María Katzarava desnuda conexión con su alma gitana

La soprano mexicana María Katzarava iniciará los festejos por sus 25 años como cantante con la interpretación de El Amor Brujo, de Manuel de Falla, en su versión original de 1915, una de las obras más universales de la música española, en el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris, el martes 11 de noviembre, a las 20:00 horas.

Además, en entrevista con Excélsior, la soprano hace un balance de su trayectoria, de su paso por la Compañía Nacional de Ópera y adelantó que en 2026 lanzará cuatro grabaciones.

TE RECOMENDAMOS: Grabarán, en los Estudios Churubusco, la ópera Salomé

Primero habla de El Amor Brujo, presentación que contará con la escenificación de una bailaora de danza flamenca, la actuación de Hernán del Riego y la Orquesta Iberoamericana, bajo la batuta de Isabel Costes.

Este montaje ya tuve la fortuna de presentarlo, en octubre de 2023, en Gran Canaria, con la maestra Costes, quien lleva la batuta, y realmente puedo decirte que es una obra preciosa, muy fuerte, bellamente escrita y con una producción minimalista, pero que funciona muy bien”, explica.

¿Por qué le interesó cantar El Amor Brujo?, se le pregunta a Katzarava. “Es una obra maravillosa que fue estrenada en 1915 y lleva el subtítulo de Gitanería en dos cuadros; es un ballet con cante jondo o canto flamenco que combina elementos de la cultura gitana-andaluza, con música orquestal moderna”.

¿Cuál es la trama? “El argumento se centra en Candelas, el personaje que voy a interpretar, una joven gitana apasionada que está profundamente enamorada de Carmelo.

Pero aquí aparece un detalle fantástico, en donde Candelas es perseguida por el espectro de su antiguo amante, quien era un gitano celoso, tóxico y malvado que la atormenta desde la muerte. Así que ella y Carmelo idearán un plan para romper el hechizo y vencer al espectro y así  triunfe el amor sobre la muerte y el pasado”, explica.

¿Qué le gusta personalmente de esta obra? “La música me gusta, porque, amén de la voz cantada, puedo involucrarme en la parte teatral y eso no es poca cosa.

“A mí me gusta el momento en que Candelas hace una invocación a Belcebú para tratar de alejar el espectro y ser feliz; es una invocación fuerte y está muy bien descrita, porque da miedo y es perturbadora...Me gustan estos personajes fuertes que evocan la magia y esto es lo que quiero mostrar en México: otro lado de María”, asevera.

CON RECORTES

Katzarava también hace un corte de caja de sus primeros 25 años de trayectoria. “Me siento feliz y muy realizada, porque como artista no me debo nada a mí ni a la vida. La vida me ha dado mucho y a veces hasta más de lo que imaginaba.

Ahora quiero abordar ópera contemporánea y ópera mexicana también, continuar con proyectos como los que dediqué a Édith Piaf o al bolero, como parte de mi celebración por mis 25 años de carrera, que cumpliré en enero próximo.

¿Cómo cerró su ciclo con la Compañía Nacional de Ópera? “Agradezco la oportunidad de haber estado un año y ocho meses en el INBAL. Aprendí mucho a entender lo que sucede atrás del escenario y que muchas veces, como artistas, no conocemos, como entender cómo se hace un presupuesto y cómo se lidia con los problemas, porque éstos ocurren a todas horas.

“Es algo que para mí ha sido un tesoro y, en particular, por supuesto, estoy agradecida con Lucina Jiménez, quien me dio la oportunidad. Por supuesto, fue muy breve mi paso por ahí, pero desde un inicio comenté que yo no iba a ser transexenal”, aclara.

¿Por qué lo decidió así? “Porque soy artista y, simplemente, había que cerrar el sexenio. Por supuesto, me tocó el más difícil que se ha visto, donde además se celebraba el 90 aniversario del Palacio, donde no había fechas, no había presupuesto y había mucho recorte.

“Pero, con todo y los recortes fue posible hacer una temporada con cinco óperas, donde logramos que mensualmente se hicieran audiciones nacionales, se convocó a muchos cantantes para que tuvieran acceso al escenario más importante de México, y también se amplió la edad para el ingreso a los cantantes del Estudio de la Ópera de Bellas Artes (EOBA)”, explica.

¿Pudo quedarse más tiempo en el cargo? “No era mi deseo. Pero si me hubiera quedado, habría tenido la oportunidad de ampliar y evolucionar un proyecto que, por supuesto, no me dio tiempo.

“Porque en 11 meses no puedes hacer más y porque no todo depende del que está ahí. Yo me quedo contenta con el saldo, con lo que se logró, con los cambios realizados. No sé, a lo mejor en un futuro tendré el interés de volver a algo así, pero, por ahora, de ninguna manera, porque estoy muy feliz como artista”, asevera.

HUELLA VOCAL

Por último, adelanta que en 2026 lanzará cuatro grabaciones con la pianista Argentina Durán.

La primera será con obras de Agustín Lara, Carlos Jiménez Mabarak, María Grever, Daniel Catán y Jorge del Moral. Luego vendrá un disco con repertorio francés, otro con eslavo y uno más que aún está en proceso de definición”.

CONSULTA AQUÍ LAS NOTICIAS DE ÚLTIMA HORA

*mcam