Arte y arquitectura: un diálogo creativo entre Arnaldo Coen y Felipe Leal

El arte y la arquitectura comparten el trazo, el dibujo y la geometría para confeccionar la idea primigenia. Pero también el espacio físico que permite la creación de una obra y la inspira.

Este diálogo permanente entre ambas disciplinas motivó la charla entre el artista visual Arnaldo Coen (1940) y el arquitecto Felipe Leal (1956), publicada en Conversación sobre arte y arquitectura, el libro más reciente de la colección Semillero del Seminario de Cultura Mexicana que, nacida en 2019, ya cuenta con 30 títulos.

Son libros de bolsillo, asequibles, de divulgación. La idea es que cada uno de los miembros del Seminario hiciéramos un texto de reflexión sobre nuestras respectivas disciplinas. Hay de todo, no sólo arte u ópera, sino derechos humanos, la transparencia, las matemáticas o el cosmos”, explica Leal en entrevista.

Con Arnaldo charlé sobre cuáles son los vínculos entre arte y arquitectura, en un tono coloquial. Arrancamos con una reflexión sobre la riqueza y la maravilla de tener una conversación con un colega. Él es hijo del lingüista Arrigo Coen, un conocedor de la lengua. Es un gran conversador y conoce mucho de arte.

Le pregunté qué tanto estaba presente la arquitectura en su obra. Cuenta que él es un amante de la geometría y esto lo comparte la arquitectura. Él busca la tridimensionalidad con su pintura, le da volumen. Es un amante de la perspectiva”, agrega.

El proyectista egresado de la UNAM dice que “la materia del arquitecto es el espacio, como la del músico el sonido. En la pintura es el trazo, el color, pero también el espacio. Las pinturas te generan una atmósfera, te producen un ambiente”.

Reconoce que antes los elementos escultóricos estaban totalmente integrados a la arquitectura, como en la Catedral de Notre Dame en París o en el Polyforum Cultural Siqueiros y la Biblioteca Central de Ciudad Universitaria, en México, que son murales-edificio.

El proceso se ha ido separando. Ahora puedes diseñar un edificio moderno y colocar afuera una escultura de Henry Moore. Las obras se desprendieron de los muros. Pero la presencia y el diálogo continúan”, agrega.

Leal admite que el arte ha influido en su obra arquitectónica, como cuando diseñó el estudio del artista visual Vicente Rojo en Coyoacán, cuya fachada evoca su serie pictórica México bajo la lluvia.

Quien en septiembre próximo cumple dos periodos, de tres años cada uno, al frente del Seminario de Cultura Mexicana adelanta que para 2026 exhibirá tres exposiciones importantes: Arnaldo Coen, en enero y febrero; el fotógrafo Rogelio Cuéllar, en marzo y abril; y la artista de la lente Paulina Lavista, para mayo y junio.

cva