sus siglas en inglés) y liberan sustancias tóxicas al calentarlos o esterilizarlos dentro del microondas, o bien, de la forma tradicional (“baño María”).

“Estrógeno líquido” del plástico

De acuerdo con Ignacio Camacho Arroyo, investigador en neuroendrocrinología, y profesor titular C del Departamento de Biología de la Facultad de Química de la UNAM, los plásticos liberan sustancias que tienen una composición química parecida a las hormonas humanas.

Los llamados BPA liberan compuestos parecidos a los estrógenos, como el estradiol, que tiene efectos en todos los tejidos de nuestro cuerpo, especialmente en los menores de edad ya que sus organismos inmaduros están más susceptibles en absorber dichas sustancias”, precisó el experto.

Si bien algunas empresas han sustituido los BPA por otros tipos de bisphenol, Camacho Arroyo explica que existen estudios que comprueban que los sustitutos del bisphenol A son aún más dañinos.

La industria plástica del mundo ha tratado de reemplazar sus componentes a fin de hacerlos menos dañinos, pero no lo han logrado de forma certera.

Por ello, lo mejor es cocinar y preparar los biberones del bebé en utensilios hechos de vidrio que no desprenden ningún químico y se evita ingerir alimentos contaminados”, recomendó Camacho Arroyo.

Los daños

Las hormonas humanas son “mensajeros” químicos que se producen en el organismo, en las glándulas y salen al torrente sanguíneo para generar diversas acciones en los diferentes tejidos que tiene el cuerpo.

En el caso de las hormonas sexuales, están en mayor concentración en un género que en otro y se producen en las gónadas (testículos y ovarios), además realizan funciones esenciales para la reproducción”, destacó el experto de la UNAM.

En este sentido, las hormonas sexuales femeninas se llaman estrógenos, hay dos tipos progesterona y estradiol; en el varón, la hormona predominante es la testosterona. Las primeras se producen en los ovarios; y la segunda en los testículos.

Cuando se beben o comen alimentos calentados o preparados en plásticos se están consumiendo sustancias parecidas a los estrógenos y se ha demostrado que las niñas que estuvieron expuestas a los BPA comienzan a menstruar más pronto; en los varones, se observa el crecimiento de las mamas”, alertó Camacho Arroyo.

Por su parte, la publicación oficial de la Academia Americana de Pediatría destacó un estudio lidereado por el investigador Joe M. Braun en el que se precisó, en 224 mamás y sus hijos menores de tres años de edad, el daño por BPA en el comportamiento de los niños.

En el texto se explica que existe deficiente control de las emociones y mala la conducta en los pequeños estudiados, especialmente en las niñas, y ello se debe a la exposición que tuvieron los pequeños al BPA por el uso, desde su nacimiento hasta los tres años, de contenedores y biberones de plástico, la investigación titulada Impact of Early- Life Bisphenol A Exposure on Behavior and Executive Function in Children, también arrojó que el nivel de BPA en la orina de los bebés fue aún mayor porque sus madres, en el momento del embarazo, también utilizaron recipientes de plástico.

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