Toda Australia en un solo lugar: la ciudad de Mount Isa

“Oh, México. Cómo me gustaría poder conocer ese lugar, darl’ (expresión coloquial australiana que denota afecto)”. Muchos australianos me han dicho lo mismo, pero nadie de manera tan encantadora como la joven empleada de un hotel, a quien conocí hace poco en la ciudad australiana de Mount Isa. El singular nombre y los rasgos físicos de la joven despertaron mi interés en preguntarle cuál era el lugar de origen de su familia. “Nepal”, respondió la joven, en un idioma inglés con un muy pronunciado acento australiano del norte de mi país.

De pronto me percaté de lo nada sorprendente de esa respuesta en Mount Isa, una ciudad de 20 mil habitantes ubicada en medio de ese vasto territorio al interior de mi país: el outback. No recuerdo haber estado jamás en una comunidad tan multiétnica, ni siquiera en Australia, pues desde que llegué a Mount Isa tuve contacto con personas procedentes de, literalmente, todas las latitudes.

Mount Isa también es el hogar de una extensa comunidad de indígenas australianos, quienes se enorgullecen de que, entre sus “hijos” favoritos, figura William Barton (el máximo ejecutante del instrumento musical denominado didgeridoo). Además, el golfista Greg Norman y el tenista Pat Rafter también son originarios de Mount Isa.

Aun cuando esta región de mi país ha sido el hogar de la etnia Kalkadoon desde tiempos inmemoriales, los orígenes de la ciudad datan de hace casi un siglo, cuando los buscadores de minerales descubrieron uno de los yacimientos más ricos del mundo, que incluye cobre, plata, zinc, plomo y oro. Desde entonces, Mount Isa ha atraído, y sigue atrayendo, a personas de todo el mundo que buscan fortuna.

Poco después, el Gran Ferrocarril del Norte, una proeza de ingeniería australiana, fue ampliado hasta el puerto de Townsville, a más de mil kilómetros de distancia y en el otro lado de la Gran Cordillera Divisoria de Australia. Hoy en día, los trenes transportan minerales de una de las minas de mayor tamaño y más productiva del mundo, en ruta a diversos países. Los trenes atraviesan zonas de cría de ganado de donde proviene carne de res de alta calidad, producto de cruzas de razas desarrolladas en Australia, específicamente para las áridas planicies de mi país.

Ubicada en una región considerada muy remota, inclusive por la mayoría de los australianos, en ciertas maneras Mount Isa es un fiel reflejo de mi nación.

Maravillosamente diversa culturalmente (aunque con problemas de larga data relacionados con situaciones de desventajas que afectan a las comunidades indígenas), Mount Isa ejemplifica los innovadores sectores australianos de los recursos y la agricultura, cuyas exportaciones contribuyen decididamente a la economía de mi país. Ambos sectores ofrecen tecnologías y prácticas que ya empiezan a estar presentes en México. Al igual que en Mount Isa, éstas prometen impulsar la productividad y el desarrollo económico de México.