¿Quién fue Ángel Urraza?, aquel joven que vendía tacones de hule

Cuando el empresario español avecindado en México dejó este plano terrenal, su nombre se convertiría en una importante avenida que cruza la Colonia del Valle, también conocido como parte de el Eje 6 Sur. 

De acuerdo a su ficha en el “Catálogo de Extranjeros” de Gutiérrez Galindo, p. 554, Ángel Urraza nació en Alonsotegui (anteiglesia de Alonsotegi, Vizcaya, España), el 1 de marzo de 1891.

Como buena parte de los jóvenes españoles de la época, salió de España en edad militar, y llegó a Veracruz el 23 de agosto de 1910, a los 19 años.

Ángel Urraza se consolidó como uno de los empresarios más notables que han iniciado sus capitales en la Comarca Lagunera. No era sencillo forjarse el destino en aquellos años, así que antes de encontrar su vocación final, Urraza fue agricultor (trabajos agrícolas en la hacienda de Santa Teresa propiedad de Rafael Arocena), banquero, exportador, asegurador, afianzador, “amante de las artes”, y, finalmente, el gran precursor de la industria hulera mexicana.
 
Uno de los forjadores de México.

De España llegó a Veracruz, de ahí se estableció por un tiempo en Torreón, y finalmente viajó a lo que entonces se conocía como el Distrito Federal. 

En la Comarca Lagunera comenzó a crear un vasto capital, primero como empleado de la familia Arocena, posteriormente, como fundador de la Compañía Agrícola de Lequeitio.

En 1928, Ángel Urraza marchó hacia la capital del país, donde emprendió negocios relacionados con la manufactura de tenis, y otros productos de hule. 

Ese año Ángel Urraza, al frente de una pequeña empresa de tacones de hule, fundó la Compañía Manufacturera de Artefactos de Hule Euzkadi, S.A.

La perseverancia en el trabajo, unida a la calidad del producto y a su visión hacia el futuro, creó en forma extraordinaria la empresa más importante de México y con mayor penetración de mercado en la venta de llantas.

Con el tiempo y con mucha visión, se asoció, en 1936, con la empresa fundada por Benjamín Franklin Goodrich, de Akron, Ohio, empresa que se convertiría en la mundialmente conocida Compañía Goodrich-Euzkadi.

Se acordó la fusión de algunas compañías, aportando la Manufacturera de Productos de Hule Euzkadi el 65% del capital y the BF Goodrich Co. el resto, con lo cual el Grupo Mexicano adquirió el control de la nueva empresa que nacía como Compañía Hulera Euzkadi, S.A.

Fue de tal magnitud de impulso al desarrollo de México, que al morir, en 1947, ostentaba los siguientes cargos: Presidente de la Compañía Hulera Euzkadi, la Compañía Comercial Euzkadi, la Canadá Dry de México, la Compañía Goodrich Peruana, de la Sociedad Española de Beneficencia de 1939 a 1947,  del Club de Futbol España de 1929 a 1930 y de 1932 a 1933.

Así mismo fue consejero de numerosas empresas entre ellas, Seguros Monterrey, Banco de Londres y México, Seguros la Provincial. 

Que una calle de la colonia del Valle en la ciudad de México lleve el nombre de este ilustre empresario español, es solo parte del homenaje que le rendiremos, desde ahora, cada vez que crucemos Ángel Urraza, el Eje 6 Sur. 

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