Pablo Carrillo

Pablo Carrillo
La neurona

Ruge...

21 de Julio de 2019

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Si bien las encuestas publicadas por las agencias investigadoras de mercados hablan de un predominio del América, seguido de las Chivas con un porcentaje muy cercano en cuanto a las preferencias en torno al veintiuno por ciento de la popularidad en ambos casos, los Pumas de la UNAM gozan de aproximadamente un diez por ciento de las preferencias, seguido muy cerca por el Cruz Azul y los Tigres, que han ascendido notablemente en los últimos años gracias al enorme éxito y títulos obtenidos.

Pumas parecía perder el rumbo y la identidad después de gestiones muy deficientes a cargo del presidente del patronato en tiempos recientes, números rojos en las finanzas, temporadas con muy poco que escribir a casa, pero, sobre todo, un ascendente número de jugadores con muy poca identidad y cercanía con los colores azul y oro.

Ya ni hablar de cuando un expresidente del patronato decidió que era buena idea contratar a un extécnico americanista ante el lógico rechazo de la afición universitaria, ¿en qué cabeza cabía esa idea? Poco a poco, los fieles se han alejado del equipo, sobre todo, por las malas decisiones, como la citada con antelación. La gestión de Rodrigo Ares de Parga ha sido, en lo financiero, de libro de texto, pues finalmente se tienen números positivos, las instalaciones de los Pumas son de primer mundo, y se ha dado un paso fundamental en lo deportivo, pues el actual presidente del equipo de la Máxima Casa de Estudios del país, optó por regresar al Pedregal de San Ángel a un expuma de blasones, primer entrenador campeón mundial de nuestro país, me refiero a Chucho Ramírez, un caballero y hombre de futbol, que ha vivido y vibrado cuando jugador con los colores azul y oro, que se ha distinguido por tener un ojo clínico en el descubrimiento de talentos, y que había sido lamentablemente desperdiciado por el futbol nacional.

La primera gran decisión de Chucho fue buscar los servicios como entrenador de Miguel González, Míchel, un hombre histórico en el Real Madrid y que entiende y ha vivido la formación en la cantera madridista, cuestión que no sólo respeta, sino que practica, y para muestra un botón, los universitarios jugaron con siete canteranos, más Vigón, para sumar ocho nacionales en su debut en la liga, con tres extranjeros, como sucedía antaño en ese equipo, uno por línea, y las cosas se han dado bien al ganar de visitantes en casa del recién ascendido San Luis. Los Pumas rugen, regresan a los valores que les vieron brillar en los años gloriosos, pero lo más importante es que mostraron una gran personalidad con ocho mexicanos en la cancha, por cierto, sus rivales jugaron sólo con cuatro.

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