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'Atrapado sin salida'. 40 años.

Lucero Solórzano

Lucero Solórzano

30-30

Estrenada en noviembre de 1975, a cuarenta años de distancia es  ya un gran clásico y por varios motivos. De título original One flew over the Cuckoo’s Nest-Un vuelo sobre el nido del cucú, Atrapado sin salida está basada en la novela homónima de 1962, después convertida en obra de teatro, del escritor Ken Kesey considerado un autor de culto de esa década.

Es todo un ícono de la cultura popular de los tumultuosos años setenta. Su versión teatral fue protagonizada previamente por Kirk Douglas, quien adquirió los derechos con la intención de llevarla al cine. Tardó mucho en encontrar un estudio interesado, pues todos rechazaban el proyecto. Finalmente lo puso en manos de su hijo Michael Douglas, que con el libro bajo el brazo se dio a la tarea de encontrar inversionistas para la que sería su primera película como productor. Fue Saul Saentz, quien también debutaría como productor con Atrapado sin salida, quien se interesó en llevar a la pantalla esta historia.

A Miloš Forman, quien venía de trabajar en el cine de su país, la entonces Checoslovaquia, y que ya había filmado una cinta en Estados Unidos, le envían el libro y de inmediato acepta ser el director de la película.

Varios actores se presentaron al casting para encontrar a quien interpretaría al protagonista McMurphy: James Caan, Gene Hackman, Marlon Brando. El propio Kirk Douglas soñaba con encarnarlo en la pantalla tras su experiencia en el teatro, pero tuvo que declinar pues ya se pasaba de la edad del personaje, 38 años. Finalmente fue Jack Nicholson quien cuadró a la perfección con las características del rol. Su estilo irreverente, desenfadado y su indudable talento, la  potencia y energía que imprime a sus interpretaciones, y sus dotes para la improvisación, resultaron elementos ideales para contar la historia de este delincuente, acusado de estupro, que es  trasladado de una prisión  a una institución para enfermos mentales en la que cree que las condiciones serán menos exigentes.

La película, y el libro originalmente, es un alegato contra el trato a los internos con trastornos mentales que sufren todo tipo de abusos, violencia, uso de la fuerza, electrochoques, sedación y hasta lobotomías. El villano es la feroz enfermera Ratched, una metódica y autoritaria mujer con piel de cordero interpretada por Louise Fletcher. Con sus métodos, Ratched mantiene en orden y sometidos a los enfermos, pero nulifica su posibilidad de reintegrarse al mundo, y sobre todo pisotea sus derechos y su dignidad.

Las personalidades de McMurphy y Ratched chocan de frente y se establece una pugna por el poder,  pues él cobra conciencia de lo que pasa con el grupo de enfermos y el trato inhumano que sufren, se convierte en su amigo y líder  e inyecta nueva vida y motivaciones entre ellos, les enseña a rebelarse, y eso le costará muy caro.

Atrapado sin salida tuvo un éxito inmediato de público y crítica y en 1975 se convirtió en la segunda película en ganarse lo que los estadunidenses llaman “The big five”, es decir, los 5 premios Óscar más codiciados y de mayor trascendencia: Mejor Película, Director, Actor, Actriz y Guión. Antes sólo lo había logrado Frank Capra en 1934 por Sucedió una noche, y lo repitió Jonathan Demme con El silencio de los inocentes en 1991.

Cuarenta años después, Atrapado sin salida es una historia vigente, atemporal, una gran película que se deja ver sin haber envejecido en absoluto.

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