Admirable II

No hay mal que por bien no venga…

El mundo ha llegado al primer año de la terrible pandemia, en la que el dolor y la zozobra se han generado en innumerables hogares del planeta y de nuestro país, también hemos sido testigos de hechos admirables, y el deporte no ha sido la excepción.

Sigo pensando que todos los involucrados en organizar el deporte profesional por todos los rincones del planeta son, francamente, heroicos, como para hacerles un homenaje en cada evento que se desarrolle, pues han tenido que llevar, sin viento, a sus embarcaciones a buen puerto, con esfuerzo y mucha fe.

Sencillamente, el desplome en los ingresos nos haría pensar que el deporte profesional, en todos los puntos cardinales de la geografía mundial, prácticamente desaparecería. Sin intentar involucrarme en los modelos de negocio de los clubes profesionales, resulta inevitable el aquilatar que la venta de entradas representa un porcentaje muy importante de sus ingresos, ya ni hablar de la disminución que se ha tenido en los ingresos publicitarios, de ahí que muchos deportes, como el tenis profesional, hayan reducido drásticamente los premios para poder seguir adelante.

Sin embargo, y buscando un ángulo positivo, me remito a lo que sucede en algunos equipos del balompié nacional que, ante la escasez de liquidez y severos problemas de flujo en las arcas de sus tesorerías, han optado por echar mano de los talentos que se han generado en las fuerzas básicas, con grandes surgimientos. Habitualmente, la costumbre era importar jugadores sin ton ni son, sencillamente, las oportunidades para los jovencitos canteranos estaban muy acotadas, y ahora, ante la estrechez financiera, el camino ha sido el valorar y echar al ruedo a los talentos generados en los propios clubes.

El pasado domingo por la noche, me resultó muy interesante observar a los Santos de la Laguna que dirige Jorge Hermano Almada con dos jovencitos de dieciocho años de titulares, el delantero Santiago Muñoz, quien jugó su tercer partido como titular haciendo un gol y llegando a dos anotaciones en la presente campaña —ojo con él—, así como el mediocampista Omar Campos, quien se ha ganado un puesto titular en ese equipo en cinco encuentros del presente torneo, con un gol anotado, una maravilla observar a tantos talentos con un porvenir muy halagador. Además de felicitar al entrenador que asume esos riesgos, es loable la labor de los equipos que han sembrado muchos recursos y trabajo en sus fuerzas básicas, para cosechar en los momentos actuales tan complejos.

Lo dicho, no hay mal…

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